viernes, 14 de agosto de 2009
Palermo sigue calentando motores: hizo los dos goles en la práctica de fútbol en la que los titulares les ganaron 2-0 a los suplentes.
No importa mucho que haya sido una práctica de fútbol ante los suplentes. Tampoco interesa tanto que el penal que convirtió haya existido solamente para la vista del árbitro Basile. Mucho menos que los dos centrales rivales (Alfonso y Ruiz), que lo perdieron en el segundo gol, no tengan ni un solo minuto en Primera. Martín Palermo empezó a calentar motores de cara a un semestre en el que Boca necesitará de sus goles para cristalizar en la red lo que pueda generar el circuito creativo del equipo. Dos goles, un fusilamiento para García desde los 12 pasos y un cabezazo en forma de palomita, para el 2-0 de los titulares en la primera práctica de fútbol en Casa Amarilla del ciclo Coco.
El último amistoso de la gira por Europa, ante el AEK en Atenas, marcó el puntapié inicial del 9 en materia de goles en esta nueva etapa. Se sabe que al Titán le cuesta un poco ponerse a punto en cada pretemporada. Por su físico y por su edad, tarda en lograr su mejor forma. Pero en ese partido se lo vio mejor que en los anteriores, más fino. Y ayer, en los 45 minutos que duró la práctica de fútbol, anduvo más participativo, más pivoteador, menos hombre de área que lo habitual. Seguramente, el Coco se habrá quedado conforme. Durante la gira, el DT había remarcado la falta de gol que sufría el equipo. Hasta que apareció "el goleador", como Basile suele llamar a Palermo desde su primera etapa en Boca.
En el penal (no hubo infracción de Gunino a Palermo), le rompió el arco a García. Su fierrazo de zurda rozó el travesaño y se incrustó en la red a una velocidad supersónica. Ni la vio el arquero ni muchos de los que observaban de afuera. En el segundo, Martín le puso el moño (o la cabeza) a una linda jugada que arrancó Riquelme, sacándose dos hombres de encima para abrírsela a Insúa, y que el Pocho decoró con un centro-asistencia preciso. La palomita del 9, arqueando su cuerpo y zambulléndose en el césped, cruzó el arco y entró por el primer palo.
Pero la buena noticia de los goles de Palermo que ya empezaron a venir no es el único motivo de satisfacción para Basile. Pese a la ausencia de varios titulares, como Cáceres, Medel y Battaglia (afectados a sus respectivas selecciones), y Paletta y Morel (con molestias), el nuevo Boca dejó una buena imagen. En especial, Ariel Rosada. El 5, el último refuerzo en llegar al club, actuó en el círculo central y se adueñó del mediocampo. Quitó, luchó, mostró presencia, fue a cubrir hacia los dos costados, apretó más arriba y también jugó. Una más que interesante producción como para darle otra alternativa en el medio a un Basile que lo tiene muy en cuenta. "Yo lo pedí. Me encanta", le dijo el miércoles a Olé.
Para destacar, también, la presencia de arriba de Forlin en el área rival, el despliegue de Insúa para retroceder y sobrepasar la línea de la pelota, la sobriedad de Sauro, algunas cositas de Román, el desborde de Mouche... Todo muy lindo pero el 9, como hizo ayer, la tiene que meter.
Si lo vende a Muñoz en esa cifra, será el mejor negocio de Boca en los últimos 50 años.Edgardo Bauza
Porque es imposible ponerle un precio a un chico que tiene menos de diez partidos en Primera. Estuve cinco años como coordinador de Central y fui testigo del desarrollo de muchos jóvenes. Mi experiencia dice que los juveniles deben pasar por distintas etapas para después consolidarse como jugador. Deben salir bien parados de una serie de cuestiones como la gloria, la alegría, la frustración, la incertidumbre... Son situaciones que definen la realidad de un futbolista. Y más en un puesto como el de marcador central.
A Muñoz lo enfrenté cuando dirigía a la Liga de Quito y me pareció que tenía mucha personalidad, se mostró muy seguro. Pero tanto en la ida como en la vuelta, Boca jugó muy bien, estuvo sólido en todas sus líneas y nosotros, por distintas cuestiones, anduvimos muy mal. Entonces, el chico tuvo pocos mano a mano. Se nota que tiene mucho futuro aunque hoy sea una buena promesa...
A Muñoz lo enfrenté cuando dirigía a la Liga de Quito y me pareció que tenía mucha personalidad, se mostró muy seguro. Pero tanto en la ida como en la vuelta, Boca jugó muy bien, estuvo sólido en todas sus líneas y nosotros, por distintas cuestiones, anduvimos muy mal. Entonces, el chico tuvo pocos mano a mano. Se nota que tiene mucho futuro aunque hoy sea una buena promesa...
"¿Qué habré hecho yo para valer tanto y lesionado?"
Ahí, sentado en el sillón de su departamento en Caballito, descalzo, relajado, Ezequiel Muñoz descansa luego de otro intenso día de recuperación. Pero también, parece, lo hace de este sacudón con membrete italiano que no sólo lo conmueve a él sino a su familia, a Boca, al fútbol mismo. Ahí donde está, también, parece meditar, intentar salir de la incredulidad. "Lo que pienso es que... Pienso eso, que tengo siete partidos y encima estoy en rehabilitación. Y me pregunto, claro: '¿Qué habré hecho yo para valer tanto y lesionado?' No sé, será por todo el sacrificio que le metí de chico, será porque rendí bien, será porque después de algo malo viene algo bueno...", se mete en la charla con Olé.
Será algo de eso, o todo, pero la cuestión es que la Fiorentina se fijó en él, sin importarle la rotura de ligamentos cruzados en una rodilla sufrida en abril, ni la edad (18 años), ni los partidos en Primera (siete). Y se fijó con una oferta sorprendente: préstamo de un millón de euros por un año con opción por el 50% de otros 6.000.000. "Cuando escuché eso, se me movió el piso. Lo increíble, además, es que me venían siguiendo desde antes del debut. Me siento un privilegiado. Si me toca irme o quedarme. Ir a Italia es importante para mi carrera y si no, sigo en Boca, el club que quiero, ¿qué puedo decir?".
Su padre José Luis lo escucha con atención.También Estefanía, su novia, deportista como él, subcampeona del mundo en patín artístico. "La conocí por el chat y la fui a buscar a Rosario. Ojo, ella no sabía que yo era jugador de Boca, eh. Tenemos mucho en común: tiempos de entrenamientos que respetar, obligaciones, competencias", cuenta. En la foto faltan el otro José Luis, hermano mayor con apenas... 20 años. Y mamá Graciela, con turno impostergable en la peluquería.
"Ellos hicieron mucho por mí, estar lejos de la familia tan chico no es fácil. Me vine de Pergamino a los 14. Dejé la secundaria allá para hacerla acá, mis amigos, mi juventud. Es cierto, es un sacrificio por hacer lo que me gusta. Pero... La gente dice que es fácil la vida del jugador de Primera. ¿Y todo lo que hizo ese jugador antes de llegar? Siempre uso una frase: 'No envidies mi progreso sin conocer mi sacrificio', tira este defensor que, antes de la lesión, había sido llamado por Maradona a la Selección local. "Otra cosa increíble. No, si me viene pasando de todo... Esto es como si fuera una película".
Suelto al hablar, conceptual, Ezequiel parece tener los pies sobre la tierra. Y todo, claro, a pesar de que su vida cambió de repente en cuatro años. No hace mucho era el chico que había dejado de jugar en Viajantes para sumarse a una empresa, instalada en Rosario, que preparaba juveniles para ser probados en clubes de Buenos Aires. "Es raro, sí, porque no es que jugás en un equipo, sino que sos parte de un plan de perfeccionamiento. Te ponen a punto en lo físico y en lo futbolístico, te enseñan también de táctica y después te llevan a los clubes. Estuve nueve meses y la primera prueba fue en Boca. Fui tres días y quedé", recuerda.
En Boca empezó en la liga paralela y se ganó la chance de pasar a AFA. Arrancó en Octava, fue capitán de la Séptima, salió campeón en Sexta y saltó a la Reserva. Esto, el año pasado."Y luego Ischia me hizo debutar en la Sudamericana, con Liga de Quito. Aún recuerdo la primera práctica: marqué a Palacio y Palermo y en un momento, me olvidé de la pelota, los miraba a ellos. Decía: '¿Qué estoy haciendo acá?'", confiesa él, que tiene de espejos al Ratón Ayala y a Bermúdez. No de casualidad muchos lo ven como pichón del Patrón.
Con Gastón Sauro, su compañero de zaga en estos años, la rompieron en el verano. "Fuimos inseparables. Hasta compartimos la pieza en la pensión. Si me voy, lo extrañaré. Aunque por ahí me lo llevo algún día. Es un fenómeno. Y habla bien italiano, eh. El, como todos, me pregunta: '¿Chiquito, te vas?' Hasta los chicos de la pensión están asombrados. Aunque yo no me siento un ejemplo. Les digo que no se fijen en mí, sino en Palermo o Riquelme, que con todo lo que ganaron, van por más".
Ahí, sentado en el sillón, está él. Ezequiel Muñoz, 18 años, el pichón del Patrón, el que aún tiene dos meses y medio de trabajo para volver a jugar, el que enloquece a la Fiore, el dueño de una historia gigante.
Será algo de eso, o todo, pero la cuestión es que la Fiorentina se fijó en él, sin importarle la rotura de ligamentos cruzados en una rodilla sufrida en abril, ni la edad (18 años), ni los partidos en Primera (siete). Y se fijó con una oferta sorprendente: préstamo de un millón de euros por un año con opción por el 50% de otros 6.000.000. "Cuando escuché eso, se me movió el piso. Lo increíble, además, es que me venían siguiendo desde antes del debut. Me siento un privilegiado. Si me toca irme o quedarme. Ir a Italia es importante para mi carrera y si no, sigo en Boca, el club que quiero, ¿qué puedo decir?".
Su padre José Luis lo escucha con atención.También Estefanía, su novia, deportista como él, subcampeona del mundo en patín artístico. "La conocí por el chat y la fui a buscar a Rosario. Ojo, ella no sabía que yo era jugador de Boca, eh. Tenemos mucho en común: tiempos de entrenamientos que respetar, obligaciones, competencias", cuenta. En la foto faltan el otro José Luis, hermano mayor con apenas... 20 años. Y mamá Graciela, con turno impostergable en la peluquería.
"Ellos hicieron mucho por mí, estar lejos de la familia tan chico no es fácil. Me vine de Pergamino a los 14. Dejé la secundaria allá para hacerla acá, mis amigos, mi juventud. Es cierto, es un sacrificio por hacer lo que me gusta. Pero... La gente dice que es fácil la vida del jugador de Primera. ¿Y todo lo que hizo ese jugador antes de llegar? Siempre uso una frase: 'No envidies mi progreso sin conocer mi sacrificio', tira este defensor que, antes de la lesión, había sido llamado por Maradona a la Selección local. "Otra cosa increíble. No, si me viene pasando de todo... Esto es como si fuera una película".
Suelto al hablar, conceptual, Ezequiel parece tener los pies sobre la tierra. Y todo, claro, a pesar de que su vida cambió de repente en cuatro años. No hace mucho era el chico que había dejado de jugar en Viajantes para sumarse a una empresa, instalada en Rosario, que preparaba juveniles para ser probados en clubes de Buenos Aires. "Es raro, sí, porque no es que jugás en un equipo, sino que sos parte de un plan de perfeccionamiento. Te ponen a punto en lo físico y en lo futbolístico, te enseñan también de táctica y después te llevan a los clubes. Estuve nueve meses y la primera prueba fue en Boca. Fui tres días y quedé", recuerda.
En Boca empezó en la liga paralela y se ganó la chance de pasar a AFA. Arrancó en Octava, fue capitán de la Séptima, salió campeón en Sexta y saltó a la Reserva. Esto, el año pasado."Y luego Ischia me hizo debutar en la Sudamericana, con Liga de Quito. Aún recuerdo la primera práctica: marqué a Palacio y Palermo y en un momento, me olvidé de la pelota, los miraba a ellos. Decía: '¿Qué estoy haciendo acá?'", confiesa él, que tiene de espejos al Ratón Ayala y a Bermúdez. No de casualidad muchos lo ven como pichón del Patrón.
Con Gastón Sauro, su compañero de zaga en estos años, la rompieron en el verano. "Fuimos inseparables. Hasta compartimos la pieza en la pensión. Si me voy, lo extrañaré. Aunque por ahí me lo llevo algún día. Es un fenómeno. Y habla bien italiano, eh. El, como todos, me pregunta: '¿Chiquito, te vas?' Hasta los chicos de la pensión están asombrados. Aunque yo no me siento un ejemplo. Les digo que no se fijen en mí, sino en Palermo o Riquelme, que con todo lo que ganaron, van por más".
Ahí, sentado en el sillón, está él. Ezequiel Muñoz, 18 años, el pichón del Patrón, el que aún tiene dos meses y medio de trabajo para volver a jugar, el que enloquece a la Fiore, el dueño de una historia gigante.
El equipo conducido por Alfio Basile retomará esta tarde con los entrenamientos.
Luego de una jornada ardua como la de ayer en la que hubo doble turno, el entrenador Alfio Basile decidió darle unas horas más de descanso a sus futbolistas. En consecuencia, decidió que la práctica de hoy se realice por la tarde.
Alrededor de las 16 hs., los futbolistas volverán a pisar el cesped de la cancha principal del complejo Pedro Pompilio para continuar con los entrenamientos de cara al inicio de una nueva temporada, que incluye Torneo Apertura y Copa Sudamericana.
La novedad de la práctica de hoy será que Basile podrá contar con el plantel completo. Con la vuelta de Battaglia, Cáceres y Medel de sus respectivas selecciones, el DT Xeneize tendrá a todos sus futbolistas en el entrenamiento.
Bien descansados, los futbolistas realizarán la anteúltima práctica de la semana ya que el sábado seguirán con los trabajos para luego poder tener el domingo libre.
