Jugadores que vuelve al club en Junio

No terminó el Clausura pero en las oficinas de la Bombonera ya se está pensando bien la lista de los jugadores que Julio César Falcioni tendrá a su disposición tras el termino de su préstamo en distintos clubes. Varios son los nombres pero sólo dos contarían con el visto bueno del entrenador: el defensor Facundo Roncaglia, que está en Estudiantes, y el arquero Josué Ayala, quien se encuentra en Independiente Rivadavia de Mendoza (Nacional B).

La lista de los jugadores a los que se le vencen los préstamos y deben volver al club es la siguiente:

Facundo Roncaglia
Leandro Gracián
Damián Díaz
Lucas Pratto
Nicolás Blandi
Leandro Díaz
Sebastián Vidal
Jonathan Philippe
Josué Ayala
Sebastián Battaglia
Carlos Fondacaro
Jesús Méndez
David Drocco
Julio Barroso

roncaglia se queda, josue ayala

El jugador “xeneize” admitió que no le cayeron nada bien los rumores sobre la llegada del goleador de Vélez.

Además, reconoció que le molesta no tener tantos minutos pero que entiende la situación de Palermo: “Sé que es un momento complicado que le toca vivir, si me pasara a mí, no sabría qué hacer”



En diálogo con Fox Sports en Radio Del Plata, Lucas Viatri expresó que no le gustó que se haya nombrado a Santiago Silva como posible refuerzo de Boca. “Me fastidió cuando se dijo lo de Silva. Igualmente dije que como pelee el puesto con Palermo lo pelearía con quien venga”.


Respecto a la poca regularidad que tiene en el primer equipo, el delantero “xeneize” no ocultó su malestar: “Uno cuando no juega le molesta”. Pese a esta situación, Viatri se mostró con ganas de seguir peleándola: “Amo esta camiseta y soy hincha desde que tengo uso de razón, me gustaría quedarme toda la vida”.


Pensando en los encuentro que quedan dijo: “Estoy esperando para poder jugar, se que quedan ocho partidos, ojalá pueda demostrar y pueda quedarme en el club. Estoy muy cómodo en el club del que soy hincha”.


También habló de la situación de Palermo y reconoció que es “un momento complicado que le toca vivir”, entendiendo que “cuando me toque a mí no sé que voy a hacer”. Respecto al reencuentro del goleador con el gol, agregó: “Esperábamos el gol. Cuando lo logró nos pusimos contentos y fue un alivio para todos”.

Román , una vez más, practicó y jugará el lunes con una faja sobre el abdomen.

Será uno de los 20 concentrados de Falcioni. Gaona Lugo lo hará por primera vez.

Con el equipo definido (aunque no oficializado por el entrenador), la jornada en Casa Amarilla no deparó demasiadas sorpresas en el plantel de Boca. Una vez más se vio en acción, en los trabajos recreativos, a Juan Román Riquelme con la faja que también lo acompañará el lunes desde las 20.20 horas ante Independiente. Se trata de una cinta sobre su abdomen que lo acompaña desde el juego ante Tigre en La Bombonera.

Además, vale decir que entre los 20 elegidos por Falcioni para concentrarse desde las 23 del sábado, estará por primera vez el paraguayo Orlando Gaona Lugo.

¿La lista completa? Cristian Lucchetti, Javier Garcia, Matías Caruzzo, Luciano Monzon, Leandro Marin, Enzo Ruiz, Clemente Rodriguez, Juan Insaurralde, Walter Erviti, Jonathan Mazzola, Leandro Somoza, Juan Sanchez Miño, Cristian Chavez, Nicolás Colazo, Juan Roman Riquelme, Martín Palermo, Lucas Viatri, Pablo Mouche, Ricardo Noir y Orlando Gaona Lugo.

El plantel volverá a los entrenamientos el domingo desde las 10.30, a puertas cerradas en Casa Amarilla.

El probable 4-3-1-2 para enfrentar al Rojo sería Lucchetti; Clemente, Caruzzo, Insaurralde y Monzón; Chávez, Somoza, Colazo; Riquelme; Mouche y Palermo.

Luciano Monzón fue vendido al Niza de Francia en una cifra millonaria.

A pesar del mal momento que está atravesando el club, la vidriera sigue vigente.

La noticia sorprende. Boca volvió a concretar una venta de esas que son cada vez más esporádicas en el fútbol argentino: europea y millonaria. Luciano Fabián Monzón se irá al Niza de Francia en junio a cambio de 2.300.000 euros, impactante por la cifra y el nivel actual del defensor. ¿Por qué la inversión en un jugador de pobre pasar en el Clausura en un equipo que navega en la mediocridad? Las explicaciones deben surgir a partir de lo que significa vestir la camiseta xeneize en el Viejo Continente y la esperanza de que el diamante en bruto pueda brillar como al comienzo...

Las características tentadoras de Monzón desde que estaba en Inferiores, con muy buen remate de media distancia e interesantes proyecciones en ataque, generaron expectativas en muchos técnicos que apostaron por él para darle minutos en cancha. No sólo sucedió en Boca, de hecho fue campeón de los Juegos Olímpicos 2008 disputados en Pekín, con aquella Selección dirigida por Sergio Batista, el mismo DT que lo ha convocado para entrenarse con la formación local. Esas características también conmovieron a Falcioni, que en su llegada a Boca pidió expresamente que se quedara en el club, la primera vez que el conjunto francés vino a buscarlo, a fines del año pasado. “La diferencia es que esta vez el club lo liberó. En diciembre, en principio era un préstamo y después se intentó una transferencia, pero Boca no quería”, aseguró su representante Marcelo Trapasso. Sin embargo, el jugador de 23 años nunca terminó de consolidar todo aquello que generaba y en varias ocasiones quedaron expuestas algunas fragilidades, sobre todo defensivas, en su juego.

Un 30 de Abril de 1975 Roberto Rogel jugó su último partido en Boca

Fue en un triufo contra Independiente por 2 a 0 con dos goles de Abel Alves.

Un poco de historia..

Llega el momento de la renovación. Boca deposita su mirada en el equipo titular de Gimnasia y Esgrima La Plata. Roberto Domingo Rogel y Mario Pardo son los que ingresan a la institución de la ribera. De los dos, el que mejor fortuna tendría, sería el zaguero mendocino, que durante siete años en forma consecutiva, fue dueño exclusivo de la número seis. Desde la primera fecha de 1968 hasta la primera rueda de 1975, cuando fue transferido al fútbol mexicano...
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Junto con Julio Meléndez Calderón forma una zaga difícil de superar. Habilidad y técnica eran las condiciones que sobresalían en el moreno; fuerza y seguridad eran las virtudes que poseía Rogel. El hombre de punta rival era presa de ese hombre que le luchaba la posición. Muchas veces escuchó los insultos de la tribuna contraria, condenándolo como mal intencionado. Nadie mejor que Rogel para aclarar esta situación. "Nunca traté de estropear a un jugador; más que eso a un hombre que está en lo mismo que yo. Los insultos no los escucho. Yo juego siempre a ganar y pongo todo lo que tengo para hacerlo". No le gustaba perder en ningún lado, ni siquiera en los juegos que se realizaban para pasar el rato en la intimidad de la concentración.sin dudas el mejor en En la cancha ponía el mismo fervor que en los momentos de distracción.

