sábado, 16 de abril de 2011

Las chicas de Boca salieron campeonas, se clasificaron a la Libertadores-


Obtener el título, ser campeonas y, encima, con una ayudita de River (le ganó al otro puntero y les dejó servida la vuelta). Clasificarse para la Libertadores 2011 y, como premio extra, tener la chance de ganarse u$s 5.000 en el programa de Sofovich. Las chicas del fútbol femenino de Boca empezaron el año con todo y hoy arrancan el Clausura para repetir.

Luego del título que obtuvieron hace un mes, las chicas recibieron el llamado de la producción de La Noche del Domingo para participar de un casting para un concurso: hacer jueguito la mayor cantidad de tiempo posible en el programa de Sofovich. ¿El premio? Cinco mil al primer puesto, dos mil y mil las otras dos. Ya participaron Carmen Brusca, Rosana Gómez y quien hoy lidera el ranking, Eva González. ¿Cuánto tiempo hizo? ¡29 minutos! “Si pasás los primeros minutos ya te relajás. Lo que te mata son los nervios. Yo me puse a hablar con Sofovich, que me decía que es hincha de Boca y le dije que nos tiene que venir a ver. Después, con las luces empecé a sentir calor y decidí parar”, cuenta la central. Hoy está puntera (este domingo irá la juvenil Florencia Festina) y si gana ya le pidieron que pague un asado.

Pero no es el único sueño. El domingo, a las 16.30 en La Quemita y ante Huracán, arranca el Clausura. Y esperan repetir, aunque la clasificación a la Copa parece asegurada: por los Panamericanos (en octubre) se adelantará la fecha del torneo (sería en junio en Chile) y, al no haber terminado el torneo, Boca quedaría clasificado directamente. El año pasado, la jugaron por primera vez, luego de ganar el Apertura y el repechaje ante River. Fueron a Brasil y casi se meten en la ronda final. Este año, entonces, irán por la revancha en América

Falcioni si corre cuando le preguntan si al Loco lo asisten: "Creo que sí, pero estoy de la raya para afuera".


Así, la lupa va sobre la interna y no sobre las problemas de juego. "Habría que preguntarles a los compañeros", completó JC.

Le pasan la pelota lo suficiente a Palermo?

-Tendrían que preguntarles a los compañeros, pero pienso que sí. Yo estoy de la línea para afuera.

La pelota no llega, el gol no le llega. Van 811 minutos sin parecerse a Martín Palermo, porque no es normal verlo tan lejos del gol. Tuvo otras rachas en Boca, seis o siete partidos, nunca tantos. Y nunca con tan poca presencia en el área. Sin perderse goles. Sin la posibilidad de perdérselos. Entonces, por ese problema evidente, nació la pregunta para Julio César Falcioni. Y cuando la respuesta de un técnico políticamente correcto no es políticamente correcta, se plantea el interrogante: ¿por qué será que no se la pasan lo suficiente? La teoría más fácil de elaborar, que circuló esta semana por los pasillos de la Bombonera, es la del complot. Si alguien da a entender que no le pasan la pelota a Palermo, está señalando implícitamente a Riquelme. Ya había ocurrido algo parecido justo hace un año, cuando el Loco alcanzó el récord de Roberto Cherro ante Vélez (como máximo goleador de todas las eras, la amateur y la profesional) y pasó seis partidos hasta volver a convertir frente a Arsenal. Hasta se había dicho que la barra había ido a hablarle a Román por su falta de colaboración con el goleador...

Ahora, en tiempos de relaciones correctas entre Palermo y Riquelme, en los que se preocupan por saludarse en los goles y por entregarse el brazalete de capitán en la mano, también hay lugar para pensar en las responsabilidades futbolísticas del conjunto, de las individualidades y del técnico. Falta elaboración de juego, hay diez jugadores de un lado y uno allá a lo lejos y no apareció solución con los cambios tácticos y de nombres. Román vino acompañado con goles y participación decisiva en dos triunfos (Colón y Estudiantes), pero no logró hacer levantar en mucho el nivel colectivo.

Palermo, en su cuenta personal, tiene dos goles a River en el verano y después entró en sequía. Aunque nunca le sobraron las oportunidades para convertir, tuvo más en las primeras fechas. En las últimas, cuando salió Pablo Mouche y se vio obligado a arreglárselas solo, no tuvo prácticamente ninguna. Primero estalló de bronca, después empezó a tomárselo con calma y ahora hasta parece haber aceptado tener que convivir sin participación y con una chance por partido. Sabe que el esquema no lo favorece, que los delanteros que juegan con ese dibujo son de otro estilo: movedizos, recorren todos el frente de ataque. Y él es un animal de área que aun en su juventud precisó de un socio. Pero más allá de su ansiedad por superar el gol 230, elige no desesperarse y ser optimista con que mañana, en la mitad del último torneo de su carrera, puede cortarse.

Falcioni intentó sumar volantes ofensivos (Chávez, Erviti, Riquelme) para que lo acompañaran. Les reclamó a los laterales que avanzaran en el campo, fueran profundos y trataran de encontrar al 9 en el área. No lo logró. Ni siquiera la vuelta de Román ayudó. Pasaron los tres partidos más duros para el Loco, los de menor presencia en el área. Y con eso, las suspicacias que Falcioni esta vez no se encargó de hacer desaparecer.

Los técnicos están de la línea para afuera en los partidos, pero de la línea para adentro durante toda la semana. Si no lo sabe él...

Un 16 de abril de 1958 debuta en Boca el crack brasilero Orlando


Orlando Pecanha de Carvalho , el campeón del mundo con Brasil en 1958 debuta en Boca ante Rosario Central (0-0). Jugó 5 temporadas siendo capitán y ganó 3 títulos


Surgido de Vasco da Gama. Debutó en 1955 donde perteneció por 5 años a ese club.

En 1958 ganó la Copa Mundial de Fútbol, jugando para su selección Brasil.

En 1961 pasó a jugar a Boca Juniors, por expreso pedido de Feola, donde se hizo con la capitanía y con la idolatría de la gente por su capacidad de defender y principalmente por gran temperamento. Con el club "Xeneize" obtuvo los campeonatos de 1962, 1964 y 1965. Se convirtió en pieza clave, además de su capacidad defensiva, por cubrir las salidas de Silvio Marzolini. En 1965 tuvo problemas con el entrenador de ese momento, Nestor Rossi y dejó al club de la ribera. Jugó 119 partidos (105 locales y 14 por Copa Libertadores) y no marcó goles.

En ese mismo año pasó al famoso Santos FC donde jugaba con Pelé. Se mantuvo allí hasta 1969.

En 1970 pasaría al club del debut, Vasco da Gama, donde finalmente se retiraría del fútbol ese mismo año.