Alrededor de las 16 hs., los futbolistas volverán a pisar el cesped de la cancha principal del complejo Pedro Pompilio para continuar con los entrenamientos de cara al inicio de una nueva temporada, que incluye Torneo Apertura y Copa Sudamericana.
La novedad de la práctica de hoy será que Basile podrá contar con el plantel completo. Con la vuelta de Battaglia, Cáceres y Medel de sus respectivas selecciones, el DT Xeneize tendrá a todos sus futbolistas en el entrenamiento.
Bien descansados, los futbolistas realizarán la anteúltima práctica de la semana ya que el sábado seguirán con los trabajos para luego poder tener el domingo libre.
Julio Cáceres, Gary Medel y Sebastián Battaglia vuelven a entrenarse esta tarde junto al resto del plantel.
Poné los fideos que estamos todos. Es que Julio Cáceres, Gary Medel y Sebastián Battaglia, quienes se habían quedado en Europa para participar de una nueva fecha FIFA junto a las selecciones de sus respectivos países, retornaron a Buenos Aires. Ahora sí Basile va a poder contar con todos sus players.
En el entrenamiento de esta tarde, entonces, los tres se van a restablecer al plantel Xeneize.
El miércoles pasado Cáceres jugó para Paraguay en la derrota ante Corea del Sur por 1 a 0; Medel hizo lo propio en el triunfo del conjunto trasandino en Dinamarca por 2 a 1 y Battaglia estuvo presente en el resonante éxito del equipo de Maradona en Rusia por 3 a 1.
Ahora están todos en casa y el que los va a disfrutar será el ‘Coco’. Bienvenidos.
En el entrenamiento de esta tarde, entonces, los tres se van a restablecer al plantel Xeneize.
El miércoles pasado Cáceres jugó para Paraguay en la derrota ante Corea del Sur por 1 a 0; Medel hizo lo propio en el triunfo del conjunto trasandino en Dinamarca por 2 a 1 y Battaglia estuvo presente en el resonante éxito del equipo de Maradona en Rusia por 3 a 1.
Ahora están todos en casa y el que los va a disfrutar será el ‘Coco’. Bienvenidos.
Los refuerzos de Boca y aquellos que volvieron se sienten cada día más a gusto con el plantel.
Los refuerzos de Boca Juniors van conociendo poco a poco lo que significa vestir esta camiseta. Para eso, es importante entrar bien en el grupo y que los jugadores que ya están en el plantel les abran las puertas.
Se desprende de cada uno de los recién llegados que el clima es el mejor. “Me recibieron muy bien, estoy muy contento y agradecido a la gente de Boca que me dio esta oportunidad”, deslizó Rosada en la conferencia de presentación. Claro que Ariel es hombre de la casa y ya conocía lo que es Boca, pero llegó luego de 10 años de jugar afuera y se siente muy a gusto.
“Es una posibilidad muy buena, tener a Ibarra en el plantel me puede ayudar, puede volcar lo que sabe, su experiencia”, dijo el uruguayo Adrián Gunino en referencia al lateral derecho del plantel. El joven lateral sabe lo importante de vestir esta camiseta y lo que significa haber formado parte de la gira europea.
Gary Medel, quien se encuentra con su Selección, dijo al llegar: “Todos me recibieron muy bien. Me tengo que acostumbrar a convivir con figuras como Palermo, Riquelme…”. El chileno indica claramente la tranquilidad que significa ser bien recibido.
Los refuerzos que ya conocen bien el paño son aquellos que volvieron. Tales son los casos de Federico Insúa, Guillermo Marino y Fabián Monzón. Ellos saben lo que es el vestuario de Boca y se reencontraron con muchos ex compañeros. Claro que cada etapa es diferente y ahora disfrutan de compartir el mundo Boca junto a sus compañeros.
La realidad marca que Boca se está armando y muy bien. No solamente por los jugadores que llegan, sino también porque el grupo los recibe muy bien, para que sepan que están en casa.
Se desprende de cada uno de los recién llegados que el clima es el mejor. “Me recibieron muy bien, estoy muy contento y agradecido a la gente de Boca que me dio esta oportunidad”, deslizó Rosada en la conferencia de presentación. Claro que Ariel es hombre de la casa y ya conocía lo que es Boca, pero llegó luego de 10 años de jugar afuera y se siente muy a gusto.
“Es una posibilidad muy buena, tener a Ibarra en el plantel me puede ayudar, puede volcar lo que sabe, su experiencia”, dijo el uruguayo Adrián Gunino en referencia al lateral derecho del plantel. El joven lateral sabe lo importante de vestir esta camiseta y lo que significa haber formado parte de la gira europea.
Gary Medel, quien se encuentra con su Selección, dijo al llegar: “Todos me recibieron muy bien. Me tengo que acostumbrar a convivir con figuras como Palermo, Riquelme…”. El chileno indica claramente la tranquilidad que significa ser bien recibido.
Los refuerzos que ya conocen bien el paño son aquellos que volvieron. Tales son los casos de Federico Insúa, Guillermo Marino y Fabián Monzón. Ellos saben lo que es el vestuario de Boca y se reencontraron con muchos ex compañeros. Claro que cada etapa es diferente y ahora disfrutan de compartir el mundo Boca junto a sus compañeros.
La realidad marca que Boca se está armando y muy bien. No solamente por los jugadores que llegan, sino también porque el grupo los recibe muy bien, para que sepan que están en casa.
Fue confirmado desde Boca Juniors. Se viene un Superclásico diferente a disputarse en Bolivia
El próximo 6 de septiembre se muda el superclásico. Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, va a recibir a uno de los duelos más importantes del mundo. Los futbolistas Xeneizes se van preparando para enfrentar a River en un cotejo diferente a pesar de tratarse de una historia con muchos capítulos.
De esta manera, Boca tiene un nuevo compromiso que asumir ante su eterno rival. La gente del país vecino va a tener la posibilidad de contar con un partido por demás atrayente dentro de su territorio.
Santa Cruz de la Sierra se ubica en el este del país, a orillas del río Piraí. Cuanta con una población de más de un millón y medio de habitantes. Es la ciudad más habitada de Bolivia, y su crecimiento demográfico es el más importante de América del Sur.
De esta manera, Boca tiene un nuevo compromiso que asumir ante su eterno rival. La gente del país vecino va a tener la posibilidad de contar con un partido por demás atrayente dentro de su territorio.
Santa Cruz de la Sierra se ubica en el este del país, a orillas del río Piraí. Cuanta con una población de más de un millón y medio de habitantes. Es la ciudad más habitada de Bolivia, y su crecimiento demográfico es el más importante de América del Sur.
jueves, 13 de agosto de 2009
Esta vez se entrena bien temprano, el plantel no quiere perder ritmo tras los partidos de pretemporada.
El equipo del “Coco” va saliendo. Muchas sonrisas en las primeras dos prácticas de Boca en Buenos Aires. El plantel de Basile realizó sendos trabajos livianos: el martes fue físico, el miércoles fue futbolístico. A partir de las 9:30 Basile encara un nuevo entrenamiento con la mira puesta en la Sudamericana.
Ya con Ariel Rosada en el plantel, el Presidente Ameal fue claro: “Estamos muy conformes con el plantel que tenemos”, y como para no estarlo. Basile está contento con el equipo que tiene y en cada entrenamiento se respira el buen clima. Las bromas y la buena relación son moneda corriente en Boca.
La ilusión del hincha es la ilusión de los jugadores. Está todo preparado para un nuevo día de la puesta a punto.
Se llevó a cabo la presentación de Ariel Rosada como nuevo refuerzo Xeneize
Como ocurre habitualmente, el Presidente de nuestra Institución, Jorge Ameal, presentó al jugador ante la prensa dando paso a las preguntas de los periodistas que asistieron a la Sala de Conferencias del Club: “Les queremos agradecer la presencia a todos los medios. Hoy nos toca otra grata noticia para darles a los socios y simpatizantes de Boca. Ariel Rosada, que alguna vez dijo hasta luego, hoy está con nosotros. Nos llena de orgullo y satisfacción, nos hace muy felices a todos. Hoy recorriendo la cancha y hablando con la gente, me di cuenta que está muy contenta y muy conforme con la vuelta de Ariel. Hoy es un jugador más potenciado, mucho más equilibrado. Esperemos que por muchos años esté con nosotros”.
Tras la presentación oficial, Rosada respondió algunas preguntas en cuanto a su vuelta al club: “Estaba el tema del Celta allá (club del que se desvinculó). Se demoró un poco pero lo importante es que hoy estoy acá, estoy contento y muy agradecido a la gente de Boca que me da esta oportunidad, voy a estar disfrutándolo día a día”.
El volante sabe muy bien de qué se trata Boca: “Sé que vengo al club más grande de la Argentina, hay grandes jugadores. Vengo a sumar lo mío, tratar de ganarme un lugar, y ojala que las cosas después me salgan bien”.
Alfio Basile hizo mucho para contar con el volante tapón en su equipo: “Estoy muy contento de que un técnico como Basile me haya tenido en cuenta para este proyecto. La verdad que eso me llena de orgullo. Así que palabras de agradecimiento por haberme dado esta oportunidad. Ojala que le pueda rendir y compensarlo con eso”.
Ariel Rosada nació el 11 de abril de 1978 en Campana, provincia de Buenos Aires. Además de debutar en Boca Juniors, Rosada vistió las camisetas de Chacarita entre 1999 y el 2003. Jugó en Newell´s entre el 2003 y 2005. También desplegó su fútbol fuera del país con mucho éxito. En el Toluca mejicano jugó entre el 2005 y el 2008. Su último club fue el Celta de Vigo en España en la temporada 2008-2009.
Tras la presentación oficial, Rosada respondió algunas preguntas en cuanto a su vuelta al club: “Estaba el tema del Celta allá (club del que se desvinculó). Se demoró un poco pero lo importante es que hoy estoy acá, estoy contento y muy agradecido a la gente de Boca que me da esta oportunidad, voy a estar disfrutándolo día a día”.
El volante sabe muy bien de qué se trata Boca: “Sé que vengo al club más grande de la Argentina, hay grandes jugadores. Vengo a sumar lo mío, tratar de ganarme un lugar, y ojala que las cosas después me salgan bien”.
Alfio Basile hizo mucho para contar con el volante tapón en su equipo: “Estoy muy contento de que un técnico como Basile me haya tenido en cuenta para este proyecto. La verdad que eso me llena de orgullo. Así que palabras de agradecimiento por haberme dado esta oportunidad. Ojala que le pueda rendir y compensarlo con eso”.
Ariel Rosada nació el 11 de abril de 1978 en Campana, provincia de Buenos Aires. Además de debutar en Boca Juniors, Rosada vistió las camisetas de Chacarita entre 1999 y el 2003. Jugó en Newell´s entre el 2003 y 2005. También desplegó su fútbol fuera del país con mucho éxito. En el Toluca mejicano jugó entre el 2005 y el 2008. Su último club fue el Celta de Vigo en España en la temporada 2008-2009.
Mucha diversión en la práctica de Boca. Clima distendido y dos ídolos a pura diversión. Enterate de qué se trata.
Juan Román Riquelme y Martín Palermo se enfrentaron en una cancha de fútbol. En el entrenamiento del día jugaron uno contra el otro en un clima excepcional. Sin sacarse demasiadas ventajas y bajo la atenta mirada del Profe Dibos, jugaron un picado uno contra uno con arcos de dimensiones pequeñas.
El resultado es lo más importante y fue positivo, ganó la sonrisa. El clima que se respira en Boca muestra las ganas de un equipo con sed de gloria. El entrenamiento de hoy fue solamente una muestra de eso.
Boca continúa su preparación de cara al inicio de la Sudamericana y el torneo local. Por La Boca sobra la alegría y los ídolos lo demuestran.
El resultado es lo más importante y fue positivo, ganó la sonrisa. El clima que se respira en Boca muestra las ganas de un equipo con sed de gloria. El entrenamiento de hoy fue solamente una muestra de eso.
Boca continúa su preparación de cara al inicio de la Sudamericana y el torneo local. Por La Boca sobra la alegría y los ídolos lo demuestran.
El lateral uruguayo Adrián Gunino no se encandila con las luces europeas.
Estamos con una de las incorporaciones Xeneizes, Adrián Gunino. Estuviste jugando contra grandes equipos…
La verdad que sí. Hace poco estaba jugando allá en Uruguay, a pasar a jugar con el Milan, la verdad que una experiencia muy buena.
¿Qué camiseta pediste?, algo habrás mangueado…
No, cuando debuté con el Milan preferí quedarme con la mía porque era la del primer partido y me la quedé. Después sí, con el “Loco” Abreu cuando jugamos allá en Salónica, la cambié. Apareció en el vestuario con una camiseta de él y ahí nomás se la cambié.
¿Cómo hiciste para cambiar la cabeza de Danubio a Boca tan rápido?
Esto es así. En el fútbol hoy estás acá, mañana allá… uno tiene que adaptarse a lo que tiene y nadie le regaló nada a uno, por eso uno tiene que romperse como siempre y seguir adelante.
Basile está muy contento con tu nivel, ¿cómo estás vos contigo mismo?
Bien, bien. Quizás haya tenido algún error en el partido que debuté pero me pongo a pensar que fue contra el Milan, después de venir de Uruguay, a un estadio que era mucho más rápido, me parece que tuve un buen arranque.
Tener cerca de uno de los mejores laterales de la historia de Boca como es Hugo Ibarra, ¿te ayuda, te sirve?
Sí, la verdad que sí. La experiencia que tiene él se la puede volcar a uno, y uno desempeñar algo de lo que mostró él acá.
¿Cuáles son los objetivos a corto y mediano plazo para Adrián Gunino?
Ahora con la Sub20 de Uruguay, salir campeón del Mundial. Después lo que va a venir con Boca, salir campeón y todo…va a llegar en consecuencia.
La verdad que sí. Hace poco estaba jugando allá en Uruguay, a pasar a jugar con el Milan, la verdad que una experiencia muy buena.