Un tipo ganador. Un hombre importante para cualquier equipo que con aspiraciones al título necesitara del temperamento para alcanzar la conquista. No fue un buen año el primero que militó en Boca, aunque al final de año el equipo repuntara y estuviera cerca de entrar en la definición del campeonato. En la temporada siguiente el mejoramiento que se le había evidenciado en la

temporada anterior se traduce en un equipo de ambiciones de la mano de Alfredo Distéfano. El Metropolitano lo deja como uno de los mejores equipos y quedan al margen de las instancias finales por un gol menos a favor. En el Nacional llega la confirmación del repunte xeneize y también de la importancia de Rogel. En un conjunto ofensivo por naturaleza, la figura de Rogel cobra importancia en esa formación que marcó claras y contundentes diferencias y con justicia se llevó el título. Fue su segunda estrella en Boca Juniors.

La primera había sido la Copa Argentina, cuando superó a Atlanta en las instancias finales. Al año siguiente una nueva estrella, con el mismo estilo y con escasas modificaciones en la base del equipo. En la final con Rosario Central, una lesión lo postergó de la posibilidad de dar una nueva vuelta olímpica en el Monumental. En el '71 el conjunto declina y en la Copa Libertadores se produce aquella noche negra ante el Sporting Cristal. Fue uno de los protagonistas de ese escándalo de proporciones. Siguió en Boca hasta 1975. Se fue Meléndez y a su lado estuvieron Roberto Mouzo y Claudio Casares. Cuando retorna Nicolau de Grecia, pasan a formar una zaga donde no caben las exquisiteces, pero sí de seguridad. Parte vital de aquel gran equipo de 1974, que se quedó con las manos vacías, ingresó ese año a la selección argentina. César Luis Menotti, que por entonces iniciaba su trabajo al frente del combinado, lo designa para el partido contra España. El gol argentino es mérito de un frentazo suyo que deja sin chance al golero europeo. Al año siguiente, a mitad de la temporada, cierra su actuación en la ribera. Dos son las causas que aceleran su final. Una, cuando a comienzos de año, junto a otros compañeros, protestan por la firma de un contrato y no juegan los primeros encuentros del Metropolitano. Y la segunda cuando protagoniza un encontronazo con Morete, centrodelantero de River Plate y a pesar de no ser expulsado es duramente castigado por el tribunal de disciplina. Ya no volvió a integrar la formación titular y cuando estaba en condiciones de actuar, fue relegado al banco de suplentes. Ya había llegado su final.

Sebastián Battaglia confesó que jamás pensó en dejar los botines.

Su lesión en el tobillo aún lo tiene a maltraer, pero el ídolo Xeneize no se rinde, y aclara: “El día que sienta que no pueda más lo haré, pero mientras siga disfrutando de lo que hago no lo voy ni a pensar”. Como su técnico, tampoco baja a Boca de la pelea.

Sebastián Battaglia es otro de los soldados caídos que tiene Falcioni en este Boca. El mediocampista dejó de ser ficha fija en el tablero del DT tras el 0-2 ante Olimpo, luego de sufrir una lesión en su tobillo izquierdo que lo marginó de las canchas. Sólo jugó cinco partidos en el actual torneo.

Fue intervenido quirúrgicamente días atrás (“tuve un desgastamiento del cartílago y se me desprendió un pedacito, eso hacía que se me hinche el tobillo y me lo tuvieron que sacar para estar mejor”), y aún no tiene una fecha estimada de regreso. Pero sí sabe que no será poco tiempo. “Mi vuelta se irá viendo mientras se vaya avanzando. Tengo un plazo de tres meses, pero hay que ver cómo avanza todo, no es lo mismo que una rodilla así que ojalá vaya todo bien y pueda acortar los tiempos”, contó en diálogo con ESPN Rivadavia.

La idea del retiro en pleno parate nunca se le cruzó por la cabeza. “Jamás pensé en colgar los botines, no quiero que esto me gane. El día que sienta que no pueda más lo haré, mientras siga disfrutando de lo que hago no lo voy ni a pensar”, comentó el volante, y agregó que “sé que me han tocado muchas y por momentos te cansa, pero igual estoy tranquilo y creo que lo importante es hacer lo mejor porsible los ejercicios y lo que me vaya diciendo el doctor. Todas las rehabilitaciones desgastan, pero la idea es siempre recuperarse de la mejor manera”.

También analizó la actualidad del torneo local. “Yo creo que como está dado todo hoy, tan raro y tan parejo, cualquier equipo puede perder puntos en cualquier momento”. No bajó a su equipo de la pelea del campeonato, y aclaró: “Boca debería mentalizarse en ganar todos los partidos y sino en sumar y que los demás pierdan, porque está todo muy raro. Puede pasar cualquier cosa, así que lo importante es sumar de a 3 de locales, donde no nos pudimos hacer fuertes y creo que con 37 o 38 puntos, se puede ser campeón hoy”.

Para él, Boca sigue con vida en el Clausura. Su DT también mantiene la fe, y las chances matemáticas los ilusionan…

"Estamos en la mitad del campeonato y el puntero tiene menos del 50% de proyección de los puntos", dijo Falcioni, todavía anhela con dar la vuelta.

En la práctica de fútbol, una vez más Riquelme adentro y Erviti afuera.

Falcioni tiene fama de tipo testarudo. Convecido de sus ideas, que no negocia. Con esa seguridad, en conferencia de prensa, volvió a manifestar que no se baja de la lucha por el campeonato. Aunque, claro, aclaró que hay que ir partido tras partido.

“Boca tuvo un partido de excelencia ante Huracán, creando muchas situaciones y tres goles, que en fútbol de hoy es una buena diferencia. Esperemos tener la misma contundencia, que marquemos esa diferencia con el rival. Eso sería lo ideal”, se entusiasmó Julio César.

Y así como entresemana había dicho que “si ganamos dos partidos nos prendemos…”, el entrenador Xeneize volvió a deslizar que Boca puede pelear el campeonato. “No podemos pensar en Gimnasia, tenemos que pensar en Independiente. Faltan ocho fechas donde la realidad de la división de puntos que ha sucedido en este torneo no sucedió en campeonatos anteriores, y eso hace que todos tengamos posibilidades. Si algún equipo se hubiera despegado en los puntos, muchos de los que creemos que podemos llegar, sería más difícil”, explica su teoría el DT.