El 10 de febrero de 2010 tuvo un ataque al corazón, al que su cuerpo no pudo resistir, y falleció.1

viernes, 15 de abril de 2011

El técnico "xeneize" se mostró fastidioso por la nueva demora del lateral en arribar al entrenamiento, ya que es la segunda vez que pasa en tres días:


"Me molesta que llegue tarde y se lo hice saber", sentenció. Además, confirmó que Leandro Marín podría ser su reemplazante


Falcioni parecía que tenía el equipo para enfrentar a Tigre, pero un acto indisciplinario de Luciano Monzón desató la bronca del entrenador en plena conferencia de prensa: “Si, me molestó que llegue tarde y se lo hice saber. Estoy pensando si saco a Monzón del equipo”. Y agregó que “Marín puede ser una alternativa".


“Son situaciones que en jugadores profesionales no pueden pasar. Me molesta a mí como también le puede molestar al resto”, concluyó el director técnico de Boca.



También se refirió a sus cuestionados planteos tácticos, los cuales son apuntados de defensivos: “No pienso en no ganar. A veces lo conseguimos otras no”.



Con respecto a los ingresos de dos jugadores juveniles dentro de la defensa explicó: “Ruiz y Sauro tienen responsabilidad plena, están preparados para jugar, están bien. Tienen que jugar con la tranquilidad con que lo hacen en la Reserva.



Luego, Falcioni reconoció que el equipo está en deuda con la gente y avisó: “Estamos buscadnos resultados que nos depositen más arriba en la tabla para llegar al clásico con chances de pelear”.



Por último, el entrenador se refirió a una de las polémicas dentro del mundo “xeneize”. Porque los jugadores abastecen mal al goleador histórico del club: “Yo pienso que sí, que los compañeros se la intentan pasar bien a Palermo”.

Fabián Monzón, que llegó tarde a la práctica del miércoles, día de su cumpleaños, otra vez apareció tarde por Casa Amarilla.


Se sumó al grupo cuando ya estaban entrenando y arrancó el ensayo de fútbol como titular, pero luego Falcioni lo sacó.

Dos veces en una semana, para un técnico riguroso con las normas de convivencia diaria, es demasiado. Ahora también lo sabe Fabián Monzón. El lateral el miércoles, justo el día de su cumpleaños, llegó tarde al entrenamiento y, por más que recibió saludos y manteadas por el día especial, recibió la primera advertencia. Este viernes volvió a aparecer por Casa Amarilla con alguna demora. Y la cara de Julio Falcioni se puso más seria que de costumbre.

El lateral, quien en principio igualmente va a ser titular ante Tigre, se sumó a la práctica con 20 minutos de retraso, cuando el grupo ya estaba haciendo trabajos físicos. A la pasada recibió un susurro de Martín Palermo. Y, de lejos, le clavó la vista el técnico, quien tomó medidas muy rápido. Si bien lo puso entre los titulares en el equipo que comenzó el ensayo de fútbol, al rato, lo sacó del equipo y puso en su lugar al juvenil Leandro Marín. Al final del entrenamiento hubo una charla entre el jugador y el técnico y todo quedó aclarado.

Boca se entrena con vista al juego del domingo ante “El Matador”.


El técnico esperará al defensor, quien arrastra una molestia en el isquiotibial derecho. En caso de no llegar, en su lugar entraría el juvenil Enzo Ruiz. Además, luego de la práctica, Falcioni, en conferencia de prensa, confirmaría el regreso de Sauro y Mouche



Nuevamente los cambios volverían a decir presente en Boca. La derrota con Lanús trajo secuelas, al punto que el técnico dejaría el cauteloso 3-5-1-1 para pasar a jugar con 3-4-1-2. La falta de peso ofensivo en el último juego, sería la clave para esta decisión, que tendría su bautismo este fin de semana en “La Bombonera”.



Martín Palermo tendría la compañía de Pablo Mouche, quien ocuparía el lugar de Cristian Chávez. En tanto, las otras variantes se darían en la defensa, donde Gastón Sauro cuenta con grandes chances de suceder a Juan Manuel Insaurralde (suspendido por cinco amarillas), mientras que la única duda pasa por ver la recuperación de Cellay, que ayer trabajó diferenciado por un fuerte golpe. Si el ex Huracán no llega, el juvenil Ruiz ocuparía su lugar.


Más allá de que la práctica de ayer terminó 1 a 1, con una gran actuación de Lucchetti en el arco de los titulares, el técnico no haría variantes y pararía el siguiente equipo para jugar el domingo a las 16.10: Cristian Lucchetti; Cellay o Ruíz, Matías Caruzzo, Sauro; Clemente Rodríguez, Leandro Somoza, Walter Erviti, Luciano Monzón; Juan Román Riquelme; Mouche y Martín Pal

Un 15 de Abril de 2007 el Melli jugaba su último partido en Boca


Fue(1-1 con River) su último match en el club. El final de una carrera de casi diez años seguidos en Boca y una idolatría que todavía se recuerda.

Los números totales de Guillermo Barros Schelotto en Boca:

212 partidos de Primera División - 62 goles
88 partidos internacionales - 24 goles
66 partidos amistosos - 14 goles

Total: 366 partidos - 100 goles

Ganó 16 títulos (Aperturas 1998, 2000, 2003 y 2005, Clausuras 1999 y 2006, Copas Libertadores 2000, 2001, 2003 y 2007, Intercontinentales 2000 y 2003, Copas Sudamericanas 2004 y 2005, Recopas Sudamericanas 2005 y 2006 -único torneo que ganó en el que no estuvo ni un minuto en cancha-).

jueves, 14 de abril de 2011

Rojitas y Román, dos ídolos sin tiempos, patearon para el mismo lado: con la pelota pintaron un cuadro que será subastado para Unicef.


La emoción de una obra histórica...

El Tano Pascual, famoso hincha habitué de los entrenamientos de Boca, ya pasó los 80 años de vida. Qué mejor opinión que la suya, entonces, para una pregunta que ayer se formuló bastante en el club.

-¿Quién fue mejor, Rojitas o Riquelme?

-Los dos por igual.

Al veterano hincha se le piantó un lagrimón (es literal) cuando observó una imagen que también habría emocionado a los hinchas que ya pasaron los 50: Angel Clemente Rojas y Juan Román Riquelme juntos. Boca los crió y Unicef los juntó. Sí. El viejo ídolo y el ídolo actual. Dos cracks de épocas diferentes que están metidos en la historia de Boca.

Después de una larga espera, el 10 actual apareció por la cancha principal de Casa Amarilla vestido con la ropa del club y en ojotas. Con una chomba rayada, jeans y mocasines negros lo aguardaba Rojitas. Se fundieron en un abrazo. Un “cómo estás, pibe” y un “todo bien, maestro” fue el diálogo antes de realizar la obra benéfica que los unió un ratito. La idea era patear la pelota y que ésta pegara en un tachito de pintura para dejar la mancha en un panel. Dicho muro luego será subastado para que el dinero recaudado sea donado a programas educativos. Román pateó descalzo. Rojitas no se sacó los mocasines, lo que generó la broma de JR: “Ahora sí cagaste con esos zapatos, eh”. El viejo ídolo sonrió y le dio tres veces sin llegar a ensuciarse.