¿Qué camiseta pediste?, algo habrás mangueado…
No, cuando debuté con el Milan preferí quedarme con la mía porque era la del primer partido y me la quedé. Después sí, con el “Loco” Abreu cuando jugamos allá en Salónica, la cambié. Apareció en el vestuario con una camiseta de él y ahí nomás se la cambié.
¿Cómo hiciste para cambiar la cabeza de Danubio a Boca tan rápido?
Esto es así. En el fútbol hoy estás acá, mañana allá… uno tiene que adaptarse a lo que tiene y nadie le regaló nada a uno, por eso uno tiene que romperse como siempre y seguir adelante.
Basile está muy contento con tu nivel, ¿cómo estás vos contigo mismo?
Bien, bien. Quizás haya tenido algún error en el partido que debuté pero me pongo a pensar que fue contra el Milan, después de venir de Uruguay, a un estadio que era mucho más rápido, me parece que tuve un buen arranque.
Tener cerca de uno de los mejores laterales de la historia de Boca como es Hugo Ibarra, ¿te ayuda, te sirve?
Sí, la verdad que sí. La experiencia que tiene él se la puede volcar a uno, y uno desempeñar algo de lo que mostró él acá.
¿Cuáles son los objetivos a corto y mediano plazo para Adrián Gunino?
Ahora con la Sub20 de Uruguay, salir campeón del Mundial. Después lo que va a venir con Boca, salir campeón y todo…va a llegar en consecuencia.
miércoles, 12 de agosto de 2009
Ariel Rosada volvió después de diez años, se reencontró con viejos compañeros y lo vivió a full
Trotan. Va Riquelme y él a su lado. Se conocieron hace tiempo ya, con 13 años menos, cuando daban sus primeros pasos en Boca. Trota y se ríe. A cada paso lo acompaña una sonrisa que se vuelve permanente. El, Ariel Rosada, no se imaginó que podía llegar a tener una nueva oportunidad en Boca después de diez años. Y el día de volver a entrenarse en el club en que nació se le dio. Como a muy pocos. Por eso la alegría imposible de disimular. "Disfruté cada momento. En el vestuario, en la cancha. Estoy muy contento y con muchas ganas", cuenta.
Tal vez por la ansiedad, llegó al club muy temprano, cerca de las 14. Estacionó su auto en el playón de Casa Amarilla, firmó su contrato (lo había revisado su representante un rato antes) y se reencontró con sus viejos conocidos. Román, está dicho. También Marino, con quien fue campeón en Newell's. Luego, ya en la cancha principal de Casa Amarilla, fue presentado en sociedad, al resto de sus compañeros.
En la tribuna, uno de sus tres hermanos varones seguía sus movimientos junto a Riquelme y Cía. y mostraba orgulloso el tatuaje en la pierna. "Eternamente agradecido. 1996-2009", dice, junto a un escudo de Boca. Los años tienen que ver con el debut de su hermano y con este regreso. "El tema es que me lo hice hace casi 20 días y si no se hacía, no sé... Me cortaba la pierna", explica. Y enseguida agrega: "Voy a pasarme todo este año en Casa Amarilla".
Una vez superada la entrada en calor junto a sus viejos compañeros (Palermo, el Pato, Ibarra), llega el momento del trabajo diferenciado, el que no hizo por la demora en cerrar su incorporación. Una especie de pretemporada individual, a un costado del grupo. El preparador físico Marcelo Avaro es el que le da las indicaciones y él, con un chaleco cargado con pesas, va y viene de un lado a otro y salta por encima de un cajón. Todos ejercicios de potencia. "Me está faltando un poquito, pero hoy (por ayer) ya hice bastante para ponerme lo más rápido posible a punto. Estos días que faltan para el inicio de la competencia me van a venir bien. Se demoró un poco en arreglar, se hizo largo, pero lo importante es que se pudo dar".
Ya bañado y cambiado, después de su primer día de este regreso, cuando ya casi no quedan compañeros en el vestuario, saluda y emprende la retirada por el portón de la popular local. En la puerta, con la noche ya encima, hay tres hinchas que esperan por un autógrafo. Detiene su auto, se baja y les firma la camiseta con ganas. Y antes de irse, deja la sentencia: "Cuando se mencionó la posibilidad de ir a River, le dije a mi representante que quería jugar en Boca. Por suerte se dio y estoy muy contento por eso". Se nota que está contento
Tal vez por la ansiedad, llegó al club muy temprano, cerca de las 14. Estacionó su auto en el playón de Casa Amarilla, firmó su contrato (lo había revisado su representante un rato antes) y se reencontró con sus viejos conocidos. Román, está dicho. También Marino, con quien fue campeón en Newell's. Luego, ya en la cancha principal de Casa Amarilla, fue presentado en sociedad, al resto de sus compañeros.
En la tribuna, uno de sus tres hermanos varones seguía sus movimientos junto a Riquelme y Cía. y mostraba orgulloso el tatuaje en la pierna. "Eternamente agradecido. 1996-2009", dice, junto a un escudo de Boca. Los años tienen que ver con el debut de su hermano y con este regreso. "El tema es que me lo hice hace casi 20 días y si no se hacía, no sé... Me cortaba la pierna", explica. Y enseguida agrega: "Voy a pasarme todo este año en Casa Amarilla".
Una vez superada la entrada en calor junto a sus viejos compañeros (Palermo, el Pato, Ibarra), llega el momento del trabajo diferenciado, el que no hizo por la demora en cerrar su incorporación. Una especie de pretemporada individual, a un costado del grupo. El preparador físico Marcelo Avaro es el que le da las indicaciones y él, con un chaleco cargado con pesas, va y viene de un lado a otro y salta por encima de un cajón. Todos ejercicios de potencia. "Me está faltando un poquito, pero hoy (por ayer) ya hice bastante para ponerme lo más rápido posible a punto. Estos días que faltan para el inicio de la competencia me van a venir bien. Se demoró un poco en arreglar, se hizo largo, pero lo importante es que se pudo dar".
Ya bañado y cambiado, después de su primer día de este regreso, cuando ya casi no quedan compañeros en el vestuario, saluda y emprende la retirada por el portón de la popular local. En la puerta, con la noche ya encima, hay tres hinchas que esperan por un autógrafo. Detiene su auto, se baja y les firma la camiseta con ganas. Y antes de irse, deja la sentencia: "Cuando se mencionó la posibilidad de ir a River, le dije a mi representante que quería jugar en Boca. Por suerte se dio y estoy muy contento por eso". Se nota que está contento
Hay debate entre los dirigentes por la suculenta oferta que hizo la Fiore para llevarse a Ezequiel Muñoz
Siete partidos jugados. 585 minutos en Primera. Un millón de euros por un préstamo. Siete millones de dólares por el 50% del pase. René Favaloro ya no está entre nosotros. El corazón de Ezequiel Muñoz no para de latir.
Si de números se trata, la oferta le impactaría hasta al millonario Ricky Ricón. Si de decisión política hablamos, de pensar en el ahora y en el mañana, los dirigentes de Boca deshojan la Fiorentina...
La noticia asombró hace unos días y ayer volvió a cobrar fuerza. La Fiorentina insiste con llevarse ahora a Ezequiel Muñoz y le acercó a Boca una propuesta tentadora. Sin embargo, ya se abrió el debate en la dirigencia, porque hay quienes quieren transferirlo y quienes prefieren retenerlo. Es más, el presidente Ameal no está convencido de la venta. "Mañana (por hoy) nos vamos a reunir en la mesa chica para darle un corte a esta cuestión y ver qué hacemos", le confió a Olé uno de los directivos que toman decisiones.
El dato insoslayable y que le generó sorpresa hasta al propio jugador es que haya llegado semejante oferta por un futbolista que está ¡lesionado! Muñoz se recupera de una rotura de ligamentos cruzados en la rodilla derecha, evoluciona favorablemente, ya realiza algunos movimientos con pelota pero recién volvería a jugar en noviembre. "Que llegue una oferta así y más estando lesionado es impresionante", le dijo el pibe a este diario y reconoció que ya le comentaron acerca de la posibilidad de marcharse, que incluiría, claro, un interesante contrato personal. De hecho, gente cercana a Ezequiel, ante la consulta de Olé, hizo hincapié en el "sentido común" que debería aplicar Boca al momento de analizar la oferta.
Catalogado como una de las máximas promesas del semillero, Muñoz es una de las grandes apuestas del club. Resaltan, los que caminan Casa Amarilla día y noche, su personalidad y su temperamento, pese a sus precoces 18. Ischia lo hizo debutar cuando todavía era menor de edad en un partido de la Sudamericana (23/9/08, vs Liga de Quito) y le dio rodaje durante el verano, aunque en el semestre pasado sólo disputó 225 minutos.
Decíamos que la cuestión es vender o no vender. Mientras a algunos dirigentes se les abrieron bien grande los ojos cuando escucharon los números, hubo otros que no se ruborizaron (caso Ameal y Bianchi) y prefirieron la cautela. Desde el entorno del presi, cuentan que lo considera un jugador clave. Hoy habría una comunicación con la Fiorentina para volver a hablar de cifras y detalles. Hasta ahora, lo que trascendió es una cesión por una temporada y la chance de adquirir la mitad de la ficha en junio del año que viene. En una web no oficial de la Fiore se indica que el jugador está cerca de sumarse al club que hizo ídolo a Bati.
Los directivos más optimistas piensan en la chance de utilizar el dinero que ingrese por el préstamo para ir a la carga por un delantero y dejar encantado a Basile. Bergessio es la obsesión de Coco, también sonó Cvitanich y habría un par de nombres más guardados bajo siete llaves. El DT ya avisó que le gustaría traer un punta con gol.
El año pasado, Muñoz terminó el secundario y se recibió de perito mercantil. Hoy puede empezar a aprender italiano, mientras deshojan la Fiorentina...
Gunino aún no puede creer lo que está viviendo: "No me lo imaginé nunca".
Adrián Gunino fue el refuerzo con menos cartel de este Boca. Pero en la gira mostró algunas cosas interesantes, como para que Basile descanse tranquilo cuando no pueda jugar Ibarra. Sorprendido por lo que le depara el destino, el uruguayo ex Danubio todavía no cae.
-¿Qué fue lo que más te sorprendió de la gira?
-La cancha en la que jugamos en Alemania. Muy rápida, nada que ver a cómo se juega en Uruguay, con el pasto bien cortito. Y también haber enfrentado a tremendos monstruos. Fue un espectáculo.
-¿Te llamaron mucho de Uruguay en estos días?
-Sí, bastante. Mis familiares y mis amigos me dieron su apoyo. Aunque tuve errores, quizá contra el Milan estuve bastante bien, me parece.
-¿En qué sentís que estuviste bien?
-Me gustó que no dejé de hacer el juego que me gusta, de ir al ataque. Y eso es gracias a la confianza del técnico y de mis compañeros. También me dieron una ficha estadística que preparaban los organizadores en la que se mostró que fui uno de los que más corrió. Por momentos, en la marca estuve bastante bien, a veces anticipando y yendo al ataque, y me fui por afuera. Quizás alguna no me la hayan dado, pero a veces se genera la jugada por otro lado.
-¿Te tienen que conocer todavía?
-Seguro. Tengo que ganarme la confianza de mis compañeros. Esto recién comienza y vamos tranquilos para yo también ir tomando más confianza.
-El técnico te elogió en los medios. ¿También te lo dijo a vos?
-Sí, hablé un poco y me dijo que había jugado bastante bien. Yo estoy muy tranquilo, sabiendo que entré a la cancha e hice lo que sé.
-Llegaste para ser el posible reemplazante de Ibarra y ahora es tu compañero. ¿Qué te genera?
-Cuando llegué aún no se sabía si él iba a seguir o no. Uno llegó sin que le regalen nada, así que no tengo problema. Voy a lucharla como lo hice siempre.
-¿Te servirá él para aprender?
-Ni hablar. Eso es lo principal. Hugo tiene mucha experiencia y espero sumar algo de lo que él sabe del puesto. Yo vine a pelearla y después el técnico verá cómo se desarrolla todo. El tomará las decisiones.
-¿Un mes atrás te imaginabas esto?
-Para nada. Estar en los países en los que estuvimos, y con los jugadores que había en la cancha, de los rivales y de los nuestros también, la verdad es que nunca me lo había imaginado. Uno se tiene que ir adaptando, pero todo parece parte de un sueño.
-¿Qué fue lo que más te sorprendió de la gira?
-La cancha en la que jugamos en Alemania. Muy rápida, nada que ver a cómo se juega en Uruguay, con el pasto bien cortito. Y también haber enfrentado a tremendos monstruos. Fue un espectáculo.
-¿Te llamaron mucho de Uruguay en estos días?
-Sí, bastante. Mis familiares y mis amigos me dieron su apoyo. Aunque tuve errores, quizá contra el Milan estuve bastante bien, me parece.
-¿En qué sentís que estuviste bien?
-Me gustó que no dejé de hacer el juego que me gusta, de ir al ataque. Y eso es gracias a la confianza del técnico y de mis compañeros. También me dieron una ficha estadística que preparaban los organizadores en la que se mostró que fui uno de los que más corrió. Por momentos, en la marca estuve bastante bien, a veces anticipando y yendo al ataque, y me fui por afuera. Quizás alguna no me la hayan dado, pero a veces se genera la jugada por otro lado.
-¿Te tienen que conocer todavía?
-Seguro. Tengo que ganarme la confianza de mis compañeros. Esto recién comienza y vamos tranquilos para yo también ir tomando más confianza.
-El técnico te elogió en los medios. ¿También te lo dijo a vos?
-Sí, hablé un poco y me dijo que había jugado bastante bien. Yo estoy muy tranquilo, sabiendo que entré a la cancha e hice lo que sé.
-Llegaste para ser el posible reemplazante de Ibarra y ahora es tu compañero. ¿Qué te genera?
-Cuando llegué aún no se sabía si él iba a seguir o no. Uno llegó sin que le regalen nada, así que no tengo problema. Voy a lucharla como lo hice siempre.
-¿Te servirá él para aprender?