“Estamos en mitad de campeonato y el puntero tiene 21 puntos. Osea, que tiene menos del 50 % de proyección de los puntos. Entonces, si el torneo pasado podías ser campeón con 40 ó 41 puntos, hoy a lo mejor con 38 ó 37…”, terminó su conferencia con un tono muy optimista. Lo cierto, es que Boca para llegar a esa suma debería ganar todos los partidos. ¿Para vos puede hacerlo?

JC NO DEJO TEMA SIN TOCAR

¿Qué piensa del cambio de día del partido? “El cambio no pasa por el día libre, nuestra postura era porque tratamos de tener la programación del trabajo en cuanto a exigencia, elevar y bajar la intensidad, con anterioridad. La mayoría trabaja así. Teníamos previsto darle libre el fin de semana al plantel pero tuvimos que ir variando en la semana el trabajo para que sea medido y progresivo. Desde ahí esa incomodidad…”

¿Qué recupera Boca con la vuelta de Riquelme? “Es un jugador diferente. Esperemos que podamos conseguir un buen juego y tener un buen desarrollo de partido. Vamos a trabajar mañana y el domingo y ahí lo vamos a confirmar. Nunca hacemos demasiados cambios de lo que se trabaja durante la semana. Si se jugaba el viernes, hubiera llegado igual”

¿Por qué sale Erviti del equipo titular? “Cuando uno toma una determinación, a veces uno la toma en búsqueda de lo que pretende para cada partido. Hemos buscado y seguimos buscando el mejor funcionamiento del equipo. A veces se da con determinados jugadores y a veces con otros. A lo mejor es culpa nuestra por el formato de juego. Por eso buscamos un mejor funcionamiento”

¿Qué piensa de la amarilla que le quitaron a Teófilo Gutiérrez? “Mi opinión es que de ahora en mas, aunque nos autoricen o no, vamos a tener derecho a reclamar un montón de cosas. Fue una apreciación y si con esto le vamos a sacar la interpretación al árbitro, no van a tener más esa posibilidad y ese derecho. Se comparan dos situaciones que son diferentes. En el caso de Galmarini era si la tocó o no, no hay término medio… Espero que no tengamos inconvenientes. No nos hemos visto perjudicado, doy mi opinión como parte activa del fútbol”

Erviti fue autocrítico (“nos cuesta dar tres pases seguidos”) y admite que no juega como en Banfield.

En alguna medida, no estaban equivocados quienes decían que Walter Erviti llegaba para reemplazar a Juan Román Riquelme. Aunque él mismo lo considere una locura. La realidad era que el enganche de Boca venía de una ausencia prolongada y nadie podía asegurar, al momento que llegó Falcioni, cómo respondería a una seguidilla de partidos. Por eso el técnico luchó tanto para que le trajeran a Walter: para que él se encargara de generar el fútbol, como lo había hecho en el Sur, ante la eventual ausencia del 10. “Si la gente o el periodismo están esperando que yo haga lo de Román, estamos en problemas. Parece que no me hubieran visto jugar nunca”, reflexionó ayer el volante por La Red. Y completó su mirada: “Hoy estoy para que a Boca no le hagan goles, para tratar de que sea un equipo ordenado y bien parado. Esa es mi función”.

Sin embargo, Erviti no negó que la función que cumplía en Banfield era otra, más cercana a la del imaginario de los que lo miran ahora en Boca: “Allá, yo tenía que posicionarme, quitar y armar juego. Ahora, en cambio, tengo que darle la pelota a Román para que él organice y conduzca. Y eso simplifica mi trabajo”. ¿Si la presencia del 10 le quita espontaneidad? Erviti no lo afirma, pero... “Cuando hay un jugador así, diferente, tiene que estar en la cancha y la pelota debe pasar por él. Los demás estamos para mostrarnos, para asociarnos y colaborar, lo tengo claro desde que llegué”.

-Algunos piensan que el problema es que ustedes le pasan la pelota cuadrada a Riquelme. ¿Es así? -Es lo que se ve en la cancha. Yo no puedo decir que somos el Manchester si nos ha costado dar tres o cuatro pases seguidos. Lamentablemente es así. Estamos tratando de mejorar para que los de arriba puedan jugar más tranquilos. Si no, se les hace difícil cuando el equipo va perdiendo: el rival se cierra atrás y todo cuesta más. Más allá del esquema, de si juega con tres o con cuatro atrás, con o sin enganche, Boca debe parecerse al del último domingo. No hay margen de error.

Un 29 de Abril de 1926 Nacía Eduardo Ricagni.

Surgido de las divisiones inferiores de Platense. Debutó en primera división en dicho en 1944. En ese equipo marcó 22 goles en 35 partidos. En 1947, luego de que varios equipos se fijaran en él, Boca Juniors lo fichó para su equipo. En el club "Xeneize" marcó 23 goles en 52 encuentros y salió campeón de la Copa Carlos Ibarguren 1944, aunque se disputó en 1947. Continuó su carrera futbolística en Chacarita Juniors, club que obtuvo su pase en 1949. Ahí marcó 39 goles en 78 partidos. En 1951 tuvo su primera experiencia en el fútbol extranjero, jugando para Montevideo Wanderers de Uruguay, donde disputó 10 partidos y metió 7 goles. En 1952 volvió a Argentina para jugar en Huracán. En ese club jugó 41 partidos, marcó 36 goles y se convirtió en goleador del Campeonato de Primera División con 28 tantos. Su alto nivel mostrado en el "Globo" despertó el interés de la Juventus de Italia, club que lo incorporó a sus filas en 1953. En dicho club disputó 24 partidos y marcó 17 goles. En 1954 pasó a jugar al AC Milan, donde estuvó hasta 1956 y marcó 11 goles en 43 partidos. Salió campeón de la Serie A en dos ocasiones (1954-55 y 1956-57). Ese mismo año pasó al Torino FC donde marcó 9 goles en 45 partidos disputados. Finalmente pasó al Calcio Catania, en 1958, donde jugó 28 partidos y metió 2 goles, retirándose del fútbol profesional.

"Román debe manejar el equipo, su lugar es como enganche". El lunes sería suplente contra Independiente.