Gentil, de buen humor, visiblemente emocionado por la convocatoria de Unicef, Rojitas, de 66 años, llegó diez minutos antes de las 12, el horario pautado para el evento. Antes del encuentro con Román, charló un ratito con Olé .

-Angel, ¿quién fue mejor, entonces?

-Poné parejos, jaja... No, en serio, no se puede comparar. Se me hace difícil porque son épocas distintas. Todo cambió. La plata, la tele... Antes, los partidos, si no los veías en la cancha, los tenías que escuchar por la Spika. Es todo diferente. Lo más lindo es que la gente que nos vio jugar nos tiene en su corazón. Esa es mi satisfacción más grande.

-Dicen que usted, Maradona y Riquelme son los tres más grandes de la historia del club. ¿Coincide?

-(Piensa) No sé en qué lugar estaré. Para decir eso están la gente y los periodistas. Diego fue un genio, el mejor de la historia del fútbol. Pero en la comparación entre ellos, creo que Román fue el mejor jugador de la historia de Boca. Jugó más tiempo y lo jhizo desde chico, como yo. Y eso es un plus para el hincha.

Ganador de cuatro títulos locales (“cuando los torneos duraban un año, pibe”, aclara), Rojitas jugó nueve años en Boca. Su gambeta enseguida lo hizo ídolo. “Antes había que jugar tantos años en Boca, eh. No era fácil porque había cada nene... Hoy el fútbol cambió mucho. Porque apareció el amarretismo. Muchos técnicos le sacaron al hincha lo que más gustaba: el buen fútbol. Se empezó a pensar en ganar de cualquiera manera y así estamos”.

-¿Qué piensa de este momento de Boca?

-Y... es preocupante. Fue una lástima que no ganara el domingo porque si sumaba tres triunfos seguidos se iba a acomodar en la tabla.

-¿Este Boca depende mucho de Román?

-Claro, el equipo tiene que girar a su alrededor.

Llegaron los pelotazos al futuro muro. Las risas entre ambos, los abrazos, los flashazos para eternizar esa imagen codiciada por tantos hinchas y, para el final, las palabras del otro ídolo. El actual, el que ya está metido en la historia. “Es un hecho muy lindo poder ayudar a los chicos con esta obra y sobre todo poder hacerlo junto a Rojitas, alguien que fue tan grande, ¿no?”, arrancó el enganche.

Riquelme no lo vio jugar pero sí estaba muy al tanto de la gesta memorable de Angel Clemente Rojas. “Mi papá me dice que fue el mejor de todos. El se puso muy contento cuando ayer le conté que hoy iba a estar con Rojitas. No pudo venir porque tenía que llevar a mi hermano a entrenarse, pero estoy seguro de que él está mucho más feliz que yo”.

Se habían cruzado un par de veces antes de este acontecimiento. “Hoy lo vi de mejor humor, más dado, antes era más callado, más tímido”, lo definió Rojitas. Dos potencias se saludaron y pasaron un lindo rato juntos. La historia de Boca los unirá para siempre.

En la práctica formal de fútbol, Julio Falcioni paró a Sauro en lugar del suspendido Insaurralde y puso a Ruiz por Cellay


Fue 1-1 entre titulares y suplentes.

Con la vista puesta en el partido contra Tigre, Julio Falcioni dispuso de un entrenamiento formal para delinear el equipo. El DT paró el conjunto titular con tres cambios respecto al equipo que perdió con Lanús. ¿El resultado? Empate 1 a 1 con los suplentes,

El team titular no contó con la presencia de Juan Insaurralde (llegó a la quinta amarilla y debe cumplir una fecha de suspensión). Tampoco formaron parte de los 11 el Pochi Chávez, por una cuestión táctica, ni Cellay, que sufre una fuerte recarga en el isquiotibial derecho y su participación se determinará a último momento. Si el ex Estudiantes no llega, irá el pibe Enzo Ruiz.

De esta manera, los once serían: Lucchetti; Ruiz, Caruzzo, Sauro; Clemente, Somoza, Erviti, Monzón; Riquelme; Mouche y Palermo. El gol de los titulares fue obra de Monzón. Por el lado de los suplentes estuvieron García; Aguirre, Flores, Insaurralde, Aguirre; Chávez, Mazzola, Erbes, Sánchez Miño; Gaona Lugo y Viatri. Erbes fue el encargado de marcar en el partido que duró 47 minutos.

Falcioni sigue en busca del equipo ideal. Mantiene a Palermo entre los 11, le puso un acompañante arriba y sigue juntando a Román con Erviti. ¿Podrá volver a tener semanas tranquilas?

Falcioni destacó que el rendimiento de Erviti, el jugador por el que tanto pidió y aún no rindió, fue de “menos a más”.


Además, explicó que “seguramente seguirá sumando minutos y mejorando”. También tocó el tema Palermo y los cambios de sistema.

Es la debilidad de Julio Falcioni, fue por el jugador que más insistió. Walter Erviti llegó a Boca por el expreso pedido del DT. Aún así, desde su llegada, el volante no pudo desplegar el fútbol que hacía en Banfield. Es por eso que el Emperador bancó a su predilecto en diálogo con radio Mitre, el programa El Show del superclásico.

“Poco a poco se va acomodando. Creo que fue de menos a más. El otro día le pegaron mucho, sabiendo el rival de la importancia de él en el armado de juego. Creo que partido tras partido nos va dando un poquito más de rendimiento físico y futbolístico. Seguramente seguirá sumando minutos y mejores rendimientos”, declaró Falcioni. Asimismo, para que no quedaran dudas, el DT hizo hincapié en que con su llegada, el volante “nos dio muy buena dinámica y sostenimiento en el medio jugando de doble cinco”.

Por otro lado, hizo mención a los comentarios en cuanto al esquema y la forma de jugar. “Nosotros tuvimos algunos partidos en los cuales jugamos de la manera que tiene que jugar Boca y nos fue muy mal. Después le dimos algunas vueltas al sistema y nos fue mejor”, deslizó. Para el partido contra Tigre del próximo domingo, el JC volverá a cambiar el sistema pero explicó el porqué: “Tratamos de busca el equilibrio. Que no se tan abierto ni sea tan cerrado”.

A pesar del resultado, el DT rescató que “contra Lanús, en el primer tiempo, tuvimos la pelota 35 de los 45 minutos, pero nunca logramos ser profundos”. Otro problema de Boca es que sólo tiene cinco goles en nueve fechas. De todas maneras, Falcioni detalló que “de esos cinco, tres, más allá que dos fueron con pelota parada, lo hicimos jugando con un solo punta. Cuando terminamos jugando con cuatro puntas no hicimos ninguno”.