-Ni hablar. Eso es lo principal. Hugo tiene mucha experiencia y espero sumar algo de lo que él sabe del puesto. Yo vine a pelearla y después el técnico verá cómo se desarrolla todo. El tomará las decisiones.
-¿Un mes atrás te imaginabas esto?
-Para nada. Estar en los países en los que estuvimos, y con los jugadores que había en la cancha, de los rivales y de los nuestros también, la verdad es que nunca me lo había imaginado. Uno se tiene que ir adaptando, pero todo parece parte de un sueño.
Al final no fue más que un traumatismo lo de Gaitan
Cuando el ghanés Seidu Yahaya, del AEK de Grecia, se le tiró de atrás a Nicolás Gaitán y le retorció las piernas, en el banco de suplentes Alfio Basile se agarró la cabeza. Sabía que podía llegar a perder una buena alternativa para reemplazar a Riquelme en el arranque del torneo local (está suspendido por la roja ante Colón). Y más se preocupó el DT cuando se dijo que la lesión en la rodilla derecha podía demandarle entre dos y tres semanas de recuperación. Ayer, sin embargo, el Coco tuvo una buena noticia: Nico se entrenó normalmente.
"Al final no fue más que un traumatismo, por eso pudo trabajar con sus compañeros", explicaron en el cuerpo médico, después de que Gaitán realizara la entrada en calor y el fútbol-tenis junto a todo el grupo. De esta manera, el zurdo podrá ser tenido en cuenta para el debut en la Sudamericana y también (si el DT se decide por él) para reemplazar a Román en el arranque del torneo.
¿Y Morel? El otro que terminó con molestias el amistoso ante el AEK fue Morel Rodríguez. Por esa razón, el paraguayo no viajó al partido de su selección y ayer realizó trabajo diferenciado en Casa Amarilla. Igual, podría jugar el miércoles próximo ante Vélez, por la Sudamericana.
"Al final no fue más que un traumatismo, por eso pudo trabajar con sus compañeros", explicaron en el cuerpo médico, después de que Gaitán realizara la entrada en calor y el fútbol-tenis junto a todo el grupo. De esta manera, el zurdo podrá ser tenido en cuenta para el debut en la Sudamericana y también (si el DT se decide por él) para reemplazar a Román en el arranque del torneo.
¿Y Morel? El otro que terminó con molestias el amistoso ante el AEK fue Morel Rodríguez. Por esa razón, el paraguayo no viajó al partido de su selección y ayer realizó trabajo diferenciado en Casa Amarilla. Igual, podría jugar el miércoles próximo ante Vélez, por la Sudamericana.
martes, 11 de agosto de 2009
La gira también le sirvió al DT para saber qué tiene además de los titulares
Y el resto qué? ¿Hay vida más allá de los 11 de memoria?
Alfio Basile ya casi tiene los 11 titulares, sólo le falta un pequeño porcentaje para despejar todas las dudas. "Tengo el 80%", dijo ayer. Pero después de esos 11, hay una larga lista de jugadores que en esta gira por Europa terminaron de saber cuál es su situación con el nuevo técnico y qué lugar les tocará ocupar dentro del plantel.
Hay dos grandes perjudicados después de las dos semanas en el exterior, por la posición en la que terminaron la temporada pasada y en la que empezaron la actual. Porque tanto Juan Forlin como Nicolás Gaitán pasaron de titulares con Carlos Ischia a suplentes con Basile. Y el caso del defensor es más llamativo, porque es una de las grandes promesas xeneizes, fue convocado por Maradona a la Selección y hasta el primer partido de la gira era titular. Y parecía hasta mejor posicionado que Julio Cáceres... Pero después de ese debut en la Audi Cup ante el Manchester, Paletta no cerró su pase al Palermo, viajó de Italia a Munich, saltó a la cancha y se ganó la confianza del técnico. Lo de Gaitán tiene que ver con que no logró afirmarse en el primer semestre del año y, aunque no jugó mal cuando le tocó hacerlo en la gira, llegó un refuerzo importante para jugar en su puesto.
También están aquéllos que ganaron y perdieron dentro de la gira misma. Ricardo Noir fue el primero que eligió Basile para reemplazar a Rodrigo Palacio y jugar en dupla con Palermo. Pero duró 45 minutos y perdió terreno con Pablo Mouche. Y en cambio, Pochi Chávez figuraba entre los que se podían negociar pero le alcanzaron los segundos 45 minutos ante el Manchester para demostrarle al técnico que se desvive por jugar en Boca. Leandro Díaz, el que arrancó en su puesto, no logró brillar en los minutos que estuvo en cancha.
Adrián Gunino, cuando no estaba para jugar Hugo Ibarra, dio buenos indicios de que puede jugar en Boca, porque no le pesó la responsabilidad del debut, tiene velocidad y recorre bien la banda derecha. Y Lucas Viatri, con su gol a un grande como Milan (le había hecho uno al Barcelona hacía un año), demostró que sigue siendo una buena alternativa para reemplazar a Palermo, que puede no jugar bien pero está siempre a un paso del gol. Y de hecho volvió a demostrar con el penal de la definición que personalidad justamente no le falta.
¿Y el resto qué? Alguno ganó terreno, otros no...
Federico Insúa tiene una cuenta pendiente en su carrera y en Boca. Primero, piensa en el Apertura: "Hay equipo para salir campeón".
Federico Insúa ganó tres veces el campeonato argentino, una con Independiente y dos con Boca. Y jugó en el América de México, el club más poderoso del fútbol azteca. Posibilidades de disputar la Copa Libertadores, tuvo. Y de sobra. Pero el Pocho, el que hizo tanta fuerza para regresar al Xeneize, el que ilusiona al hincha por la sociedad que puede armar con Juan Román Riquelme, el que en la gira por Europa mostró que el tobillo de su zurda sigue teniendo bisagras para tirar gambetas de puro papi-fútbol, el que llegó para ser parte del equipo de memoria, es el mismo que, en su revival en este club, quiere saldar a los 29 años una deuda que tiene con su carrera.
-En el 2007, Román volvió y ganó la Libertadores. ¿Ese es tu sueño?
-Sí, volví para ganar la Libertadores. Es una gran espina que tengo clavada, porque todavía no tuve la posibilidad siquiera de jugarla. Participé de dos Sudamericanas, una que gané con Boca y otra con el América en la que perdí la final con Arsenal. Así que es algo pendiente que me queda. Y eso sí lo tengo claro: para clasificarnos tenemos que salir campeones o tenemos que estar en los primeros lugares. Hay equipo para salir campeón, con jugadores muy importantes, con personalidad, de selección. Vamos a intentar eso. Con Independiente me fui a España cuando salí campeón, con Boca salí campeón y me fui a Moenchengladbach, y espero jugarla ahora.
-Y la Sudamericana no es lo mismo, ¿no?
-Nada que ver. Sólo viéndolo por tele te das cuenta de que no es lo mismo.
-Tenés ganas de vivir la Copa.
-Sí, pero primero lo primero. Hace tres años que no juego en el fútbol argentino y que una cosa vaya llevando a la otra. Obviamente que tenemos equipo para salir campeón, pero hay que esperar a que todo se vaya dando.
El zurdo sabe que los raquíticos 22 puntos que Boca logró en el Clausura ponen al team del Coco en la obligación de realizar una gran campaña: o bien para cosechar los puntos para clasificarse a la Copa del año próximo (está a ocho puntos de Racing, el que hoy jugaría un repechaje), o bien para salir campeón. Palabra, esta última, que Fede conoce bien en su alianza con la azul y oro: jugó cuatro torneos, y clavó un póker.
-Vos ganaste todo lo que jugaste en Boca. ¿En tu objetivo sólo sirve ser campeón?
-Es el desafío de todos. Estoy con toda la ilusión, con todas las ganas. El equipo me gusta mucho, tenemos la obligación de pelear, de ganar cosas importantes... Vamos a esperar cómo empieza el torneo. Pero la idea, obviamente, es salir campeón.
-¿Entonces la gente tiene derecho a ilusionarse?
-¿Por qué no? Todos lo estamos. Tenemos que tratar de encontrar el mejor funcionamiento antes del inicio del campeonato, Boca armó plantel muy rico, de muy buen nivel, y debemos aprovecharlo: a Román, a Martín, al segundo punta que juegue a su lado. El equipo va por buen camino, lo que mostró hasta ahora fue muy interesante. Se vieron cosas buenas.
-¿Te arrepentiste de haberte ido de Boca?
-Para nada. No cambiaría nada de lo que hice en mi carrera. Ni lo bueno ni lo malo. Y eso incluye lo que me pasó cuando me fui de Boca. Encuentro un montón de cosas positivas. Ya haber estado en Alemania, por lo que es como país y sociedad, te cambia la cabeza. Por cómo me trataron, me pusieron un traductor para que me ayudara... En México jugué en el América, muy poderoso desde lo económico. Por todas las cosas que fueron pasando hoy estoy de vuelta en Boca y soy un agradecido de lo que llevo hasta hoy en mi carrera.
-Hiciste mucha fuerza para venir...
-Fue parte de una negociación. Y ninguna es sencilla, sea del jugador menos reconocido hasta el número uno. Fijate que Eto'o tuvo un montón de problemas hasta llegar al Inter, y el resto también tenemos inconvenientes. Siempre que hay plata de por medio, las cifras en el ida y vuelta entre México y Argentina por los jugadores cambian y ahí también hay un tira y afloje. No fue fácil: hubo muchas discusiones pero se llegó a buen término. Se logró y no me importa cómo. No me interesó la forma en que se llegó al acuerdo. Mi meta era jugar en Boca y afortunadamente lo logré.
-De los que te dirigieron, ¿Basile es el entrenador que más seduce a un jugador?
-Tuve técnicos importantes pero lo de Coco es fuerte y ya viene desde la primera etapa, cuando me pidió para Boca. Fue el técnico más importante de mi carrera. Hay otros que también me han dejado muchas cosas: tuve al Tolo, los técnicos de la Selección... Pero las cosas que viví en Boca, jugar cuatro torneos y ganarlos todos y la forma en que se manejó Coco, cómo se trabajó, el nivel que logré... Tuve la suerte de ganar cosas muy importantes, y en lo futbolístico aprendí mucho.
-¿Que él estuviera fue una motivación más para que hicieras tanta fuerza en México?
-Sí, por supuesto. Está bárbaro, con todas las pilas. Cuando me llamó para pedirme obviamente fue una motivación impresionante, cosa que con otro técnico que no conocía hubiese sido distinto. El está muy bien. Las charlas no son largas pero de la forma en que él habla le entendemos más que claro.
-¿Sienten que son los que mejor se reforzaron y eso les generará una presión extra?
-Boca es Boca. Cuando le apunta a un jugador es muy difícil que no llegue. En el país hay muchos problemas para contratar jugadores, se les ha complicado muchísimo. Boca se reforzó muy bien. Los demás no me interesan.
-¿Y la presión?
-Siempre existe presión en Boca, no es de ahora. Cuando llegué, en mi primer ciclo, Boca venía de hacer un campeonato de mitad de tabla y habíamos llegado Cata Díaz, Marino, Krupoviesa, yo... Además, habían vuelto Battaglia y el Negro Ibarra, y se vivió lo mismo que ahora. Fuimos a la gira por Holanda, Corea y China y me acuerdo de que me preguntaban lo mismo que ahora, de la presión por la llegada de Coco y de los refuerzos. Era lo mismo. Este es un equipo que está acostumbrado a las obligaciones que tiene el club. Y eso me pone contento por la importancia que nos da.
Esta virginidad copera inquieta pero no perturba al Pocho: confía en que este equipo, de paso hidalgo por Europa, da el pinet de favorito y que por ello, en febrero, podrá estar frente a su primera vez en la Copa Libertadores. Esa que Boca ganó tantas veces en los últimos nueve años...
-En el 2007, Román volvió y ganó la Libertadores. ¿Ese es tu sueño?
-Sí, volví para ganar la Libertadores. Es una gran espina que tengo clavada, porque todavía no tuve la posibilidad siquiera de jugarla. Participé de dos Sudamericanas, una que gané con Boca y otra con el América en la que perdí la final con Arsenal. Así que es algo pendiente que me queda. Y eso sí lo tengo claro: para clasificarnos tenemos que salir campeones o tenemos que estar en los primeros lugares. Hay equipo para salir campeón, con jugadores muy importantes, con personalidad, de selección. Vamos a intentar eso. Con Independiente me fui a España cuando salí campeón, con Boca salí campeón y me fui a Moenchengladbach, y espero jugarla ahora.
-Y la Sudamericana no es lo mismo, ¿no?
-Nada que ver. Sólo viéndolo por tele te das cuenta de que no es lo mismo.
-Tenés ganas de vivir la Copa.
-Sí, pero primero lo primero. Hace tres años que no juego en el fútbol argentino y que una cosa vaya llevando a la otra. Obviamente que tenemos equipo para salir campeón, pero hay que esperar a que todo se vaya dando.
El zurdo sabe que los raquíticos 22 puntos que Boca logró en el Clausura ponen al team del Coco en la obligación de realizar una gran campaña: o bien para cosechar los puntos para clasificarse a la Copa del año próximo (está a ocho puntos de Racing, el que hoy jugaría un repechaje), o bien para salir campeón. Palabra, esta última, que Fede conoce bien en su alianza con la azul y oro: jugó cuatro torneos, y clavó un póker.
-Vos ganaste todo lo que jugaste en Boca. ¿En tu objetivo sólo sirve ser campeón?
-Es el desafío de todos. Estoy con toda la ilusión, con todas las ganas. El equipo me gusta mucho, tenemos la obligación de pelear, de ganar cosas importantes... Vamos a esperar cómo empieza el torneo. Pero la idea, obviamente, es salir campeón.
-¿Entonces la gente tiene derecho a ilusionarse?
-¿Por qué no? Todos lo estamos. Tenemos que tratar de encontrar el mejor funcionamiento antes del inicio del campeonato, Boca armó plantel muy rico, de muy buen nivel, y debemos aprovecharlo: a Román, a Martín, al segundo punta que juegue a su lado. El equipo va por buen camino, lo que mostró hasta ahora fue muy interesante. Se vieron cosas buenas.