Desde que llegó a Boca, Erviti intenta encontrar su lugar en el equipo, al mismo tiempo que el nivel que mostró en Banfield y que lo catapultó a Boca. En La Red, el jugador analizó el momento del equipo y, entre otras cosas, elogió a Riquelme, quien volverá ante Independiente luego de su desgarro abdominal. Aseguró que Román tiene que estar sí o sí y como enganche porque impone "respeto sobre compañeros y rivales". Y que su trabajo en el equipo es "tratar de que a Boca no le hagan goles y recuperar la pelota para dársela a él". "El que tiene que manejar al equipo y el juego es Riquelme. El tiene que ser enganche, ésa es su posición", explicó el volante, que el lunes a las 20.20 estaría sentado en el banco de suplentes.

En el último ensayo futbolístico del equipo, el volante ocupó un lugar entre los suplentes, algo que se repetiría ante Independiente. Pero, por las ganas que tiene de jugar, admite que esta dispuesto a jugar en cualquier posición: "El técnico tiene variantes y no debe estar conforme con mi rendimiento, pero respeto sí tengo que ir al banco", dijo.

Gaona Lugo, gran aparición juvenil del 2010, volvió bien de la lesión y ahora quiere cumplir su sueño.

“Triunfar con esta camiseta”, dice.Pude volver a jugar y eso me hace muy feliz. Pasé momentos complicados, pero ya está… Ahora hay que seguir sumando minutos, ganar en confianza y recuperar el tiempo perdido”. A Orlando Gaona Lugo le volvió la sonrisa. Atrás quedaron casi siete meses duros, plagados de inseguridades y a los que les puso una enorme voluntad para rehabilitarse a conciencia, sin regalar nada.

El 10 de octubre del año pasado ante Tigre, el Paraguayo se había puesto por sexta y última vez la camiseta de Boca en Primera. Como sentía una molestia, los doctores le indicaron uno estudios casi de rutina. Pero el diagnóstico resultó complicado: fractura por estrés del tercio medio de la tibia izquierda. “Cuando me dijeron, no lo podía creer. No entendía nada. Pensaba: ‘¿Por qué me tocó a mí?’”, cuenta.

La bronca de Gaona Lugo tenía que ver con que no se trataba de una lesión normal para un futbolista. “Una fractura por estrés o sobrecarga es una fisura delgada en un hueso que se desarrolla por la aplicación prolongada o repetitiva de fuerza sobre el mismo. La lesión que sufrió Orlando no es muy común en jugadores de fútbol. Habitualmente se da en marchistas, maratonistas, bailarines y hasta en soldados”, explica el doctor Pablo Ortega Gallo. Y agrega: “Al ser una lesión de difícil pronóstico, con porcentajes importantes de falta de consolidación y reaparición, teníamos dos caminos a seguir: operar o rehabilitar. Hablamos con el jugador y él decidió no operarse”.

Después de tomar la determinación de evitar el quirófano, primero lo inmovilizaron, luego tuvo que hacer reposo y más adelante comenzó con la rehabilitación. “Rápidamente asumí la lesión, acepté las indicaciones que me daban los doctores y cumplí al pie de la letra con todos los trabajos. Lo más difícil de manejar era la ansiedad por el tiempo que estaba perdiendo fuera de las canchas. Y otro tema que me costó fue trabajar alejado del resto de mis compañeros. Fueron cuatro meses durísimos, dale y dale en el gimnasio. Pero en ningún momento perdí la fe, sabía que iba a volver”, dice el juvenil de 20 años, nacido en Villa Hayes, una localidad cercana a Asunción.

Ya en los entrenamientos, el Paragua había mostrado sus mejores virtudes. El miércoles de la semana pasada, por fin, pudo volver a jugar unos minutos en Reserva contra Lanús. Y el domingo estuvo de titular ante Huracán y metió dos goles. Ahora vendrá el momento de seguir sumando minutos y ganando confianza. Porque superó un obstáculo complicado que le presentó el fútbol y sigue con el mismo sueño: “Cuando Adolfino Cañete me propuso probarme en Boca, no lo podía creer. Por lo que significa este club y porque acá jugaba mi ídolo: Rodrigo Palacio. Tuve suerte y me aceptaron, pero nada fue sencillo”, dice. Y completa: “Fue complicado vivir lejos de mis afectos y, además, esperar cumplir los 18 años para estar habilitado. Después aparecieron una serie de lesiones que fueron postergando mi salto a Primera. Y cuando lo logré, apareció la inoportuna fractura. Ahora quiero volver con todo. Mi sueño continúa siendo el mismo que traje desde Paraguay: triunfar con la camiseta de Boca”.

Esta vez Falcioni no tiene dudas y contra Independiente pondrá a Román.

¿Quién sale? En la prueba de fútbol, que finalizó 4-1 a favor de los titulares, lo metió por Erviti, a quien el DT pidió especialmente, y a Clemente por Cellay, desgarrado. Al clásico con un 4-3-1-2.

El 10 dijo que ante el Rojo quería estar. Desde que se lesionó ante Tigre, anunció que no se iba a perder el clásico. Esta semana ya pudo trabajar con sus compañeros y hasta participar de la práctica de fútbol, en el entrenamiento del día. Para eso, en el ensayo formal, Julio Falcioni decidió que fuera titular y volver de esa manera al clásico 4-3-1-2. Y para eso, el que debió abandonar en equipo fue Walter Erviti, recuperado de una dolenciia muscular pero marginado por cuestiones tácticas.

Así, entonces, el equipo que paró el técnico pensando en el partido del lunes ante Independiente formó con Lucchetti; Clemente, Caruzzo, Insaurralde y Monzón; Chávez, Somoza, Colazo; Riquelme; Mouche y Palermo. De esta manera, no sólo Román se reintegró al 11 titular si no que también pudo contar con Clemente (que no jugó ante Huracán) y con el Laucha, quien no había participado de los trabajos en los últimos días por una tendinitis en la rodilla derecha.

La práctica de fútbol finalizó 4 a 1 a favor de los titulares, y aunque el equipo que terminó en cancha sufrió varias modificaciones, es casi un hecho que Falcioni pondrá el 11 que la inició. ¿Los goles? Dos de Palermo en el primer tiempo, uno de Viatri (que lo reemplazó) y el último de Mouche. Durante la segunda etapa ingresaron Erviti y Enzo Ruiz (en lugar de Monzón y Colazo), Viatri por Palermo, Colazo (que reingresó) por Riquelme y el juvenil Mazzola entró en lugar de Somoza.

Un 28 de Abril de 1977 Boca le gana a Defensor de Uruguay por 2 a 0

Fue por la Copa Libertadores, el Boca del "Toto" Lorenzo derrotó a Defensor de Uruguay por 2 a 0, con goles de Mouzo (de penal) y Felman.