Cuando se nombra en gol, el primer nombre que aparece es el de Martín Palermo. El Titán está pasando por una racha negativa y Falcioni la quiere cortar: “Estamos tratando de buscar la posibilidad de que Martín tenga mayor posibilidad de participación”. En cuanto al cambio que viene repitiendo en los últimos partidos (el ingreso de Viatri por el capitán), manifestó que “el transcursos del partido marca si tenemos que hacer o no alguna variante. Eso Martín lo ha entendido como lo entendieron todos los jugadores”.

Por último, Falcioni contó que se junta a comer con Ameal y detalló que “hablamos un poquito de todo. Hablamos de la institución, del futuro y del presente. Siempre con la mejor expectativa, para que el presidente esté al tanto”. Además, agregó que “para poder tomar cualquier decisión de compra o de venta faltan tres meses y en Boca eso es una eternidad”.

Un 14 de Abril de 1963 Boca golea 5-3 a Olimpia de Paraguay


En lo que fue el primer triunfo en su historia en la Libertadores.
Goles: O. Corbatta, N. Menéndez (2) y P. Valentim (2) (Boca Juniors) – Arambulo, Núñez y Zárate (Olimpia)
Estadio: La Bombonera
Arbitro: Arturo Yamasaki (Perú)

miércoles, 13 de abril de 2011

Monzón la ligó por su cumpleaños número 24 durante la práctica.


Las imágenes son elocuentes y muestran que muy pocos tuvieron piedad a la hora de la manteada y casi lo dejan nocaut.

Boca quedó lejos de la punta del campeonato y hay quienes lo bajan de la pelea, pero en el Xeneize no quieren saber nada de eso y sueñan con poder remontar la diferencia que los aleja de la cima. Para seguir con vida, los de Falcioni no pueden recibir más golpes. Por eso, empezaron a prácticar dándolos ellos.

Es que el cumpleaños número 24 de Luciano Fabián Monzón fue la excusa perfecta para que varios de sus compañeros se descargaran. Primero, fueron Clemente, Román y Javi García los que mojaron y empezaron a pegarle al lateral izquierdo. Después se sumó el resto y ya no hubo defensa que valga para el zurdo.

Ante la mirada de Julio Falcioni, todos rodearon a Monzón y lo golpearon sin que hubiera campana que lo salve, todo con clima de festejo, claro.

Falcioni confirmó a Palermo entre los once, pero empezó entre los titulares y terminó jugando para los suplentes.


Con los que hizo un gol, en el ensayo formal de fútbol. Viatri lo reemplazo y también metió uno. Además, Mouche por Chávez, Sauro por Insaurralde (obligado) y un dibujo 3-4-1-2. Riquelme trabajó con normalidad y Cellay salió con una molestia.

Movete Xeneize movete… Esta vez el grito no parte de las tribunas de la Bombonera. El pedido, el ruego, la orden es de Julio César Falcioni. El técnico movió a Boca, a sus jugadores y al esquema. Pasen, miren y vean lo que fue la práctica en Casa Amarilla.

El primero en moverse fue Riquelme. El Diez, que ayer había hecho trabajo diferenciado por una dolencia en su tobillo derecho, se entrenó con normalidad a la par del grupo y no tendrá problemas en estar el domingo ante Tigre.

Otro movimiento importante fue el del esquema. El 5-3-1-1 dio positivo en el balance, con dos victorias y una derrota. Pero el nivel futbolístico pesó en la consideración del técnico, que cambiará piezas para buscar más variantes en ataque. La táctica sería una suerte de 3-4-1-2: Lucchetti; Cellay, Caruzzo, Sauro (ingresa por el suspendido Insaurralde); Clemente, Somoza, Erviti, Monzón; Riquelme; Mouche (por el Pochi Chávez) y Palermo. Pero la idea de Falcioni aún está en duda: Cellay salió con una molestia en el aductor derecho, por lo que entró Chávez y se pasó a un 4-3-1-2. Uff, cuántos números…

Ya medio mareado, a Boca todavía le quedaba más en esta mañana. Viatri por Palermo, cambio habitual en los últimos tres partidos, esta vez se hizo en la práctica. Martín arrancó entre los titualres y luego lo reemplazó Lucas. Dio resultado: el Titán la metió. Y Viatri no se quedó callado: gritó de penal.

Movete Xeneize movete, esta hinchada está loca, este domingo no podemos perder. Falcioni se juega una de las últimas chances en el torneo. Mueve piezas, mete fichas y apuesta a ganador. ¿Le saldrá la jugada?

Falcioni está enojado por el bajo nivel de varios jugadores y la poca reacción ante Lanús.


Y aunque cuidó las formas, ayer mandó mensajes para los suyos...

Cuentan que la charla técnica del entretiempo frente a Lanús fue de las más duras desde que Falcioni asumió en Boca. 48 horas después, la calentura del técnico no disminuyó. Que su semblante cambie después del domingo dependerá exclusivamente de los jugadores...

JC está enojado por la falta de reacción de los futbolistas y sorprendido por algunos niveles individuales. Luego de repasar el video del partido del domingo se sigue preguntando cómo se repitieron tantas imprecisiones, por qué se produjeron errores de novato y qué pasó para que la fibra del equipo se modificara de manera abismal de un partido a otro, contabilizando a Colón y a Estudiantes como adversarios serios.

Ayer, ese fuego que lleva dentro, el técnico no lo exteriorizó. Y cuidó las formas públicas: “Siempre hay autocrítica. No es que no me gusta hablar, sino que más me gusta actuar en el campo”, dijo. Aunque alguna crítica para los suyos dejó exhibir: “Sabíamos que Lanús nos iba a esperar y salir rápido, especialmente por el lado derecho. Vimos la secuencia del rival, los videos...”, dijo. A buen entendedor...

Si bien no volará cabezas por los aires, ya analiza cambio de esquema ante Tigre, aunque dejó en claro que las razones no pasan por el parado táctico. Y ahí, en definitiva, les pasó otro mensajito a sus jugadores. Para JC, el sistema no da derecho al pataleo.“Acá nadie protestó. Es más, todos se han sentido cómodos con el funcionamiento porque ninguno jugó fuera de su lugar”, comentó.

Como nunca, Falcioni quedó en una situación límite. A ver: si pierde no renunciará (hace tres semanas le dijo a Olé que de Boca lo tendrán que sacar con “un escribano”) y los dirigentes no lo echarán, pero la sexta derrota del torneo (sobre diez partidos) contribuiría, cuanto menos, a una coyuntura demasiado tormentosa para el club más exigente del país. Por eso, el DT intentará que el fuego sagrado del grupo reaparezca el domingo. Además, claro, de saldar la enorme deuda futbolística que ya parece de un moroso incobrable.

Pese a que Ameal le demostró su apoyo en público y en privado, el entrenador es consciente de que la única manera de revertir su imagen es enhebrando una serie interesante de triunfos. Resultadista a ultranza, a veces posiciona sus decisiones en función de qué marque la chapa los domingos. Sin embargo, esta vez el resultado no logró maquillar la deslucida cara que mostró el equipo.