-¿Te arrepentiste de haberte ido de Boca?
-Para nada. No cambiaría nada de lo que hice en mi carrera. Ni lo bueno ni lo malo. Y eso incluye lo que me pasó cuando me fui de Boca. Encuentro un montón de cosas positivas. Ya haber estado en Alemania, por lo que es como país y sociedad, te cambia la cabeza. Por cómo me trataron, me pusieron un traductor para que me ayudara... En México jugué en el América, muy poderoso desde lo económico. Por todas las cosas que fueron pasando hoy estoy de vuelta en Boca y soy un agradecido de lo que llevo hasta hoy en mi carrera.
-Hiciste mucha fuerza para venir...
-Fue parte de una negociación. Y ninguna es sencilla, sea del jugador menos reconocido hasta el número uno. Fijate que Eto'o tuvo un montón de problemas hasta llegar al Inter, y el resto también tenemos inconvenientes. Siempre que hay plata de por medio, las cifras en el ida y vuelta entre México y Argentina por los jugadores cambian y ahí también hay un tira y afloje. No fue fácil: hubo muchas discusiones pero se llegó a buen término. Se logró y no me importa cómo. No me interesó la forma en que se llegó al acuerdo. Mi meta era jugar en Boca y afortunadamente lo logré.
-De los que te dirigieron, ¿Basile es el entrenador que más seduce a un jugador?
-Tuve técnicos importantes pero lo de Coco es fuerte y ya viene desde la primera etapa, cuando me pidió para Boca. Fue el técnico más importante de mi carrera. Hay otros que también me han dejado muchas cosas: tuve al Tolo, los técnicos de la Selección... Pero las cosas que viví en Boca, jugar cuatro torneos y ganarlos todos y la forma en que se manejó Coco, cómo se trabajó, el nivel que logré... Tuve la suerte de ganar cosas muy importantes, y en lo futbolístico aprendí mucho.
-¿Que él estuviera fue una motivación más para que hicieras tanta fuerza en México?
-Sí, por supuesto. Está bárbaro, con todas las pilas. Cuando me llamó para pedirme obviamente fue una motivación impresionante, cosa que con otro técnico que no conocía hubiese sido distinto. El está muy bien. Las charlas no son largas pero de la forma en que él habla le entendemos más que claro.
-¿Sienten que son los que mejor se reforzaron y eso les generará una presión extra?
-Boca es Boca. Cuando le apunta a un jugador es muy difícil que no llegue. En el país hay muchos problemas para contratar jugadores, se les ha complicado muchísimo. Boca se reforzó muy bien. Los demás no me interesan.
-¿Y la presión?
-Siempre existe presión en Boca, no es de ahora. Cuando llegué, en mi primer ciclo, Boca venía de hacer un campeonato de mitad de tabla y habíamos llegado Cata Díaz, Marino, Krupoviesa, yo... Además, habían vuelto Battaglia y el Negro Ibarra, y se vivió lo mismo que ahora. Fuimos a la gira por Holanda, Corea y China y me acuerdo de que me preguntaban lo mismo que ahora, de la presión por la llegada de Coco y de los refuerzos. Era lo mismo. Este es un equipo que está acostumbrado a las obligaciones que tiene el club. Y eso me pone contento por la importancia que nos da.
Esta virginidad copera inquieta pero no perturba al Pocho: confía en que este equipo, de paso hidalgo por Europa, da el pinet de favorito y que por ello, en febrero, podrá estar frente a su primera vez en la Copa Libertadores. Esa que Boca ganó tantas veces en los últimos nueve años...
El plantel de Boca volvió a Buenos Aires luego de haber concluido la gira por Europa. Ahora habrá que prepararse para las competencias oficiales
Se terminó la gira. Y más allá de lo exitosa que fue, el mundo sigue andando. Ahora vendrán los partidos oficiales y las exigencias cotidianas. Con el plantel en Buenos Aires, Basile vuelve a los trabajos por la tarde.
Esta semana servirá para ir preparando al equipo para las dos competencias que se vienen en el semestre: El Apertura y la Copa Sudamericana. El Complejo Pedro Pompilio será protagonista de los entrenamientos en donde se va a sumar la última incorporación, Ariel Rosada.
Respecto al inicio del Torneo local, habrá que esperar qué resolución se toma en la AFA. La fecha original es la del domingo que viene (16 de agosto) pero es factible que se retrase una semana. Lo que sí está asegurado es que el primer rival de Boca será Argentinos Juniors, en la Bombonera.
En cuanto a la Copa Sudamericana, el debut será el jueves 20 de agosto ante Vélez, también en nuestro Estadio. Esa llave corresponde a los dieciseisavos de Final y será a partido y revancha.
Esta semana servirá para ir preparando al equipo para las dos competencias que se vienen en el semestre: El Apertura y la Copa Sudamericana. El Complejo Pedro Pompilio será protagonista de los entrenamientos en donde se va a sumar la última incorporación, Ariel Rosada.
Respecto al inicio del Torneo local, habrá que esperar qué resolución se toma en la AFA. La fecha original es la del domingo que viene (16 de agosto) pero es factible que se retrase una semana. Lo que sí está asegurado es que el primer rival de Boca será Argentinos Juniors, en la Bombonera.
En cuanto a la Copa Sudamericana, el debut será el jueves 20 de agosto ante Vélez, también en nuestro Estadio. Esa llave corresponde a los dieciseisavos de Final y será a partido y revancha.
Boca vuelve a los trabajos en Buenos Aires a partir de las 16 hs. en el Complejo Pedro Pompilio.
Breve descanso para los del “Coco”. Habiendo llegado ayer a Buenos Aires, el cuerpo técnico dejó a los jugadores descansando con sus familias, pero la puesta a tono sigue. El plantel se va a reunir tras varias semanas en el Complejo Pedro Pompilio, lugar habitual para los entrenamientos Xeneizes.
Si bien no está clara la fecha del comienzo del torneo, Basile sabe que la última etapa de preparación es fundamental de cara a todo el semestre. Por eso, si bien los jugadores están algo cansados, no hay demasiado tiempo para tomarse largas pausas. El plantel se junta a las 16 hs. para moverse y empezar a delinear el inicio de las competiciones oficiales.
“Jugamos bien, pero no es para tirar cohetes”, dijo Basile al pisar suelo argentino. Esto muestra conformidad por un lado, y búsqueda de más por el otro. Con ese objetivo, el técnico plantea lo que resta de la semana.
Objetivos claros para este semestre de Boca. En primer lugar el torneo Apertura: ganarlo y clasificar a la Libertadores 2010. Y la Copa Sudamericana, torneo internacional que siempre tiene a nuestro club como protagonista.
Si bien no está clara la fecha del comienzo del torneo, Basile sabe que la última etapa de preparación es fundamental de cara a todo el semestre. Por eso, si bien los jugadores están algo cansados, no hay demasiado tiempo para tomarse largas pausas. El plantel se junta a las 16 hs. para moverse y empezar a delinear el inicio de las competiciones oficiales.
“Jugamos bien, pero no es para tirar cohetes”, dijo Basile al pisar suelo argentino. Esto muestra conformidad por un lado, y búsqueda de más por el otro. Con ese objetivo, el técnico plantea lo que resta de la semana.
Objetivos claros para este semestre de Boca. En primer lugar el torneo Apertura: ganarlo y clasificar a la Libertadores 2010. Y la Copa Sudamericana, torneo internacional que siempre tiene a nuestro club como protagonista.
lunes, 10 de agosto de 2009
Basile: "Los jugadores agarraron el concepto de juego"
El director técnico de Boca, Alfio Basile, resaltó hoy que durante la gira por Europa sus jugadores "agarraron el concepto de juego".
"Lo importante es que en esta gira nos conocimos bien, jugamos bastante bien y pude observar las características de cada uno de los muchachos. Creo que agarraron rápido el concepto de juego, los nuevos se acoplaron rápido al resto y ahora sólo falta hacer hincapié en algunas cuestiones tácticas", analizó Basile en conferencia de prensa a la llegada de la delegación a Ezeiza.
En el viejo continente, Boca comenzó cayendo por 2-1 ante Manchester United inglés, luego se impuso por penales a Milan por 4-3 tras haber igualado 1-1 y cerró su travesía de la mejor manera, superando al Lask Linz austríaco por 1-0 y a los griegos Aris Salónica y AEK Atenas por 1-0 y 2-0, respectivamente.
El viaje de vuelta comenzó ayer en Atenas a las 7.30 de nuestro país. Desde allí, el plantel voló a Londres, hizo una escala en San Pablo, Brasil, y finalmente el avión de British Airways tocó suelo argentino a las 10.00.
A pesar del cansancio resultante de tantas horas de vuelo, los futbolistas no tuvieron problemas para firmar autógrafos y fotografiarse con los hinchas que fueron a recibirlos al aeropuerto de Ezeiza. Después de eso, cada uno partió a reencontrarse con sus familias, ya que mañana a las 16.00 comenzarán a entrenarse en Casa Amarilla con miras al segundo semestre del año.
La opinión de Basile: "Esto es un despelote"
El director técnico de Boca Juniors, Alfio Basile, opinó hoy que la situación actual del fútbol argentino es "un despelote", pero resaltó que esto no lo "preocupa", porque "el equipo está para jugar".
Al llegar a Ezeiza procedente de Europa, donde Boca realizó una exitosa gira, el entrenador se refirió al enigma sobre el comienzo del torneo y la ebullición por una eventual rescisión con la empresa que tiene los derechos de televisión.
"Qué puedo decir...la verdad que esto es un despelote. No quiero hablar más porque estuve mucho tiempo afuera y antes preferiría ver qué dicen los portales en internet", sostuvo Basile.
De todos modos dijo que ello "no preocupa porque el equipo está para jugar".
Al llegar a Ezeiza procedente de Europa, donde Boca realizó una exitosa gira, el entrenador se refirió al enigma sobre el comienzo del torneo y la ebullición por una eventual rescisión con la empresa que tiene los derechos de televisión.
"Qué puedo decir...la verdad que esto es un despelote. No quiero hablar más porque estuve mucho tiempo afuera y antes preferiría ver qué dicen los portales en internet", sostuvo Basile.
De todos modos dijo que ello "no preocupa porque el equipo está para jugar".
Riquelme gambetea las críticas y asegura que no cambiará su forma de jugar porque le gusta
¿Qué te deja esta gira?
-Una buena sensación. Hemos enfrentado a equipos muy buenos, como Milan y Manchester, hicimos un buen partido ante el AEK...
-En el último semestre sufriste lesiones. ¿Cómo te sentiste ahora?
-Bien, me he entrenado, he jugado todos los partidos... Es verdad que vengo de una lesión por la que me he perdido la mitad del torneo y casi toda la Copa.
-¿Sentiste impotencia?
-No, porque confiaba en mis compañeros, en el equipo, veníamos de ser campeones... No se pudo repetir así que ahora esperemos que se dé.
-¿Qué significa que Boca se haya codeado de igual a igual con algunos grandes clubes de Europa?
-Hay que tener en cuenta que todos están de pretemporada, entonces uno no va con todo a una pelota dividida... Hay que pensar también que ellos contra nosotros no han jugado con todo el equipo titular y que el segundo partido lo jugamos con muchachos que en el primero no habían jugado. Seguro que es bueno que no nos saquen ventaja, que el partido sea parejo, pero son encuentros de pretemporada.
-¿Y se puede trasladar eso al campeonato?
-No, en la Argentina seguro que va a ser más difícil, porque los equipos se preparan al máximo, tienen la ilusión de pelear el torneo, otro deben sumar para no descender y en el torneo pasado quedó demostrado que si no estamos bien, va a ser complicado.
-¿Influyeron los estadios en los que jugaron?
-El estadio del Bayern es increíble, pero sabemos que en nuestro fútbol es todo más difícil. Nos conocen, el contrario sabe cómo jugamos, la forma que tenemos de atacar, cómo hacernos daño... Y tenemos un semestre muy importante con la necesidad de ganar el torneo para jugar la Libertadores.
-¿Puede ser que en Europa te respeten más?
-Lo que veo diferente es que acá disfrutan del fútbol. No es como en Argentina que el hincha rival te insulta. Vivimos en un país donde se vive mucho el fútbol. Por eso es lógico que el que no es hincha de Boca nos esté insultando los 90 minutos.
-Vos decís que sos feliz en una cancha. ¿Sentís que al resto le pasa lo mismo o sufre?
-No sé si es sufrimiento. Es una manera de sentir el fútbol. La gente se olvida de los problemas que tiene. Si el equipo gana, arranca el lunes contenta. En Europa la gente va a la cancha como si fuera al teatro, disfruta de su equipo, del contrario y si el rival hace una buena jugada o un gol hasta es capaz de aplaudir.
-¿Cuál preferís?
-Lo ideal sería tener los estadios que hay en Europa y sentir el fútbol como acá.
-¿Son favoritos?
-No lo sé. Hemos perdido dos jugadores que el club no los va a conseguir en ningún lado, como son Rodrigo y Figueroa. No hay más de esos, no los tenemos más con nosotros y les deseo mucha suerte.
-¿La Copa es prioridad?
-No. El semestre pasado me habrán escuchado decir que tenemos la obligación de ganar tanto el torneo como la Copa. La Libertadores es lo más importante, pero nos tenemos que mentalizar en el torneo, saber que la única chance que tenemos es ganarlo, esta camiseta nos obliga a eso y la única manera de que el hincha esté feliz es saliendo campeón.
-El año que viene se cumplen diez años de tu primera Libertadores. ¿Querés celebrarlo con otra?
-Uno siempre sueña con seguir ganando, juega para eso, ya tengo 31 años y trato de disfrutar al máximo.
-¿No creés que el hincha de Boca espera más la Copa que el torneo?
-El hincha quiere ganar todo lo que juega. Lleva muchos años con un equipo que le ha dado muchas alegrías, se ha acostumbrado a festejar seguido.
-¿Qué significa la Copa?
-En este momento, lo más importante es el campeonato. Si no lo hacemos bien, el año que viene vamos a mirar la Copa por la tele. No queremos eso.