Formación
Gatti, Hugo Orlando
Pernía, Vicente Alberto
Sá, Francisco Pedro Manuel
Mouzo, Roberto
Tarantini, Alberto César
Benítez, Jorge José 87'
Ribolzi, Jorge Daniel
Zanabria, Mario Nicasio
Mastrángelo, Ernesto Enrique
Veglio, Carlos José
Felman, Darío Luis

Cambios
Carballo, Mario Roberto
DT: Lorenzo, Juan Carlos

Por segundo día consecutivo, Lucchetti no pudo entrenarse a causa de una tendinitis en la rodilla derecha y está en duda para jugar ante Independiente

Erviti y Clemente, por su parte, evolucionan favorablemente de sus molestias físicas.

A pesar de la buena noticia por haber visto a Riquelme trabajando con normalidad en el fútbol con espacios reducidos, Falcioni no tiene paz en lo que respecta a las lesiones, ya que ahora tiene averiado a Christian Lucchetti y, hasta el momento, está en duda para jugar ante Independiente, el lunes a las 20.20.

El arquero arrastra una tendinitis en su rodilla derecha y, como consecuencia, por segundo día consecutivo no pudo entrenarse con normalidad. Su lugar, entonces, estuvo ocupado por Javi García, quien posiblemente sea su reemplazo si no se recupera para jugar ante el Rojo, aunque aún cuenta con varios días más para recibir el alta.

Por otro lado, Walter Erviti y Clemente Rodríguez evolucionan favorablemente de sus respectivas nanas. El volante mejoró de una contractura en el muslo izquierdo, mientras que el volante (que no jugó ante Huracán) se va reponiendo de una fatiga en el isquiotibial derecho.

Boca se entrenó en Casa Amarilla en un día que tenía estipulado como libre.

El cambio de fecha vs. el Rojo obligó a modificar lo planes: habrá práctica el domingo 1° de mayo. Riquelme está para volver, Clemente y Erviti evolucionan bien.

En la opinión pública, el Día de Trabajar es sinónimo, paradójicamente, de una jornada sin actividad laboral. El fútbol no es ajeno a ello, por lo que el domingo no habrá partidos en nuestro país. Ojo, eso no quiere decir que todos tendrán el día libre. El cambio de día y horario del duelo contra Independiente (será el lunes a las 20.20) obligó a cambiar los planes en Boca. Es costumbre hacer movimientos en el día previo y por eso el domingo 1° de mayo habrá práctica. Para eso, desde el club necesitan el visto bueno desde Agremiados.

El clásico con el Rojo estaba estipulado para el viernes, por lo que hoy iba a ser el día libre para los jugadores. Iba… Porque con la modificación ya confirmada, el plantel xeneize se entrenó en Casa Amarilla y el descanso quedó para otro momento. ¿Para el Día del Trabajador? No, para esa fecha está establecido tener la última práctica previa al match.

En el predio Pedro Pompilio hubo trabajos en espacios reducidos, donde Riquelme se mostró sin inconvenientes y día a día deja en claro que está para volver. Román se perdió el partido ante Huracán por un desgarro abdominal, pero eso ya es cosa del pasado y el lunes volvería a la titularidad. Erviti sufrió una contractura en el muslo izquierdo ante el Globo, hoy se entrenó a la par de sus compañeros y estaría en condiciones de seguir en el equipo. Christián Lucchetti es el más complicado, que arrastra una molestia en la mano y tiene la rodilla derecha inflamada. Por segundo día consecutivo se quedó sin entrenamiento y es la principal duda

Erviti se recuperó, pero no jugaría

El mediocampista de Boca Juniors Walter Erviti se recuperó de una contractura en el muslo izquierdo y se sumó a los trabajos junto al plantel, aunque podría perder su lugar en la formación titular que recibirá a Independiente si es que se concreta el regreso de Juan Román Riquelme.

Es que con el muy buen rendimiento del juvenil Nicolás Colazo, y atento a que Riquelme es clave en el andamiaje futbolístico del equipo, Falcioni optaría por relegar al banco de suplentes a Erviti.

Otra alternativa, aunque contaría con menos posibilidades de concretarse en el encuentro que fue reprogramado para el próximo lunes, es que quien deje el equipo sea Pablo Mouche, por lo que Falcioni podría mantener una línea de cuatro mediocampistas, con Riquelme como media punta y Martín Palermo como único atacante definido.



Con todo, y a la espera de un primer ensayo formal, los elegidos por Falcioni serían: Cristian Lucchetti; Clemente Rodríguez, Matías Caruzzo, Juan Manuel Insaurralde, Fabián Monzón; Cristian Chavez, Leandro Somoza, Nicolás Colazo; Riquelme o Erviti (que en caso de jugar lo hará como doble volante central); Pablo Mouche y Martín Palermo. Lucchetti trabajó nuevamente hoy en forma diferenciada por un golpe en la mano, pero no tendría inconvenientes en ser parte del equipo ante el Rojo.

Un 27 de Abril de 1947 Boca le gana a River .

Con goles de Boyé y Ricagni, Boca venció a su tradicional rival por 2 a 0, mantiendo el invicto como local en los clásicos desde que inauguró la Bombonera

BOCA JUNIORS: Vacca; Marante, De Zorzi; Sosa, Lazzatti, Pescia;
Boyé, Corcuera, Geronis, Ricagni, Pin.
RIVER PLATE: Grisetti; Vaghi, Rodríguez; Yácono, Rossi, Ramos;
Reyes, Moreno, Di Stéfano, R. Coll, Loustau.
Goles: 52 ‘Boyé [1-0], 88′ Ricagni [2-0].
Árbitro: Cángaro.

Pese a que Román se entrenó con normalidad, Falcioni no confirmó el regreso del 10 y lo supeditó a cuándo se juega el clásico vs. el Rojo.

Habló por primera vez después del 3-0 y no se bajó de la pelea: "Estamos ahí, si ganamos dos seguidos...".

Y abrió la boca, nomás. Extrañamente, JC había hecho silencio después del 3-0 a Huracán. Tardó en dar sus opiniones sobre el partido, sobre lo que se viene. Y más allá de elogiar a Riquelme, no aseguró su regreso más allá de que el 10 se viene recuperando bien del desgarro abdominal. “Lunes y martes Román se entrenó en forma normal, ya trabajó normalmente con todo el grupo en la segunda parte (antes trabajó la rodilla) y vamos a buscar alternativas para este miércoles. Todo dependerá también si jugamos viernes, sábado o lunes para ver cuáles serán las exigencias. Vamos a ver cómo está, al igual que Clemente y Erviti”. ¿Si con el 10 en cancha cambia el juego? “Los jugadores seguro lo buscan más. Y en lugar de resolver individualmente alguna situación buscan el juego asociado, con Román o con el volante que juegue en esa zona”, explicó en La Red.