Una costumbre ya en los últimos dos años de sequía, los técnicos más recientes de Boca se decepcionaron con el rendimiento exhibido por el plantel. Desde Ischia a Borghi (Bichi hasta habló de “pánico escénico”), pasando por Basile y Alves, aun considerando que hubo un recambio grande de jugadores, ningún entrenador consiguió que el grupo respondiera y así todos terminaron marchándose por la puerta de atrás.

Falcioni todavía aspira a que la puerta no se le cierre. Y quiere que la imagen que ilustra esta página, el lunes muestre una cara y un gesto de felicidad.

Román se entrena a la par de sus compañeros


En el inicio de una nueva práctica, Román que tenía un traumatismo en el pie derecho ya trabaja junto al grupo. En tanto, Falcioni deberá definir si hará modificaciones. El juvenil Enzo Ruíz sería el reemplazante del suspendido Insaurralde



Una semana difícil deberán afrontar los “Xeneizes”, ya que sumado al mal desempeño del equipo ante Lanús que se convirtió en la quinta derrota en lo que va del Clausura, su principal figura Juan Román Riquelme realizó la última práctica de manera diferenciada, ya que tiene un traumatismo en el pie derecho y se deberá aguardar su evolución durante la semana.



Por otro lado, se confirmó que Sebastián Battaglia será operado el jueves por una tendinitis aquiliana en su tobillo izquierdo. Esto le demandará una recuperación de varios meses y probablemente se pierda el resto de la competencia domestica.



En tanto, Falcioni deberá definir quién será el reemplazante de Juan Manuel Insaurralde, que llegó a la quinta amarilla y deberá cumplir una fecha de suspensión. El juvenil Enzo Ruíz sería quien correría con ventaja para ocupar ese lugar.

Un 13 de abril de 1913, Boca debuta en Primera División


Le gana a Estudiantil Porteño por 4 a 2, Ese día los xeneizes alistaron a: Virtú Bidone; Juan Garibaldi, Lamelas; Martínez, Elena, Valentini; Pedro Calomino, González, Leal, Donato Abbatángelo, Taggino.
En esa importantísima victoria por 4-2 a Estudiantil Porteño,de destacaron, Leal que metió 3 goles y Abbatángelo el restante.

martes, 12 de abril de 2011

Falcioni confirmó que el Loco, que no metió ningún gol en el torneo, jugará otra vez desde el arranque y que Viatri irá al banco.


Otra vez Falcioni desactivó la alarma. Palermo sigue sin meter goles, el Loco sigue bajoneado en sus ultimos partidos en Boca, pero el técnico sigue respaldando al ídolo. Como hizo después del partido contra Colón y con Estudiantes, el entrenador se encargó de remarcar que el 9 seguirá como titular, aunque no lo hizo un lunes sino al día siguiente. Y que Viatri, quien sabe que seguamente en el torneo que viene tendrá más chances, deberá aguardar otra vez en el banco.

"Va a seguir siendo Martín el 9", aseguró en Radio Belgrano. Y dio a entender que entraría Mouche en la delantera, el veloz 7 que había perdido el puesto en manos de un volante, por el cambio de esquema. "Lo vamos a probar este miércoles seguramente. Tanto él como tanto Viatri y García estuvieron en la Selección".

El gran tema, la noticia, es que Palermo es intocable para Falcioni. Llegó a su récord de minutos sin goles en el club y el DT le da la chance, una nueva chance en la Bombonera.

El Xeneize en la mala: después de la derrota ante Lanús, tuvo una práctica sin sus seleccionados y sin Riquelme, que hizo diferenciado en el gimnasio.


Hay dudas para enfrentar a Tigre.

Riquelme es el termómetro de Boca. Contra Colón y Estudiantes, con buenas actuaciones del Diez, al Xeneize le volvió la calma, la tranquilidad y por qué no, la alegría en estos tiempos de tumbos. Contra Lanús estuvo bajo y así también el equipo. Hoy, Román no pudo entrenarse con el resto de los titulares por un traumatismo en el pie derecho. Igual, llega al domingo.

En un principio, lo de Riquelme no preocupa: por un golpe en su tobillo derecho, el crack no quiso arriesgar su físico después del trajín del partido ante Lanús y prefirió entrenarse liviano. Esta vez, lo hizo en el gimnasio, donde realizó diferentes ejercicios y, antes de retirarse de la práctica, habló 20 minutos con Falcioni. Como para dejar tranquilo al DT…

Román no fue la única ausencia en Casa Amarilla: García, Monzón, Chávez, Mouche y Viatri, convocados por Batista a la Selección local, tampoco estuvieron presentes. Mientras que, Colazo y Calvo se entrenaron aparte para recuperarse de sus lesiones. Por el lado del mediocampista, recién en la práctica matutina del día pudo moverse, claro que apartado del resto, ya que se encuentra en plena recuperación de un esguince de tobillo. Trotó varios minutos bajó el mando de uno de los profes sobre uno de los costados de la cancha. Sebastián Battaglia, que también comenzó trotando aparte, terminó realizando estudios que confirmaron que deberá operarse.

¿Novedades para el partido del domingo? Aún no se sabe quién reemplazará a Insaurralde, suspendido por acumulación de amarillas, y dato que seguramente se conocerá en estos días, pero el que tiene chances de ocupar su lugar es el pibe Enzo Ruiz, que cuenta con cierta ventaja. La otra posibilidad es cambiar el esquema. Mouche también podría ingresar, rompiendo con el 5-3-1-1.

Luego de una caída en Lanús que no permitió continuar con un leve repunte, a Boca se le bajan soldados en las prácticas. Si quiere volver a subir, Falcioni necesitará de todos. Y, principalmente, del Diez.

Todo mal Seba, una nueva lesión y otra vez al quirófano: Sebastián será operado del tobillo derecho y se perderá lo que queda del torneo.


El volante se despide del Clausura. Y Falcioni se queda sin opción de cambio en el medio.

Es parte de la historia de Boca, con sus 16 títulos. Pero no puede aportar en el presente, y el futuro también se complica. Sebastián Battaglia volverá a ser operado por una lesión, esta vez por un problema en su tobillo derecho, y probablemente se quede sin jugar en lo que resta del campeonato.

Battaglia arrastraba una lesión en el talón de Aquiles del tobillo derecho y su recuperación venía muy lenta. Los médicos del plantel decidieron que era necesario realizarle unos estudios y, tras llevarlos a cabo esta mañana, se conoció lo peor: el cinco deberá ser operado y no podrá jugar por lo que queda del torneo.

No son nuevos los problemas físicos de Battaglia. En el Apertura del 2010 se perdió las últimas fechas por una tendinitis en la pierna izquierda. Y en enero de ese mismo año tuvo que ser operado por una osteocondritis en la rodilla que lo apartó de las canchas por todo el semestre. Con 30 años y muchas alegrías en el lomo, Sebas también tuvo que sortear malas. Ahora, una piedra más en el camino.