-¿Si no clasifican vas a mirar la Copa por la tele? ¿Algún club te tienta?
-No puedo hablar de lo que pase en seis meses. Vivo el día a día, le he dado mi palabra a Pompilio hace mucho tiempo, la voy a cumplir durante todo este año tratando de jugar lo mejor posible al fútbol.
-¿Qué son para vos Basile y Bianchi?
-Uno es el técnico y el otro es el manager. Tengo una buena relación con los dos. Me han ayudado mucho. Carlos me ha hecho crecer mucho, yo era muy joven cuando lo tuve de técnico y en los años siguientes he conocido a una gran persona como es Basile, a quien tengo la suerte de tener de entrenador nuevamente.
-¿Por qué dividís tanto las aguas?
-Soy un jugador de fútbol y tengo en claro que no a todo el mundo le va a gustar cómo juego. Yo soy muy feliz por la manera que tengo de jugar, por la manera que tengo de sentir el futbol. Tengo una forma muy clara de jugar y no la voy a cambiar.
-¿Molestan las críticas?
-Vivo de una manera muy normal, al menos para mí, tal vez para ustedes no. No leo, no miro la tele para saber qué opinan, porque en un momento lo he hecho pero de lo menos que se habla los lunes es de fútbol, sólo se habla de problemas. Y los partidos, por tele, los miro con el volumen bajo. Así que mucho no me entero. Cuando uno no escucha lo que dice el otro entonces no le da mucha importancia.
-¿Lo mirás sin volumen para no enojarte?
-No, sólo porque cuando yo veo fútbol me doy cuenta de quién juega bien y quién mal, no necesito que me lo comente el de la tele.
-¿Cómo está el grupo?
-Bien. Se habla mucho desde afuera.
-Pero el grupo ha tenido grietas públicas. Vos te peleaste mediáticamente con Cáceres el año pasado...
-Yo hablo de fútbol nomás. Nadie me ha escuchado nunca hablar del vestuario. Nunca voy a hablar ni te voy a preguntar a vos con quién andás bien en tu trabajo o no. Mi obligación es entrar a la cancha, jugar lo mejor que puedo, ganar, que mis compañeros estén muy contentos y que los hinchas de Boca estén muy felices.
-Entonces no se necesita un buen vestuario para lograr un éxito.
-Hay que vivir de la realidad: el equipo ha tenido un momento muy claro, que lo saben todos, antes del clásico, y a los dos meses fue campeón. Eso habla de que si cada uno hace su trabajo dentro de la cancha, y si tenemos la chance de que la pelota pegue en el palo y entre en vez de irse afuera, vamos a tener la posibilidad de terminar festejando. Y eso es lo único que importa.
-A Palermo lo fuiste a saludar tras su gol al AEK.
-Lo hago siempre. Voy a saludarlo a él, a Mouche, a todos. Quiero ganar, son todos compañeros, jugamos por lo mismo, defendemos la camiseta más importante del país y queremos ver a nuestros hinchas felices.
-¿Y qué es Palermo para Boca hoy?
-Palermo es el mejor 9 de los últimos diez años del fútbol argentino, el cual tenemos la suerte de tenerlo, y ojalá que el club le dé la oportunidad tanto a él como a Ibarra de terminar su carrera en Boca.
-Te he visto ponerle vos la cinta a Battaglia cuando te reemplazan pero cuando Palermo te la tiene que dar a vos, lo hace a través de un tercero. ¿Le das importancia a eso?
-Nosotros tenemos la ilusión de ganar, nada más. Riquelme, Palermo, todos. Y si Palermo no juega el capitán es Ibarra, si no es Ibarra el capitán es Riquelme y si Riquelme no juega el capitán es Battaglia, si Battaglia no juega el capitán es Abbondanzieri. Las cosas son simples.
-¿No te llama la atención?
-No tiene nada que ver. Son preguntas que no tienen sentido. Nosotros jugamos al fútbol para ganar, queremos estar contentos en nuestro trabajo, como vos hacés el tuyo lo mejor posible y nosotros no preguntamos qué hacen los demás.
-¿Qué es fracasar en un club como Boca?
-No lo sé. Porque tenemos muchos años buenos, hemos ganado muchísimo, queremos seguir ganando, tenemos la suerte de contar tanto con jugadores que quieren ganar y ha llegado un técnico al que lo único que le interesa es ser el mejor. Para mí, esa palabra no existe porque uno trata de hacer las cosas bien siempre.
-¿No tuviste miedo de ser último?
-Ni lo pensé. A veces la pelota pega en el palo y va para adentro y otras pega en el palo y va para afuera. Después las palabras raras las usan ustedes. Nosotros damos todo para hacer las cosas bien. Siempre.
-Una buena sensación. Hemos enfrentado a equipos muy buenos, como Milan y Manchester, hicimos un buen partido ante el AEK...
-En el último semestre sufriste lesiones. ¿Cómo te sentiste ahora?
-Bien, me he entrenado, he jugado todos los partidos... Es verdad que vengo de una lesión por la que me he perdido la mitad del torneo y casi toda la Copa.
-¿Sentiste impotencia?
-No, porque confiaba en mis compañeros, en el equipo, veníamos de ser campeones... No se pudo repetir así que ahora esperemos que se dé.
-¿Qué significa que Boca se haya codeado de igual a igual con algunos grandes clubes de Europa?
-Hay que tener en cuenta que todos están de pretemporada, entonces uno no va con todo a una pelota dividida... Hay que pensar también que ellos contra nosotros no han jugado con todo el equipo titular y que el segundo partido lo jugamos con muchachos que en el primero no habían jugado. Seguro que es bueno que no nos saquen ventaja, que el partido sea parejo, pero son encuentros de pretemporada.
-¿Y se puede trasladar eso al campeonato?
-No, en la Argentina seguro que va a ser más difícil, porque los equipos se preparan al máximo, tienen la ilusión de pelear el torneo, otro deben sumar para no descender y en el torneo pasado quedó demostrado que si no estamos bien, va a ser complicado.
-¿Influyeron los estadios en los que jugaron?
-El estadio del Bayern es increíble, pero sabemos que en nuestro fútbol es todo más difícil. Nos conocen, el contrario sabe cómo jugamos, la forma que tenemos de atacar, cómo hacernos daño... Y tenemos un semestre muy importante con la necesidad de ganar el torneo para jugar la Libertadores.
-¿Puede ser que en Europa te respeten más?
-Lo que veo diferente es que acá disfrutan del fútbol. No es como en Argentina que el hincha rival te insulta. Vivimos en un país donde se vive mucho el fútbol. Por eso es lógico que el que no es hincha de Boca nos esté insultando los 90 minutos.
-Vos decís que sos feliz en una cancha. ¿Sentís que al resto le pasa lo mismo o sufre?
-No sé si es sufrimiento. Es una manera de sentir el fútbol. La gente se olvida de los problemas que tiene. Si el equipo gana, arranca el lunes contenta. En Europa la gente va a la cancha como si fuera al teatro, disfruta de su equipo, del contrario y si el rival hace una buena jugada o un gol hasta es capaz de aplaudir.
-¿Cuál preferís?
-Lo ideal sería tener los estadios que hay en Europa y sentir el fútbol como acá.
-¿Son favoritos?
-No lo sé. Hemos perdido dos jugadores que el club no los va a conseguir en ningún lado, como son Rodrigo y Figueroa. No hay más de esos, no los tenemos más con nosotros y les deseo mucha suerte.
-¿La Copa es prioridad?
-No. El semestre pasado me habrán escuchado decir que tenemos la obligación de ganar tanto el torneo como la Copa. La Libertadores es lo más importante, pero nos tenemos que mentalizar en el torneo, saber que la única chance que tenemos es ganarlo, esta camiseta nos obliga a eso y la única manera de que el hincha esté feliz es saliendo campeón.
-El año que viene se cumplen diez años de tu primera Libertadores. ¿Querés celebrarlo con otra?
-Uno siempre sueña con seguir ganando, juega para eso, ya tengo 31 años y trato de disfrutar al máximo.
-¿No creés que el hincha de Boca espera más la Copa que el torneo?
-El hincha quiere ganar todo lo que juega. Lleva muchos años con un equipo que le ha dado muchas alegrías, se ha acostumbrado a festejar seguido.
-¿Qué significa la Copa?
-En este momento, lo más importante es el campeonato. Si no lo hacemos bien, el año que viene vamos a mirar la Copa por la tele. No queremos eso.
-¿Si no clasifican vas a mirar la Copa por la tele? ¿Algún club te tienta?
-No puedo hablar de lo que pase en seis meses. Vivo el día a día, le he dado mi palabra a Pompilio hace mucho tiempo, la voy a cumplir durante todo este año tratando de jugar lo mejor posible al fútbol.
-¿Qué son para vos Basile y Bianchi?
-Uno es el técnico y el otro es el manager. Tengo una buena relación con los dos. Me han ayudado mucho. Carlos me ha hecho crecer mucho, yo era muy joven cuando lo tuve de técnico y en los años siguientes he conocido a una gran persona como es Basile, a quien tengo la suerte de tener de entrenador nuevamente.
-¿Por qué dividís tanto las aguas?
-Soy un jugador de fútbol y tengo en claro que no a todo el mundo le va a gustar cómo juego. Yo soy muy feliz por la manera que tengo de jugar, por la manera que tengo de sentir el futbol. Tengo una forma muy clara de jugar y no la voy a cambiar.
-¿Molestan las críticas?
-Vivo de una manera muy normal, al menos para mí, tal vez para ustedes no. No leo, no miro la tele para saber qué opinan, porque en un momento lo he hecho pero de lo menos que se habla los lunes es de fútbol, sólo se habla de problemas. Y los partidos, por tele, los miro con el volumen bajo. Así que mucho no me entero. Cuando uno no escucha lo que dice el otro entonces no le da mucha importancia.
-¿Lo mirás sin volumen para no enojarte?
-No, sólo porque cuando yo veo fútbol me doy cuenta de quién juega bien y quién mal, no necesito que me lo comente el de la tele.
-¿Cómo está el grupo?
-Bien. Se habla mucho desde afuera.
-Pero el grupo ha tenido grietas públicas. Vos te peleaste mediáticamente con Cáceres el año pasado...
-Yo hablo de fútbol nomás. Nadie me ha escuchado nunca hablar del vestuario. Nunca voy a hablar ni te voy a preguntar a vos con quién andás bien en tu trabajo o no. Mi obligación es entrar a la cancha, jugar lo mejor que puedo, ganar, que mis compañeros estén muy contentos y que los hinchas de Boca estén muy felices.
-Entonces no se necesita un buen vestuario para lograr un éxito.
-Hay que vivir de la realidad: el equipo ha tenido un momento muy claro, que lo saben todos, antes del clásico, y a los dos meses fue campeón. Eso habla de que si cada uno hace su trabajo dentro de la cancha, y si tenemos la chance de que la pelota pegue en el palo y entre en vez de irse afuera, vamos a tener la posibilidad de terminar festejando. Y eso es lo único que importa.
-A Palermo lo fuiste a saludar tras su gol al AEK.
-Lo hago siempre. Voy a saludarlo a él, a Mouche, a todos. Quiero ganar, son todos compañeros, jugamos por lo mismo, defendemos la camiseta más importante del país y queremos ver a nuestros hinchas felices.
-¿Y qué es Palermo para Boca hoy?
-Palermo es el mejor 9 de los últimos diez años del fútbol argentino, el cual tenemos la suerte de tenerlo, y ojalá que el club le dé la oportunidad tanto a él como a Ibarra de terminar su carrera en Boca.
-Te he visto ponerle vos la cinta a Battaglia cuando te reemplazan pero cuando Palermo te la tiene que dar a vos, lo hace a través de un tercero. ¿Le das importancia a eso?
-Nosotros tenemos la ilusión de ganar, nada más. Riquelme, Palermo, todos. Y si Palermo no juega el capitán es Ibarra, si no es Ibarra el capitán es Riquelme y si Riquelme no juega el capitán es Battaglia, si Battaglia no juega el capitán es Abbondanzieri. Las cosas son simples.
-¿No te llama la atención?
-No tiene nada que ver. Son preguntas que no tienen sentido. Nosotros jugamos al fútbol para ganar, queremos estar contentos en nuestro trabajo, como vos hacés el tuyo lo mejor posible y nosotros no preguntamos qué hacen los demás.
-¿Qué es fracasar en un club como Boca?
-No lo sé. Porque tenemos muchos años buenos, hemos ganado muchísimo, queremos seguir ganando, tenemos la suerte de contar tanto con jugadores que quieren ganar y ha llegado un técnico al que lo único que le interesa es ser el mejor. Para mí, esa palabra no existe porque uno trata de hacer las cosas bien siempre.
-¿No tuviste miedo de ser último?
-Ni lo pensé. A veces la pelota pega en el palo y va para adentro y otras pega en el palo y va para afuera. Después las palabras raras las usan ustedes. Nosotros damos todo para hacer las cosas bien. Siempre.
Sebastián Battaglia, Gary Medel y Julio Cáceres son los tres jugadores del plantel de Boca que no retornaron a Buenos Aires
El plantel de Boca volvió a Buenos Aires. Bueno, en realidad casi todo el plantel. Es que Sebastián Battaglia, el mejor de la Gira según los lectores del Sitio Oficial, Gary Medel y Julio Cáceres se quedaron en Europa.
El mediocampista fue convocado por Diego Maradona para que sea parte de la Selección Argentina que afrontará un amistoso ante su similar de Rusia, en Moscú. Este partido se llevará a cabo el miércoles a partir de las 12:30 de nuestro país.
De esta manera, el volante Xeneize se separó del grupo conducido por Alfio Basile y se trasladó hasta la capital rusa para incorporarse a la delegación argentina.
Battaglia, quien estará volviendo a Buenos Aires el viernes, tendrá como compañeros en el conjunto nacional a los ex jugadores de Boca Nicolás Burdisso, Daniel Díaz y Jesús Dátolo.