Falcioni se mostró conforme con el rendimiento contra Huracán: “Fuimos muy superiores a un adversario que, en esa cancha, y desde que está Tito (Pompei) no había perdido nunca. Creamos muchas situaciones de gol. Sabíamos, como lo habíamos estudiado, que no podíamos perder. Con espacios íbamos a hacer la diferencia. Boca estuvo muy compacto. No le permitió hacer nada al rival. No sé si compararlo con el equipo del verano pero fue muy equilibrado en todas las líneas y con acciones importantes individuales. Fue un equipo sólido y profundo”.

¿Hay chances de campeón todavía, en un torneo tan irregular, estando a siete del líder Vélez? “Tenemos mucho por jugar. Hay que ir partido a partido. Ojalá podamos sumar y tener el mismo desenvolvimiento. Ojalá podamos tener el mismo ritmo, juego y contundencia. O sea, los equipos que todos queremos. La actitud de los muchachos la tuvieron al máximo. A veces con mejor o con no tan buenos resultados. Yo no marco sólo un partido sino el trabajo de todos los días. Hacer varios goles y que no te conviertan es lo ideal. Esperemos sostenerlo. No hacer un partido bueno y otro regular. Como están dadas las cosas, estamos ahí. Si seguimos sumando como con Huracán, y jugando de esa manera, todos tenemos posibiliades. Si ganamos dos partidos seguidos estamos en la pelea”.

La goleada ante Huracán y las derrotas de los equipos que pelean arriba encendieron la ilusión.

“Las esperanzas están”, dijo Palermo.Matemáticas, estás ahí? Se preguntó Adrián Paenza en el título de su libro. ¿Campeonato, estás ahí? Bien podrían preguntarse en este volátil Mundo Boca que pasa del ocaso a la gloria con la velocidad de la luz.

Este Clausura es tan parejo que permite que cualquiera se ilusione. Hay doce equipos separados por apenas seis puntos y hasta el 14°, como este Boca irregular y ubicado a siete unidades de la cima, se anima a soñar. Lo blanqueó Martín Palermo: “Sí, en lo que es estadístico y lo que uno puede analizar, las chances están abiertas. Quedan ocho partidos en los cuales tenés que hacerte fuerte de local, eso es fundamental para llegar al último partido con posibilidades. Eso, sumado a que de visitante estamos sacando buenos resultados, si se complementa con el hecho de no perder en la cancha de Boca... Las esperanzas están”.

La realidad es que parece, cuanto menos, muy difícil que Boca pueda llegar al título. Si bien es cierto que una serie de triunfos lo puede prender en la lucha de arriba, todavía no le da el piné para erigirse como un candidato firme. Por jerarquía de sus individualidades, por el peso de la camiseta y por la chapa de su historia, Boca debería ser un postulante natural al trono. Pero el andar inconsistente del equipo en este torneo lo alejó de los puestos privilegiados.

Sin embargo, hay algunos, como Palermo, que todavía tienen fe y se amparan en aquello que solía decir Bianchi de que “una victoria llama a otra victoria”. Por eso, el Titán afirma: “Estamos todos los equipos muy juntitos, no hay que confiarse ni subestimar a nadie, pero debemos seguir por este camino. Ojalá que el triunfo sirva para el despegue. Y para darle más valor al resultado que conseguimos, hay que ganarle a Independiente y seguir”.

Se sabe, en Boca siempre puede pasar cualquier cosa. Alguna vez, más precisamente en el Apertura 2008, le descontó 11 puntos a San Lorenzo. A ver si en este Clausura 2011 se da una nueva remontada histórica...

"El Xeneize", luego de los trabajos livianos de ayer, vuelve a entrenar con la intención de ir delineando el equipo que se medirá ante "El Rojo".

Si responde bien, Román podría jugar. Lo mismo sucedería con Clemente Rodríguez y Walter Erviti

Atrás quedó la alegría por el triunfo por 3 a 0 sobre Huracán en Parque Patricios, como así también la vuelta al gol de Martín Palermo, que alivió a todos. Boca entrenó ayer lunes pensando en Independiente, y no tuvo jornada libre creyendo que la semana sería más corta por tener que presentarse el viernes. Sin embargo, y aunque todavía no se confirmó oficialmente, el cotejo sería el lunes.

Julio César Falcioni deberá evaluar y pensar varias cuestiones, porque si Juan Román Riquelme responde bien a las exigencias de la semana iría de inicio ante los de Avellaneda. De esta manera, se vería obligado a romper el esquema 4-4-2, el que más le convence.

Por otro lado, habrá que seguir la evolución de Clemente Rodríguez, quien no estuvo ante "El Globo" por lesión. Se espera que pueda estar disponible, y su ingreso sería justamente por Christian Cellay, quien se desgarró y se perderá varios de los próximos compromisos.

En tanto, Walter Erviti trabajó diferenciado, junto a José María Calvo y Christian Cellay. Al ex Banfield se lo aguardará hasta último momento para definir si podrá formar parte del once inicial que reciba al "Rojo".

Un 26 de abril de 1949 Nace Carlos Bianchi...Feliz cumple Virrey y gracias...

Apodado «El Virrey», como jugador se destacó por su capacidad goleadora, siendo históricamente el jugador argentino que más goles ha convertido en torneos de primera división, con 385 tantos en 546 partidos (prom. 0,71), lo que lo ubica en el puesto nº 13 de la tabla de máximos goleadores de todos los tiempos de la FIFA.1

En Argentina jugó en el Club Atlético Vélez Sarsfield de Buenos Aires, con el que se consagró campeón en el Nacional 1968 y goleador del torneo en el Nacional 1970, el Metropolitano 1971 y el Nacional 1981. En Francia jugó princialmente para el Stade de Reims donde fue goleador de tres campeonatos (1974, 1976 y 1977), y el Paris Saint-Germain, con el que fue máximo goleador de la liga en dos oportunidades (1977-78 y 1978-79).

Como director técnico se destacó en los clubes Vélez Sarsfield y Boca Juniors de Buenos Aires, con los que obtuvo 7 títulos nacionales y 8 copas internacionales, incluyendo 3 veces la Copa Intercontinental.

Boca se entrenó después del buen partido con Huracán. Riquelme, recuperado de su desgarro, hizo fútbol reducido a la par de sus compañeros.

Román volvió a encontrarse con la bocha en la práctica, ¿lo pondrán ante Independiente?

Boca consiguió una victoria importantísima ante Huracán. Por lo anímico, porque se dieron algunos resultados que todavía le permiten soñar con meterse en la pelea y porque, sobre todo, jugó sin ese as de espada que le venía dando sus frutos cuando la cosa se ponía brava: Juan Román Riquelme.

El enganche tenía un desgarro en la zona abdominal y por eso se perdió el partido con Huracán. "Voy a tratar de estar ante Independiente", avisó después de la noticia. Y, según parece, ya está recuperado. En la práctica, Julio César Falcioni dispuso fútbol reducido y Riquelme trabajó a la par de sus compañeros.