Con Insaurralde suspendido, Falcioni puede mantener el 5-3-1-1, haciendo entrar a un chico, o cambiar el esquema, volviendo a la línea de cuatro.


La tarjeta amarilla que Gabriel Favale le sacó el domingo a Juan Manuel Insaurralde es la quinta en la temporada. Julio César Falcioni, en consecuencia, deberá hacer un cambio seguro. Ahora, la duda que deberá resolver en las prácticas de fútbol de la semana será si mantiene el esquema 5-3-1-1, con el que jugó los últimos tres partidos (dos triunfos y una derrota) y pone a un juvenil por el suspendido Insaurralde (puede ser Enzo Ruiz o incluso Gastón Sauro) o si retoma a la línea de cuatro defensores con Cellay y Caruzzo de marcadores centrales y mete un volante (Colazo) o un delantero más. En caso de inclinarse por un punta, podría ser Pablo Mouche, así Martín Palermo, en caso de ser ratificado nuevamente como titular, no queda tan solo en el ataque. Viatri, el otro nueve, en principio seguiría en el banco. Según los últimos cambios realizados por el entrenador durante los partidos, dificilmente puedan convivir de entrada Lucas y el Loco...

En los últimos tres partidos, en los que sumó un 1-0 a Colón en Santa Fe, un 2-1 a Estudiantes en la Bombonera y un 0-2 con Lanús, el DT se mostró conforme con los cinco defensores, también con el 9 y mantuvo el dibujo como nunca antes en este torneo. Ahora, con una baja sin reemplazante de experiencia, habrá que ver...

Un 12 de Abril de 1994 jugaba su último partido en Boca el "Murciélago" Graciani.


Nacido en Bs As en 1965. Surgido de las inferiores de Atlanta. Debutó en Boca Juniors en un partido 0-1 favorable a Altos H Zapla el 17 de febrero de 1985. Fue el máximo goleador de Boca Junior y en los años '80, formó una terrible dupla con Comas teniendo como compañeros a Tapia y Rinaldi, entre otros, pero no pudo ganar ningún título local. Sí ganó con Boca 2 titulos internacionales: la Supercopa Sudamericana de 1989 y la Recopa de Sudamérica en 1990, derrotando en la final a Nacional de Medellín.Gran definidor, se marchó de Boca en 1991 al lugano suizo, luego a Racing, volvía a Boca para jugar unos pocos partidos. En 1994 pasó a Deportivo Español y en 1995 jugó para Atlético Tucuman. Es Director Técnico pero momentáneamente no dirige ningún club.

lunes, 11 de abril de 2011

A ocho de la punta, con cinco derrotas en el torneo, sin un equipo de memoria, medio gol por partido y Palermo seco.


Así está Boca hoy, con Falcioni que no le encuentra la vuelta. ¿Cuál es la salida? Opiná.

¿Culpa de los dirigentes? ¿De los jugadores? ¿Del técnico? Un poco de cada parte, seguro. Más allá de responsabilidades, la realidad muestra a un Boca a la deriva: a ocho de la punta, con cinco derrotas en el torneo, con Palermo seco. ¿Alguno imaginaba un torneo como éste cuando el equipo se mostraba firme en el verano?

Falcioni nunca encontró el equipo. Después de un verano prometedor, en la primera fecha del torneo puso a tres que no habían jugado en los torneos preparatorios, como Riquelme, Battaglia y Erviti. Fue goleada en contra, después victoria con Racing y ahí arrancó el affaire con Román, que primero quedó afuera por lesión y después por decisión táctica. Primero fue un equipo sin el 10 y enseguida hubo vuelta atrás. También hubo cambio de sistema, de defender con cuatro a hacerlo con tres. Y los triunfos, sólo tres en el torneo, fueron apenas por un gol de diferencia, y sin mostrar un gran nivel.

Está claro que tampoco ayudaron los niveles individuales, como los de Erviti, Palermo (récord en Boca sin meter goles) y Battaglia, entre otros. O Insaurralde y Clemente, atrás. Afuera, tampoco colaboraron los dirigentes, con peleas internas en un año eleccionario, renuncias en la CD y amenazas incumplidas de alejamientos.

¿Puede pelear arriba este equipo deshilachado? La gente, en la encuesta de Olé, es tajante: la mayoría cree que no. Esta Boca, que suma los mismos puntos que con Borghi a esta altura, por ahora no tiene remedio. ¿Debe salir Palermo y dejarle su lugar a Viatri? ¿Debe cambiar el sistema el DT? ¿Hay solución a corto plazo? ¿Cuál es la salida?

Ameal sabe que el resultado no es el esperado y difiere totalmente con la idea del comienzo.


"Nos armamos para pelear el campeonato", explicó. Y contó que las dos victorias al hilo ilusionaron a más de uno. Los pies sobre la tierra...

Jorge Amor Ameal sabe que Boca no es el dream team con el que soñaba la dirigencia, y el hincha, después de esos partidos de verano. El presidente, después de la dura derrota ante Lanús, salió a hablar del mal momento: "El balance no es feliz. Yo no voy a decir que estamos contentos. ¿Se piensan que no estoy triste? A nadie le gusta una situación de este tipo".

Para Ameal, la única salida es esfuerzo y dedicación. "Nos armamos para salir campeones. Nosotros trajimos los mejores jugadores. Este es un club grande, importante, que necesita un periodo de adaptación. No me gustó el rendimiento. Pero soy un convencido de que esto sale con trabajo porque plantel tenemos", tiró en diálogo con Del Plata.

Por otra parte, recalcó que Boca todavía no se baja. "El análisis hay que hacerlo cuando termine el campeonato. Hubo un torneo que era exactamente el mismo y salimos campeones. Encontramos al equipo, el esquema funciona y ganamos dos partidos importantes. Cuando terminó el partido con Estudiantes, todos pensábamos: 'nos metimos en la discusión del campeonato'", comentó.

Por último, añadió: "Nuestro técnico sabe que tiene todo el apoyo. Falcioni es un hombre de principios, lo vi tan amargado como nosotros. El hincha de Boca está triste y preocupado. No se puede decir otra cosa. Ayer vi un equipo como Lanús que se abroqueló atrás. Boca intentó ganar el partido, pero el resultado no se dio. Ojo, creo que Lanús jugó mejor en el segundo tiempo".

Con o sin Riquelme, Boca no supo jugar. La mala tarde del 10 desnudó las falencias del resto.


Falcioni es un DT defensivo de un equipo que defiende mal y ataca mal...

Es la derrota más dura. Porque si bien el rival hizo poco por ganar, este Boca de Falcioni perdió contra sí mismo. Y esas caídas, las que son generadas por las propias inseguridades, son las que dejan heridas...