Por su parte, Julio Cáceres se fue a Seúl, Corea, para jugar un amistoso con la Selección de Paraguay. En tanto, el chileno Gary Medel hizo lo propio para ponerse bajo las órdenes de Marcelo Bielsa.
En cambio, Claudio Morel Rodriguez retornó a Buenos Aires ya que fue desafectado del equipo de Gerardo Martino por un golpe en su rodilla.
El mediocampista fue convocado por Diego Maradona para que sea parte de la Selección Argentina que afrontará un amistoso ante su similar de Rusia, en Moscú. Este partido se llevará a cabo el miércoles a partir de las 12:30 de nuestro país.
De esta manera, el volante Xeneize se separó del grupo conducido por Alfio Basile y se trasladó hasta la capital rusa para incorporarse a la delegación argentina.
Battaglia, quien estará volviendo a Buenos Aires el viernes, tendrá como compañeros en el conjunto nacional a los ex jugadores de Boca Nicolás Burdisso, Daniel Díaz y Jesús Dátolo.
Por su parte, Julio Cáceres se fue a Seúl, Corea, para jugar un amistoso con la Selección de Paraguay. En tanto, el chileno Gary Medel hizo lo propio para ponerse bajo las órdenes de Marcelo Bielsa.
En cambio, Claudio Morel Rodriguez retornó a Buenos Aires ya que fue desafectado del equipo de Gerardo Martino por un golpe en su rodilla.
Luego del largo viaje, los futbolistas fueron liberados hasta mañana donde volverán a los entrenamientos por la tarde en el Complejo Pedro Pompilio.
Llegó la hora de ver a las familias. Después de la extensa y exitosa gira por Europa que duró 15 días, los futbolistas tendrán la tarde libre para reencontrarse con sus seres queridos y poder disfrutar de su privacidad.
Ya mañana tendrán que volver al trabajo. El cuerpo técnico conducido por Alfio Basile dispuso que el plantel retorne a los entrenamientos este martes a las 16 hs. en el Complejo Predio Pompilio.
Si bien aún no se sabe cuando será la fecha de inicio del Torneo Apertura, la idea del DT es no cortar la gran tarea que se vino realizando en el Viejo Continente y seguir practicando para estar al cien por cien cuando se decida el inicio del certamen.
Además, Boca se prepara para el duelo de ida ante Vélez por la Copa Sudamericana, pautado para el jueves 20 de agosto en la Bombonera.
Ya mañana tendrán que volver al trabajo. El cuerpo técnico conducido por Alfio Basile dispuso que el plantel retorne a los entrenamientos este martes a las 16 hs. en el Complejo Predio Pompilio.
Si bien aún no se sabe cuando será la fecha de inicio del Torneo Apertura, la idea del DT es no cortar la gran tarea que se vino realizando en el Viejo Continente y seguir practicando para estar al cien por cien cuando se decida el inicio del certamen.
Además, Boca se prepara para el duelo de ida ante Vélez por la Copa Sudamericana, pautado para el jueves 20 de agosto en la Bombonera.
Ya en Ezeiza, luego del largo viaje, Juan Román Riquelme resaltó la importancia de los partidos disputados en Europa y elogió el rendimiento de los re
Pese al cansancio por el largo viaje, Juan Román Riquelme se tomó un tiempo para hacer una evaluación de la importante gira por Europa. En el Aeropuerto de Ezeiza, tras el arribo de la delegación, el ídolo de Boca valoró el trabajo que el equipo realizó en el Viejo Continente.
“Fue muy importante para el técnico, estuvimos 20 días con él y le sirvió para ver a los muchachos que no conocía y a otros que ya tuvo en su anterior paso por Boca y en la Selección. Hemos hecho las cosas de la mejor manera, jugamos muy seriamente porque se nos vienen dos campeonatos muy valiosos como el Apertura y la Copa Sudamericana”, explicó.
Y agregó: “Estos partidos fueron muy importantes para la preparación para los dos torneos que se nos vienen. Jugar contra equipos europeos no es común para un elenco argentino, pero la realidad es que lo más importante en esta etapa es la preparación”.
Por último, Riquelme le dedicó un párrafo a los cuatro refuerzos que llegaron al club: “Medel anduvo muy bien, Insúa jugó buenos partidos y lo de Gunino también fue positivo. Además, es importante que Rosada se sume al equipo”.
Llegó Boca y habló Román. Dejando atrás el agotamiento por el viaje, el Diez le habló a su gente y dejó bien en claro que el equipo va por el buen camino.
“Fue muy importante para el técnico, estuvimos 20 días con él y le sirvió para ver a los muchachos que no conocía y a otros que ya tuvo en su anterior paso por Boca y en la Selección. Hemos hecho las cosas de la mejor manera, jugamos muy seriamente porque se nos vienen dos campeonatos muy valiosos como el Apertura y la Copa Sudamericana”, explicó.
Y agregó: “Estos partidos fueron muy importantes para la preparación para los dos torneos que se nos vienen. Jugar contra equipos europeos no es común para un elenco argentino, pero la realidad es que lo más importante en esta etapa es la preparación”.
Por último, Riquelme le dedicó un párrafo a los cuatro refuerzos que llegaron al club: “Medel anduvo muy bien, Insúa jugó buenos partidos y lo de Gunino también fue positivo. Además, es importante que Rosada se sume al equipo”.
Llegó Boca y habló Román. Dejando atrás el agotamiento por el viaje, el Diez le habló a su gente y dejó bien en claro que el equipo va por el buen camino.
La delegación Xeneize llegará en apenas un rato a Ezeiza tras la exitosa gira por Europa. Quedate en el Sitio Oficial y seguí minuto a minuto el arrib
La delegación Xeneize está por arribar al Aeropuerto de Ezeiza. Tras un largo viaje que incluyó escalas en Londrés y San Pablo, los jugadores llegarán en minutos a la Argentina tras la exitosa gira por Europa.
La delegación de Boca arribó al Aeropuerto de Ezeiza. Tras un viaje agotador que incluyó escalas en Londres y en San Pablo
La delegación de Boca ya arribó a Buenos Aires. El avión de British Airways tocó suelo argentino a las 10 hs. El viaje comenzó ayer a las 7:30 de nuestro país cuando salieron de Atenas rumbo a Londres. Allí cambiaron de avión y de aerolínea. Y con una escala en San Pablo, partieron hacia Ezeiza.
Los rostros de cansancio en la mayoría del plantel dejó en evidencia lo agotador del viaje. De todos modos, los jugadores se mostraron tranquilos y atentos.
Con sonrisas en sus caras y sin problemas para firmar algunos autógrafos para los hinchas que los recibieron, los futbolistas cruzaron el aeropuerto y se retiraron para encontrarse con sus familias.
Volvió Boca. Luego de una Gira muy exitosa, los players ya están pensando en el inicio del Clausura y de la Copa Sudamericana. Otra vez en casa.
Los rostros de cansancio en la mayoría del plantel dejó en evidencia lo agotador del viaje. De todos modos, los jugadores se mostraron tranquilos y atentos.
Con sonrisas en sus caras y sin problemas para firmar algunos autógrafos para los hinchas que los recibieron, los futbolistas cruzaron el aeropuerto y se retiraron para encontrarse con sus familias.
Volvió Boca. Luego de una Gira muy exitosa, los players ya están pensando en el inicio del Clausura y de la Copa Sudamericana. Otra vez en casa.
domingo, 9 de agosto de 2009
Mouche reconoció que le sirvieron las palabras de Palermo y Riquelme
Sentirse cómodo es que las primeras pelotas las juegues bien para entrar en confianza". El pibe, 21 años, desfachatado, pura adrenalina, tenía la receta. Decía que el inicio era fundamental, aspecto clave para encarar con el ánimo in crescendo 90 minutos de vértigo y pasión.
Y un día Pablo Mouche entendió que menos brillo individual puede derivar en más beneficios colectivos. Porque ni siquiera habían pasado 100 segundos cuando descargó de primera para Insúa y porque tampoco las agujas habían marcado los 120 cuando envió un centro preciso, sin frenar la bola, que terminó en un rechazo defensivo, pero que tenía destino de Palermo. "De a poco me voy acomodando al tridente", confiesa ahora, exhausto luego de su mejor partido en la gira, referencia para ese triángulo mortífero que pretende integrar con el 9 y el 10.
Esas dos acciones sirven como de muestra para ilustrar los 78 minutos que Mouche estuvo en cancha. Movedizo, activo, enchufado, quiso devolverle a Basile la confianza otorgada al incluirlo entre los titulares, en la última prueba, la que el DT consideraba esencial para ensayar el famoso equipo de memoria.
"Con Palermo nos vamos entendiendo muy bien. Hoy le tiré varios centros y por suerte en uno de ellos metió el gol". Su piel con el Titán se notó en la primera conquista. Centro con derecha, luego de simplemente frenar la bocha y sin ninguna acción individual, y postrero cabezazo de Martín. En el ST le llegó la oportunidad de la anotación propia. Aprovechó una exquisita habilitación de Riquelme, definió con un remate delicioso al segundo palo y le mostró a Basile que él puede ser un punta por afuera con gol. "Se me venía negando, tenía mis chances pero siempre estaba en el uhh. Meterla sirve para ir ganando más confianza todavía".
La gira sirvió, coincide la mayoría, para amalgamar piezas y poder recitar sin repetir y sin soplar la formación predilecta de Coco. "Se vio un equipo compacto, que jugó muy bien en las tres líneas. Por este partido y por los anteriores creo que el balance de la gira es muy positivo". Y también, claro, ofreció posibilidades de aceitar el funcionamiento del triángulo ofensivo. Por eso, el cierre a todo trapo: "En estos días Martín y Román me fueron hablando y aconsejando y me llegaron sus palabras. De cómo moverme. Me pidieron que tuviera mucha movilidad, que vaya por todos lados... Que juegue como yo lo hago". Y mal no te fue...
Gaitán sufrió un esquince de rodilla y se perdería el inicio del campeonato.
Seidu Yahaya, el morocho nacido en Ghana que juega con el número 26 en el AEK, entró encendido y en una de sus primeras apariciones, se le tiró de atrás a Nicolás Gaitán y la forma en que le retorció las piernas hizo saltar del banco a Basile. Y el susto no era para menos: el zurdo tendrá para unas dos a tres semanas de recuperación.
La alarma que se encendió en el banco xeneize también tiene que ver con que Gaitán era una de las posibilidades que manejaba el Coco para reemplazar a Riquelme en el arranque del torneo (está suspendido por la roja con Colón) y con el esguince que sufrió en la rodilla derecha le quedan dos opciones: poner a Marino o a Chávez (no estuvo en el banco por una contractura) y liberar a Insúa. La lesión, aunque ayer no le hicieron estudios, no creen que sea de gravedad. "La rodilla está firme y estable", confirmó el doctor Ortega Gallo.
El otro que terminó con molestias fue Morel Rodríguez, con un golpe menor en la rodilla izquierda, por lo que deberán evaluar si viaja para jugar con su selección, el 12 de agosto ante Corea del Sur en Seúl.
La alarma que se encendió en el banco xeneize también tiene que ver con que Gaitán era una de las posibilidades que manejaba el Coco para reemplazar a Riquelme en el arranque del torneo (está suspendido por la roja con Colón) y con el esguince que sufrió en la rodilla derecha le quedan dos opciones: poner a Marino o a Chávez (no estuvo en el banco por una contractura) y liberar a Insúa. La lesión, aunque ayer no le hicieron estudios, no creen que sea de gravedad. "La rodilla está firme y estable", confirmó el doctor Ortega Gallo.
El otro que terminó con molestias fue Morel Rodríguez, con un golpe menor en la rodilla izquierda, por lo que deberán evaluar si viaja para jugar con su selección, el 12 de agosto ante Corea del Sur en Seúl.
En el cierre de la gira, Boca se lució con un ataque que mezcla genio, explosión y gol
En la lejana Ohio, Guillermo Barros Schelotto sentirá seguramente la infinita nostalgia de los 11 años que pasaron. Se recordará más joven, con el pelo menos planchado que Pablo Mouche, pero encontrará semejanzas que lo transportarán a ese tiempo en el que Boca empezaba a forjar su leyenda moderna. En la ideología futbolera de Carlos Bianchi, así como había laterales que pasaban de a uno por vez y tres volantes definidos, los encargados de la producción ofensiva eran Riquelme, el Melli y Palermo, un tridente intocable. Ver el centro flotante de Mouche para el cabezazo del Loco, o el pase entre líneas de Román para la definición del último wing invita al recuerdo, genera un déja vu y abre el abanico de las comparaciones. ¿Hay similitudes? Claro. De nombres (más allá de los años), de características del nuevo integrante, de expectativas... Y de confianza, claro. Basile puede darse el lujo de tirar un taco en pleno partido, un síntoma de tranquilidad. Más allá de que los amistosos no suman para la Copa, ¿cuántos equipos argentinos enfrentaron al Manchester, al Milan, al AEK? Con poco más de una semana de preparación intensa tras el antecedente de un semestre entre malo y peor, Boca pasó por Europa generando sorpresa cuando no respeto, ganándose nuevas invitaciones y templando el ánimo para la feroz batalla interna.
Por primera vez, ante el AEK, el Coco formó su equipo de memoria. Quizá, más adelante en el camino, haya algún retoque (Monzón es el lateral que más gusta, aunque hoy no lo vean del todo bien). Y habrá que ver si el técnico pone a hibernar su vozarrón en el pedido de otro punta. Por lo pronto, Mouche dio ayer señales inequívocas de madurez: la cabeza levantada para el centro del primer gol, la sencillez en el traslado de la pelota y la resolución de las jugadas... Y también cierta búsqueda a lo Palacio de vivir al borde del offside que no parece casual. Todavía no tiene el ojo en la espalda para verlo llegar a Insúa en una contra y liga alguna que otra palabra no del todo dulce, pero parece haber entendido que el secreto está en la simplicidad.