Román volvió a encontrarse con la pelota y el técnico podrá contar con él para el clásico con el Rojo. Si bien Boca consiguió un buen funcionamiento en el partido con el Globo, el Diez es pieza clave. ¿Lo pondrá Falcioni?

Román se mueve diferenciado en un nuevo entrenamiento de Boca

Luego de la goleada ante Huracán de ayer, el plantel "xeneize" retornó a las prácticas con vistas al clásico frente a Independiente, que en principio se jugaría el viernes desde las 21.15. El enganche, pese a que no trabaja a la par del resto por su desgarro, hará lo posible por estar

Falcioni se fue del Ducó sin hablar. ¿No le quiso contestar al Cholo Palmieri?

Boca goleó 3 a 0, Palermo se sacó la mufa, el equipo mostró el mejor funcionamiento del campeonato, la gente deliró en la tribuna, pero los hinchas no pudieron escuchar ni observar ni leer lo que piensa su técnico. Falcioni se fue de Parque Patricios sin hablar con la prensa, es decir, sin hablar con la gente. ¿Por qué? Cuentan quienes compartieron con JC la intimidad del vestuario que se lo notaba contento con la producción de sus jugadores. Sin embargo, no quiso exhibir su felicidad en público. Tal vez, para evitar contestarle al ex directivo Horacio Palmieri, quien lo definió “técnico de equipo chico”. O, quizá, para no sumar más polémica luego de sus contradicciones de la semana: el lunes había declarado que necesitan “varios refuerzos” y el viernes, en conferencia, se desmintió a sí mismo.

Es la segunda vez en el campeonato que el DT se va de un partido en silencio. La anterior, había sido tras la derrota ante Olimpo. Aquella vez estaba triste. Ayer, no quiso compartir su alegría con la gente.

Nicolás Colazo volvió a ser uno de los mejores de Boca, metió su segundo gol consecutivo y se ganó un puesto entre los 11.

“Estoy como loco, ja”, contó feliz.Pensé que me iban a dar a préstamo”. La sinceridad descarnada de Nicolás Colazo promediando la pretemporada en Tandil lo decía todo. No sospechaba ni por asomo que hoy iba a ser titular y repentinamente pieza valiosa entre los 11 titulares de este Boca oscilante. Ganarse el puesto en este escenario vacilante no parece una faena menor para un chico que nunca tuvo demasiadas oportunidades desde su debut en Primera. Y Colazo lo está consiguiendo. A fuerza de goles, de marca por la banda zurda. Despliegue, que le dicen. “Estoy haciendo las cosas bien, pero sé que es muy difícil ganarse un lugar acá, hay que seguir trabajando fuerte”, dijo después del 3 a 0 a Huracán. Y pensar que desde que Alves lo hizo debutar (el 04/07/2009, victoria 3 a 1 con Colón en Santa Fe), no volvió a ser tenido en cuenta ni por Basile ni por Borghi, que lo hacía poner en Reserva en una posición que le era incómoda: doble cinco. Falcioni lo probó en el verano en su puesto madre y poco a poco se fue ganando un lugar.

Ayer el volante de 20 años completó un gran partido y fue salida constante en el Xeneize, una bocanada de aire para un equipo que estaba con la soga al cuello. “Ganamos y era importante, pero lo mejor fue que todos jugamos un gran partido, estuvimos sólidos en todas las líneas, salimos a presionar siempre. Creo que fue la mejor producción del equipo en lo que va del torneo. Estuvimos muy efectivos y tuvimos la suerte de definirlo. No como otras veces, en donde por ahí jugábamos bastante bien, teníamos las posibilidades pero no concretabamos y terminábamos perdiendo”, contó después del partido.

Colazo se hizo un festín por el costado izquierdo, se cansó de ganarle las espaldas al pobre de Rodrigo Lemos y picar al vacío. Se mostró como opción en ataque siempre apareciendo por sorpresa. Así llegó su gol: capturó un pase de Mouche y definió muy bien apenas empezada la parte final. Fue el segundo en el torneo: con Tigre la metió desde afuera. “La verdad me pone muy contento llegar al gol. Dos en dos partidos... Estoy como loco, ja. Pero no sólo me alegré por mi gol, el de Martín también fue importante, todos nos pusimos muy contentos de que pueda convertir en los últimos partidos que le quedan”, cerró Nico.

Un 25 de Abril de 1949 nace Vicente Alberto Pernía

En Tandil, Provincia de Buenos Aires, Argentina), es un deportista argentino retirado. Se desempeñó como futbolista entre las décadas del '70 y '80, para luego comenzar en la década del '90 su carrera como piloto de automovilismo de velocidad. Como futbolista, su posición era la de marcador lateral derecho, caracterizándose por su personalidad y vehemencia, asi como también por entrar con murra y hachar a cuanto jugador contrario, y en ocaciones del mismo equipo, le pasara por al lado.

Una vez retirado del fútbol, decidió probar suerte en el automovilsimo, compitiendo en el Turismo Nacional y en el Turismo Carretera, categoría en la cual obtuviera un pequeño número de victorias y el subcampeonato del año 1996, por detrás del multicampeón Juan María Traverso.

Resumen en video: Huracan 0 Boca Juniors 3 ( 24/04/2011).

Sin esfuerzo, Boca lo paseó a un Huracán muy pobre y sin reacción.

Rápidamente quedó claro quién sería el ganador y sólo restaba que Palermo rompiera su racha. Y la rompió.

No hubo equivalencias. Boca ni necesitó esforzarse. No le hizo falta ante este desdibujado (por ser generosos con el adjetivo) Huracán, que padeció contra el equipo de Falcioni como si estuviera enfrentándose al Barcelona de Messi.

Concentración y actitud son los elogios que rápidamente justificaron que la tendencia del partido fuera un Boca dominante. Con Chávez y Mouche encendidísimos y aprovechándose de la última línea del Globo. Palermo, inquieto, intuía que podía ser "su" día.

Sin control de pelota, sin pase, Huracán fue retrocediendo más de lo que Boca lo fue empujando, futbolísticamente hablando. Así, en uno de los mil desbordes de Mouche, Chávez sacudió la red. ¿Qué hizo el Globo? Nada. No reaccionó táctica ni estratégicamente. Ni siquiera con la suerte de que el segundo gol de Boca no aparecía, supo encontrar su momento.

Encima, no iba un minuto del segundo tiempo cuando Colazo metió su golazo. Faltaban casi 45 minutos y ya estaba la chapa puesta: Boca ganador. Parecía que lo que quedaba era para ver si Martín rompía su maleficio. Tuvo una, dos, tres... y daba la sensación que tampoco se le iba a dar. Huracán llegaba a los 36 del segundo tiempo por primera vez al arco. Toda una señal.