El 0-2 es exagerado. Lanús esperó más de lo que avanzó a pesar de ser el local y fue efectivo al aprovechar virtudes suyas (técnica de Valeri, capacidad de Hoyos) y defectos ajenos (mal paso de Cellay en el primer gol e incapacidad de Insaurralde en el segundo). Con o sin Riquelme, Boca no supo jugar. La mala tarde del 10, provocada por sus imprecisiones y también por la falta de opciones que les dieron sus compañeros, condenó al equipo. Y eso no es sólo responsabilidad del jugador más influyente del fútbol argentino. Ahí entra a tallar la mano del entrenador y, sobre todo, el coraje de sus compañeros.

Esta vez, el técnico soltó unos metros más adelante a Chávez y a Erviti. A diferencia de lo que había pasado con Colón y Estudiantes, Riquelme no fue mediapunta, sino más bien enganche y, por momentos, hasta doble cinco cerca de Somoza. El retroceso de Román les dio alas a los otros dos “creativos”. No era una mala idea. Chávez y Erviti intercambiaban funciones y con sus diagonales abrían a Pizarro y a Pelletieri, los dos cinco de Lanús. Y aunque Riquelme quedaba algo más lejos del área, insinuaban un movimiento interesante. Claro que no contaban con la falta de astucia de Erviti, quien jugó casi de espaldas y además de su falta de claridad evidenció fragilidad física en el contacto. Pochi fue pura voluntad, aunque de tanto intentar perdió mucho... Ese plan necesitaba de precisión y, también, de laterales que fueran con criterio. Eso, criterio, es lo que les faltó a Clemente y a Monzón. Las espaldas de Rodríguez fueron explotadas por Regueiro al punto de obligarlo a Cellay a jugar casi de cuatro. Monzón, siendo lateral, tocó casi siempre para atrás: jamás desbordó ni rompió líneas (encima Schurrer le puso a Ledesma para taparlo). Con los caminos cercados, Boca careció de profundidad más allá de sus intentos geométricos.

Pese a su poca audacia, Lanús había desnudado lunares defensivos de Boca. La traumática decisión de Caruzzo de meter la cola en su propia área, además de enviar un mensaje negativo para el resto, produce un agujero enorme detrás de Somoza, quien estuvo muy solo a pesar de estar rodeado de volantes...

Ser equilibrado, en este caso, es un eufemismo: Falcioni es un técnico defensivo. Y su Boca, en su disposición táctica y en la elección de los ejecutores, lo confirman. Ahora, ¿es malo ser defensivo? ¿Es una descalificación? De ninguna manera, es una elección válida. El problema es cuando el equipo de un técnico defensivo defiende mal. Y si bien este Boca mejoró y hasta, como dice su DT, bloqueó a adversarios como Racing, Colón y Estudiantes, defiende mal. Consecuencia de este esquema cauteloso, ataca poco y mal. Cinco derrotas de nueve partidos. Los entrenadores “equlibrados” también suelen ser resultadistas. Todo dicho...

Se rompió el espejo y la cábalas no funcionaron


Falcioni repitió los cambios que le habían dado resultado casi hasta con precisión de minutos, pero no funcionaron: “Faltó agresividad”.

Los minutos en los que se prepararon para entrar Viatri y Mouche fueron casi los mismos que una semana atrás ante Estudiantes. Agarraron la camiseta, se pararon al lado del campo y, si las jugadas no se hubieran demorado, habrían ingresado igual. La intención estuvo. El resultado, lamentablemente para Boca y para Falcioni, no fue el mismo. No hubo centro de uno y gol del otro.

Ya en la conferencia de prensa del viernes, cuando apareció con una chomba igual a las de semanas anteriores, le preguntaron si era por cábala y contestó con una sonrisa. El domingo pasado en la Bombonera, también, las cámaras lo agarraron sentándose a las corridas en el banco ante cada jugada de peligro del rival. Y los cambios que volvió a hacer ayer ante Lanús pareció que tenían mucho de cábala, principalmente por la coincidencia en los minutos y porque reemplazó a los mismos jugadores cuando estaba para salir más Erviti que Chávez y con un rival cerrado hasta se podría haber pensando en un final con Palermo y Viatri juntos...

“Nos faltó agresividad y profundidad para lastimar al adversario. Tuvimos un primer tiempo bueno, parejo, nos faltó ese picante en los últimos 20 metros. Picante en el sentido de aceleración, pelota profunda, desborde. Por eso el ingreso de Viatri y Mouche, para seguir yendo en busca del partido y tener un hombre referente por Martín y otro para romper”, explicó Falcioni. Y enseguida, en un análisis superficial, completó: “Nosotros buscamos, pero erramos muchos pases. Así y todo, tuvimos opciones en el primer tiempo, con Chávez y Riquelme. Lanús no nos preocupó nunca. En el segundo fue más abierto y, más allá de un cabezazo, no había alternativas de peligro. Y en una salida rápida se les dio la diferencia”.

Las cábalas, esta vez, no funcionaron...

Un 11 de Abril de 1993 Boca le ganaba a River 2 a 0. ( Recordalo en video)


En la cancha de River, Boca le gana 2 a 0 con los goles del Manteca Martinez y el Beto Acosta,el equpuipo era dirigido por el maestro Tabarez.

Falcioni, mientras se jugaba el partido de Boca, miró otro evidentemente


Falcioni, afirmó que Lanús no fue más que su equipo, y que lejos de haber un ganador, el partido "estaba para un cero a cero".

"Lanús no fue superior. Yo creo que estaba para un cero a cero, fue un partido raro y se definió cuando ninguno de los dos llegaba", señaló Falcioni.


Posteriormente, el técnico agregó que "Boca en el primer tiempo controló el juego. En el final se encontraron con dos goles, uno en una jugada muy rápida y en otro de pelota parada. Sabíamos que en pelota parada eran peligrosos, y no lo pudimos controlar".



Por último, Falcioni se refirió a la lucha por el campeonato, y a pesar de lo poco que su equipo mostró hasta ahora, expresó que "estamos a ocho puntos. Seguramente hubiera sido mejor ganar este partido. Ahora le tenemos que ganar a Tigre, para seguir sumando".

domingo, 10 de abril de 2011

El regreso de los muertos vivivientes


"El Xeneize" cayó 2 a 0 ante "El Granate", y se alejó de la cima. Valeri y Hoyos, los autores de los goles para el conjunto del Sur, que logró su segundo triunfo consecutivo de local y se prende en la lucha por el título. Por su parte, Palermo sigue sin convetir, pero aún no llegó a su peor racha sin goles. El árbitro fue Gabriel Favale



Boca visitaba a Lanús con la ilusión de seguir con la buena racha, sumar su tercer triunfo consecutivo y así prenderse en la cima de la tabla. Sin embargo, nada de lo que fueron a buscar pudieron conseguir: Martín Palermo no pudo cortar su sequía de goles, Juan Román Riquelme no logró aparecer como el conductor del equipo y los tres puntos se quedaron en manos del local. En una ráfaga de seis minutos, “El Granate” encontró la profundidad que le faltó durante casi todo el partido y con goles de Diego Valeri y Santiago Hoyos se impuso por 2 a 0 y quedó a cuatro puntos del líder River, mientras que “El Xeneize” quedó a ocho. Se jugó en el estadio Néstor Díaz Pérez, con el arbitraje de Gabriel Favale.