La conversión de Palermo, sobre la campana final de la gira, es otra buena noticia (el Coco ya había anticipado que le gusta que los goles los hagan los delanteros). Y la puñalada de Riquelme para el 2-0 responde a las expectativas del técnico de tener un enganche que no sólo sea admirable en administración y cuidado del balón sino que también se comprometa con esos pases que arriesgan la posesión pero también ponen en peligro al rival. Le falta todavía a Román pisar más el área, aunque la presencia de Insúa actúe en parte de alter ego, para que la función de enganche pueda desdoblarse entre el tipo que tiene el panorama completo y el que llega a fondo. Esta presencia del Pocho hace pensar, además, en un dibujo más cercano a un 4-2-4 que al 4-3-1-2.
Boca se vuelve en paz. Supo jugar ante rivales que le plantearon dificultades diversas: desde los que obligaban a tener la pelota para no sufrir contras letales hasta los que se cerraban, especulativos, y requerían asedio. También empieza a armar pequeñas sociedades. Que es lo mismo que decir que recuperó la memoria de equipo.
Por primera vez, ante el AEK, el Coco formó su equipo de memoria. Quizá, más adelante en el camino, haya algún retoque (Monzón es el lateral que más gusta, aunque hoy no lo vean del todo bien). Y habrá que ver si el técnico pone a hibernar su vozarrón en el pedido de otro punta. Por lo pronto, Mouche dio ayer señales inequívocas de madurez: la cabeza levantada para el centro del primer gol, la sencillez en el traslado de la pelota y la resolución de las jugadas... Y también cierta búsqueda a lo Palacio de vivir al borde del offside que no parece casual. Todavía no tiene el ojo en la espalda para verlo llegar a Insúa en una contra y liga alguna que otra palabra no del todo dulce, pero parece haber entendido que el secreto está en la simplicidad.
La conversión de Palermo, sobre la campana final de la gira, es otra buena noticia (el Coco ya había anticipado que le gusta que los goles los hagan los delanteros). Y la puñalada de Riquelme para el 2-0 responde a las expectativas del técnico de tener un enganche que no sólo sea admirable en administración y cuidado del balón sino que también se comprometa con esos pases que arriesgan la posesión pero también ponen en peligro al rival. Le falta todavía a Román pisar más el área, aunque la presencia de Insúa actúe en parte de alter ego, para que la función de enganche pueda desdoblarse entre el tipo que tiene el panorama completo y el que llega a fondo. Esta presencia del Pocho hace pensar, además, en un dibujo más cercano a un 4-2-4 que al 4-3-1-2.
Boca se vuelve en paz. Supo jugar ante rivales que le plantearon dificultades diversas: desde los que obligaban a tener la pelota para no sufrir contras letales hasta los que se cerraban, especulativos, y requerían asedio. También empieza a armar pequeñas sociedades. Que es lo mismo que decir que recuperó la memoria de equipo.
A Boca da gusto verlo en control de la pelota
Con manejo de tiempos y ese toque de suficiencia del que se convence de su capacidad. Y mucho más placer genera que esa elaboración cuidada se estampe en la red, como sucedió dos veces -cantidad inédita para este incipiente ciclo- en el estadio Olímpico. Sabemos que los amistosos son una mera referencia, que se borronea apenas empieza a girar oficialmente la pelota. Recordemos, sin necesidad de voltear muchas hojas del almanaque, la sucesión de éxitos veraniegos de la anterior gestión, no refrendados en la competencia local. Basile, es cierto, hilvanó triunfos en competencias de toda clase y se lo nota con fe para animarse a repetir la historia 05/06. Su equipo ya mostró aspectos para valorar. De atrás hacia adelante, el tour europeo dejó la firmeza de Paletta; el entusiasmo de Morel por demostrarle a Basile que merece la titularidad; el batallar de Medel al lado del goleador Battaglia; el primer cabezazo adentro de Palermo desde su regreso y el primer grito de Mouche en el año. Estos son los delanteros con gol, Alfio.
Los tres de arriba se van entendiendo muy bien y eso hace que Boca sea un equipo temible
Y la verdad es que vi un funcionamiento parecido al que tenía cuando jugaban Riquelme, Barros Schelotto y Palermo.
Mouche, el nuevo en este tridente, tiene más velocidad que Guillermo y es zurdo, pero al igual que el Mellizo va por las dos puntas, maneja bien los dos perfiles y es un jugador muy interesante que demostró estar al nivel de los otros dos. Riquelme dio un pase excepcional en el segundo gol. Y Palermo, a pesar de los años, siempre es una amenaza. Lo he sufrido bastante...
Después de este partido puedo decir que este equipo está casi listo para competir por los puntos y tanto en la Argentina como a nivel sudamericano va a estar siempre entre los favoritos.
Mouche, el nuevo en este tridente, tiene más velocidad que Guillermo y es zurdo, pero al igual que el Mellizo va por las dos puntas, maneja bien los dos perfiles y es un jugador muy interesante que demostró estar al nivel de los otros dos. Riquelme dio un pase excepcional en el segundo gol. Y Palermo, a pesar de los años, siempre es una amenaza. Lo he sufrido bastante...
Después de este partido puedo decir que este equipo está casi listo para competir por los puntos y tanto en la Argentina como a nivel sudamericano va a estar siempre entre los favoritos.
Finalizó la Gira por Europa. Hacemos un repaso de las ciudades que visitó Boca y del recibimiento de la gente a nuestros jugadores.
Todo tiene un final, todo termina. La Gira de Boca por Europa tocó su fin y llegó el momento de hacer un repaso de lo que fue la misma desde el punto de vista extrafutbolístico.
El domingo 27 de julio, la delegación Xeneize tocó tierras germanas. La imponente Münich nos recibió con su orden y pulcritud. La Copa Audi estaba por empezar y los grandes equipos europeos se harían presentes para jugar con Boca. Mucho merchandising y glamour. Todo cinco estrellas, seriedad y puntualidad alemana, ningún detalle librado al azar y la presencia de figuras del fútbol junto a empresarios.
El segundo paso fue la coqueta Linz, en el noroeste de Austria. Una ciudad elegante, limpia y con poca pasión por el fútbol. De hecho, el deporte predilecto del lugar es el esquí. Y eso que ni siquiera cuentan con pistas para desarrollar ese deporte. Un público muy cordial pero distante y frío.
Finalmente llegó la alocada Grecia. Latina, como nosotros, nos envolvió en su vorágine y en su manera de ser tan similar a los argentinos. En el Aeropuerto de Tessalónica, primer destino de Boca en este país, ya se vio la pasión de la gente cuando fueron a recibir al equipo con banderas y con mucho fervor. El primer entrenamiento allí fue increíble: mil personas en las gradas como si fuera un partido. Y el cotejo ante el Aris no nos hizo extrañar en nada esa costumbre tan nuestra de la cancha llena, las bengalas, las banderas y los cantos sin cesar.
El último punto de la Gira fue Atenas. Aquí la historia se hizo presente. La visita del plantel al Partenón y a los diversos atractivos turísticos de lugar que están emparentados con la cultura milenaria del lugar fue muy sentida. Las cámaras de fotos y las filmadoras de los jugadores se quedaron con el recuerdo del paso por este emblema de la cultura universal.
En síntesis. De todo un poco. Trabajo, placer, pasión, cultura, orden, marketing y fútbol. No cabe duda de que ha sido una Gira muy exitosa. Boca dejó una huella, una marca y a su nombre escrito en letras grandes entremezclada con los poderosos de Europa. Un lujo que vale la pena repetir.
El domingo 27 de julio, la delegación Xeneize tocó tierras germanas. La imponente Münich nos recibió con su orden y pulcritud. La Copa Audi estaba por empezar y los grandes equipos europeos se harían presentes para jugar con Boca. Mucho merchandising y glamour. Todo cinco estrellas, seriedad y puntualidad alemana, ningún detalle librado al azar y la presencia de figuras del fútbol junto a empresarios.
El segundo paso fue la coqueta Linz, en el noroeste de Austria. Una ciudad elegante, limpia y con poca pasión por el fútbol. De hecho, el deporte predilecto del lugar es el esquí. Y eso que ni siquiera cuentan con pistas para desarrollar ese deporte. Un público muy cordial pero distante y frío.
Finalmente llegó la alocada Grecia. Latina, como nosotros, nos envolvió en su vorágine y en su manera de ser tan similar a los argentinos. En el Aeropuerto de Tessalónica, primer destino de Boca en este país, ya se vio la pasión de la gente cuando fueron a recibir al equipo con banderas y con mucho fervor. El primer entrenamiento allí fue increíble: mil personas en las gradas como si fuera un partido. Y el cotejo ante el Aris no nos hizo extrañar en nada esa costumbre tan nuestra de la cancha llena, las bengalas, las banderas y los cantos sin cesar.
El último punto de la Gira fue Atenas. Aquí la historia se hizo presente. La visita del plantel al Partenón y a los diversos atractivos turísticos de lugar que están emparentados con la cultura milenaria del lugar fue muy sentida. Las cámaras de fotos y las filmadoras de los jugadores se quedaron con el recuerdo del paso por este emblema de la cultura universal.
En síntesis. De todo un poco. Trabajo, placer, pasión, cultura, orden, marketing y fútbol. No cabe duda de que ha sido una Gira muy exitosa. Boca dejó una huella, una marca y a su nombre escrito en letras grandes entremezclada con los poderosos de Europa. Un lujo que vale la pena repetir.
Alfio Basile se mostró contento con lo hecho por su equipo a lo largo de la gira
Terminó la gira. Y Boca se vuelve ganador. Tres triunfos, un empate y una derrota inmerecida es el saldo del tour europeo. Su entrenador, Alfio Basile, puede estar más que satisfecho. Y de hecho, lo está. Así lo hizo saber una vez concluido el cotejo ante el AEK.
“Tranquilo, ganamos bien. Todos los partidos son amistosos pero ganamos bien, claros” fue su primera frase.
Consultado acerca de si el equipo que hoy puso en la cancha será el titular durante las competencias oficiales, Basile fue esquivo: “No lo voy a decir hasta que se lo diga a los players. A ellos se los voy a decir allá (en Buenos Aires), cuando lleguemos”.
Finalmente, el 'Coco' se mostró ampliamente conforme por la producción de su equipo durante los primeros partidos: “El balance es muy bueno. Me voy contento”.
“Tranquilo, ganamos bien. Todos los partidos son amistosos pero ganamos bien, claros” fue su primera frase.
Consultado acerca de si el equipo que hoy puso en la cancha será el titular durante las competencias oficiales, Basile fue esquivo: “No lo voy a decir hasta que se lo diga a los players. A ellos se los voy a decir allá (en Buenos Aires), cuando lleguemos”.
Finalmente, el 'Coco' se mostró ampliamente conforme por la producción de su equipo durante los primeros partidos: “El balance es muy bueno. Me voy contento”.
La figura de la gira
Lazzatti, Rattín, el 'Chapa' Suñé, Giunta. Boca siempre se destacó por tener volantes de marca muy destacados. Y Sebastián Battaglia no se iba a quedar atrás. El santafesino tuvo una Gira por Europa inolvidable. Fue el mejor y fue... ¡El goleador de Boca!
Con la llegada de Insúa, quien vino para ayudar a Riquelme en la gestación, el mayor temor pasaba por una posible descompensación en la mitad de la cancha. Medel y Battaglia podrían verse superados por inferioridad numérica y todo el equipo lo podría sufrir. Pero cuando hay un conjunto que cuenta con el volante central que tiene Boca, todo es más sencillo.
A lo largo de estos partidos, Battaglia quitó, presionó sobre los costados y ordenó a sus compañeros. Se metió entre los centrales cuando el rival se venía por abajo y apretó más adelante cuando había que recuperar lejos. En el juego aéreo se impuso en las dos áreas y con la pelota en los pies simplificó a uno o dos toques cuando se necesitaba volumen y la metió larga cuando se precisaba sacar al equipo hacia adelante. Demostró, así, una enorme capacidad de ubicación y de conocimiento de la táctica individual y colectiva. Encima, y como si todo esto no hubiese sido suficiente, se dio el lujo de convertir dos goles y ser el máximo artillero del equipo en la Gira. El primero, ante el Lask, fue descomunal. Quitó una pelota en la mitad de la cancha, tocó corto y fue a buscar la devolución. Pisó el área y definió cruzado como si fuese un delantero acostumbrado al oficio de goleador. El segundo, más clásico. Se mandó por atrás de todos y metió el cabezazo inatajable para el arquero del Aris.
Basile puede respirar tranquilo. El 'equilibrista', como él mismo lo llamó, le aporta demasiadas soluciones. Battaglia, un lujo que respeta la tradición del cinco azul y oro.
Con la llegada de Insúa, quien vino para ayudar a Riquelme en la gestación, el mayor temor pasaba por una posible descompensación en la mitad de la cancha. Medel y Battaglia podrían verse superados por inferioridad numérica y todo el equipo lo podría sufrir. Pero cuando hay un conjunto que cuenta con el volante central que tiene Boca, todo es más sencillo.
A lo largo de estos partidos, Battaglia quitó, presionó sobre los costados y ordenó a sus compañeros. Se metió entre los centrales cuando el rival se venía por abajo y apretó más adelante cuando había que recuperar lejos. En el juego aéreo se impuso en las dos áreas y con la pelota en los pies simplificó a uno o dos toques cuando se necesitaba volumen y la metió larga cuando se precisaba sacar al equipo hacia adelante. Demostró, así, una enorme capacidad de ubicación y de conocimiento de la táctica individual y colectiva. Encima, y como si todo esto no hubiese sido suficiente, se dio el lujo de convertir dos goles y ser el máximo artillero del equipo en la Gira. El primero, ante el Lask, fue descomunal. Quitó una pelota en la mitad de la cancha, tocó corto y fue a buscar la devolución. Pisó el área y definió cruzado como si fuese un delantero acostumbrado al oficio de goleador. El segundo, más clásico. Se mandó por atrás de todos y metió el cabezazo inatajable para el arquero del Aris.
Basile puede respirar tranquilo. El 'equilibrista', como él mismo lo llamó, le aporta demasiadas soluciones. Battaglia, un lujo que respeta la tradición del cinco azul y oro.
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