Apenas iniciado el encuentro, ambos equipos tuvieron sus respectivas llegadas al área rival, pero a los dos les faltó el toque final que lograra lastimar al rival. Sin embargo, poco se puedo ver de esas primeras insinuaciones, ya que el encuentro se tornó aburrido y con escasas emociones. Cristian Chávez era de lo más incisivo en Boca, mientras que Riquelme no lograba conducir al equipo. De esta manera, se fueron al descanso con un justificado 0 a 0.



Los primeros minutos del complemento fueron más de lo mismo, ya que ninguno conseguía la claridad que pudiera desnivelar el marcador. Y cuando parecía que ya ninguno modificaría el resultado final, en una ráfaga de seis minutos, Lanús liquidó el encuentro y le proporcionó a Boca su quinta derrota del Clausura. A los 34 minutos apareció Diego Valeri, que tras un desborde de Silvio Romero (que había ingresado diez minutos antes), remató cruzado y marcó el primer gol del “Granate”. Luego a cinco minutos del final, Santiago Hoyos conectó de cabeza un tiro de esquina y selló así la segunda victoria consecutiva en condición de local de los dirigidos por Gabriel Schurrer.



La figura del encuentro fue Diego Valeri, por ser de lo más claro del partido y en el momento justo abrió el marcador para los del Sur y les dio la tranquilidad necesaria para poder liquidar el encuentro sobre el final del mismo.

Boca va por su tercer triunfo consecutivo ante Lanús


Con un Palermo que necesita romper la racha sin goles y nuevamente con el esquema 3-5-1-1, el cual le viene dando resultados, “El Xeneize”, que está a ocho del líder, se presentará como visitante ante “El Granate”, que no tendrá a Mauro Camoranesi. Desde las 16, con arbitraje de Gabriel Favale



El “mundo Boca” transita por días tranquilos, lejos de las polémicas y peleas que parecían ser el centro de las noticias en el arranque del campeonato. Por eso, Julio César Falcioni intentará guiar a su equipo hacia el tercer triunfo al hilo, para así escalar puestos y soñar con pelear el campeonato. Cabe destacar que en la última fecha, los de La Ribera vencieron como locales a Estudiantes por 2 a 1. Por su parte, Lanús empató la semana pasada ante All Boys sin goles y necesita ganar para no perderle pisada a los de arriba, además de perseguir el objetivo de clasificar a la Copa Sudamericana.


En Boca habrá una sola variante. La misma será en la defensa y tendrá el ingreso de Fabián Monzón por José María Calvo, quien sufrió un esguince en su rodilla derecha. De esta manera, Falcioni dejó en claro que Martín Palermo continuará en la ofensiva, a pesar de que la semana pasada superó su peor marca en Boca (748 minutos sin goles). Sin embargo, el “Titán” tendrá solamente 22 minutos para no superar la peor de su carrera, que data de su época en Estudiantes, con 770 minutos.


El local tendrá tres modificaciones, las cuales serán: Mauro Camoranesi se encuentra lesionado y en su lugar estará Guido Pizarro; Mario Regueiro cumplió con la fecha de suspensión y ocupará su puesto en el mediocampo por César Carranza; en tanto, la delantera contará con la presencia del joven Leandro Díaz, quien sustituirá a Gonzalo Castillejos, quien saldrá del once inicial por bajo rendimiento.


Probables formaciones


Lanús: Mauricio Caranta; Paolo Goltz, Santiago Hoyos, Carlos Izquierdoz, Luciano Balbi; Eduardo Ledesma, Agustín Pelletieri, Guido Pizarro, Diego Valeri; Mario Regueiro y Leandro Díaz. DT: Gabriel Schurrer.


Boca: Cristian Lucchetti; Christian Cellay, Matías Caruzzo, Juan Manuel Insaurralde; Clemente Rodríguez, Leandro Somoza, Walter Erviti, Fabián Monzón, Cristian Chávez; Juan Román Riquelme; y Martín Palermo. DT: Julio César Falcioni.


Cancha: Néstor Díaz Pérez


Árbitro: Gabriel Favale


Hora: 16.00

Somoza habla del momento de Boca


El volante de Boca Juniors habló sobre el presente del equipo, que actualmente viene en levantada y aspira a pelear el Torneo Clausura. Además, el mediocampista opinó de la falta de gol de Martín Palermo y la importancia de Juan Román Riquelme en el equipo



Con las dos victorias consecutivas, ¿volvió la tranquilidad a Boca?
En el triunfo ante Estudiantes ratificamos lo hecho en Santa Fe, porque demostramos nuevamente solidez, orden y le ganamos a uno de los mejores equipos del país. Además, le ganamos bien.


¿Por qué después de un gran torneo de verano, les costó recuperar terreno?
Tuvimos un verano increíble, en el que nos ponían rivales en fila y los despachábamos. Con Godoy Cruz no merecimos perder y después, como pasa en cualquier equipo, cuando llegan refuerzos y encima perdés, te come la ansiedad, te desesperás. Y eso fue lo que nos pasó.


En lo personal, ¿por qué vos no fuiste el de Vélez?
Arranqué mal, me costó acomodarme y cuando no estás bien de la cabeza, no tenés tranquilidad. En esos momentos te sale todo mal, ya que querés dar un pase y no sale, o intentás patear al arco y la mandás a la tribuna. Todo es complicado.


¿Perdieron demasiado terreno en el campeonato o están más vivos que nunca?
Estamos más vivos que nunca. El plantel recuperó la confianza y empezamos a demostrar que somos un verdadero equipo. Además, Román está volviendo a ser el que todos esperábamos


¿Les preocupa la sequía goleadora de Martín Palermo?
La verdad que no nos preocupa, porque él ante todo es un espejo para nosotros. Es más, te lo voy a reflejar en una anécdota: en Tandil, el primero que estaba en el desayuno era Martín. Por eso, cuando uno se fija que un ídolo de la institución hace eso, todos tenemos que seguirlo a él y tomar su ejemplo. En cuanto a los goles, estoy seguro que contra Lanús empieza a encender la pólvora.

Playfutbol.com

Un 10 de Abril de 1981, Boca le ganaba a River 3 a 0 con golazo de Diego ( recordalo en video aqui)


En una noche de lluvia y barro en la Bombonera, Diego Maradona hizo su debut en el Superclásico dejando su marca con un gol inolvidable, primero durmiendo la pelota con el empeine y luego desparramando al Pato Fillol en el área chica antes de colocar la pelota contra un palo. Miguel Brindisi agregó dos goles para un marcador final de 3-0 rumbo a lo que sería la consagración de Boca en el Metropolitano de 1981. Fue el último Superclásico de Labruna.