El cierre fue para ese goleador que parecía perder el optimismo. Mouche le entregó el gol en una asistencia para que Palermo rompiera su cero y ganara su partido. Boca ya había ganado el suyo hacía rato con un poco de orden

Por fin Martín, lo esperabamos y llego..gracias...

Un grito del alma, con ganas, como si fuera otro de sus tantos heroicos. Se sacó la mufa Martín Palermo y volvió a marcar un gol con la camiseta de Boca. Dejó atrás su peor racha adversa en el fútbol argentino. Fueron interminables 953 minutos, 11 partidos, desde que le había marcado a Gimnasia, en la Bombonera, en la última fecha del torneo Apertura pasado.

Iban 37 minutos del segundo tiempo, en Parque Patricios, cuando Martín, después de desperdiciar varias ocasiones, aprovechó un centro por lo bajo de Mouche y, con el arquero Monzón vencido, anotó el 3 a 0 final ante Huracán. Lo gritó con el alma, la mala racha se terminó en un tarde en la cual el rubio delantero jugó un buen partido: participó del juego del equipo y se le dio el festejo en el final.

En el primer tiempo, Palermo empezó con dos claras ocasiones. Primero definió por abajo. Luego, un cabezazo suyo se perdió muy cerca del palo izquierdo de Gastón Monzón, quien, cuando concluía el primer tiempo, le ahogó el grito de gol. También tuvo un mano a mano y se abrió demasiado.

En el complemento, un cabezazo suyo impactó en el palo y, sin arquero, definió desde afuera del área, aunque por encima del travesaño. Parecía que la racha no se rompía. Incluso Ospina salvó un remate suyo en la línea. Hasta que, a los 37, se produjo el impacto tan esperado.

Pero Palermo no sólo volvió al gol. Martín comenzó la jugada que terminó en primer tanto de Chávez. Luego, bajó la pelota en el de Colazo.

A su carrera le quedan ocho partidos si cumple con su palabra y se retira al final del torneo Clausura. Seguramente, podrá disfrutar más los encuentros que le quedan.

"El Xeneize" intentará levantar cabeza en Parque Patricios (formaciones de los equipos)

Esperando todos que pueda convertir Martín..desde las 18 se enfrenta al “Globo”, que viene de perder un duelo clave ante All Boys y necesita salir de la zona de abajo. El visitante jugará sin Riquelme, desgarrado, y con la vuelta del sistema 4-4-2. El encuentro lo arbitrará Héctor Baldassi


Crédito foto: Fotobaires.com.ar

Boca tendrá que recuperarse del empate ante Tigre y la floja actuación que mostró en aquel juego, en donde estuvo siempre en desventaja; en tanto, el local es un equipo con dos caras. Por un lado ha mejorado notablemente desde la llegada de Roberto Pompei al banco. Pero a su vez no logró plasmar el buen rendimiento en los resultados, por lo que aún no le alcanza para evitar los peligros de la tabla de promedios.



La lesión de Juan Román Riquelme (desgarro en la zona abdominal), sumado a la sequía de goles de Martín Palermo, son algunos de los problemas que tiene Julio Falcioni, quien se decidió por los ingresos de Christian Cellay, Juan Manuel Insaurralde, Fabián Monzón y Cristian Chávez. Los tres primeros entrarán en la defensa por Enzo Ruiz, Gastón Sauro y Clemente Rodríguez, quien no se recuperó de una molestia. Por otro lado, “El Pochi” será el reemplazante de Román en el mediocampo. De esta manera, la alineación se planteará con un clásico 4-4-2, esquema que más le gusta a "Pelusa".



En el local habrá una sola variante. Será el retorno de Cristian Maidana, quien evolucionó de la sobrecarga en el isquiotibial izquierdo, por lo que ocupará el lugar de Mariano Torres. Mientras tanto, se confirmó que Luciano Ospina seguirá como titular en la defensa, debido a que Carlos Quintana no ha podido recuperarse de su edema en el pie derecho, el cual lo ha tenido trabajando en forma diferenciada durante la semana.



Probables formaciones:



Huracán: Gastón Monzón; Rodrigo Lemos, Facundo Quiroga, Luciano Ospina, Matías Quiroga; Gastón Machín, Marcos Brítez Ojeda, Rodrigo Battaglia, Cristian Maidana; Rolando Zárate y Javier Cámpora. DT: Roberto Pompei.



Boca: Cristian Lucchetti; Christian Cellay, Matías Caruzzo, Juan Manuel Insaurralde, Fabián Monzón; Cristian Chávez, Leandro Somoza, Walter Erviti, Nicolás Colazo; Pablo Mouche y Martín Palermo. DT: Julio César Falcioni.



Cancha: Tomás Adolfo Ducó.



Árbitro: Héctor Baldassi.



Hora: 18.00.

Estadísticas y otros datos contra Huracan

En la era Profesional jugaron 142 partidos con 76 triunfos del Xeneize (271 tantos), 28 victorias del Globo (169 goles) y 38 empates.
Historial:
En la era Profesional jugaron 142 partidos con 76 triunfos de Boca Juniors (271 tantos), 28 victorias de Huracán (169 goles) y 38 empates.

Datos destacables del historial:
Huracán perdió 12 de sus últimos 13 compromisos ante Boca. Además, el Xeneize ante el Globo acumula una racha invicta de 18 juegos que se compone de 15 festejos y 3 empates.

De este modo, Boca igualó la mejor marca establecida entre 1981 y 1993 cuando estuvo 18 partidos sin caer ante el Globo. Aquella vez fueron 11 triunfos y 7 empates.

Uniendo ambos períodos (1981/1993 + 1994/2008) en los cuales Huracán ganó solamente 2 veces, jugaron 39 veces con 27 victorias de Boca y 10 empates.

En los últimos 11 juegos entre estos equipos, Huracán sólo anotó 4 goles, contra 24 de Boca.

Huracán no le gana al Xeneize desde el Apertura 1994. En aquella ocasión, en el Tomás Adolfo Duco, el Toro Acuña había adelantado a Boca en el arranque del partido. Sin embargo, en el complemento, Víctor Hugo Delgado, Pedro Barrios y Walter Pelletti sellaron el histórico 3-1.

El Xeneixe, jugando en condición de local ante Huracán, acumula 19 partidos invicto: 15 triunfos y 4 empates. Su última derrota jugando en La Bombonera fue en el Nacional de 1980, en un partido nocturno jugado el 05/11/1980 y todos los goles fueron en los últimos 21 minutos: Boca Juniors 1 vs. Huracán 4 (72’ Ribolzi -penal-// 69’ Avallay, 76’ Candedo, 83’ Brindisi y 90’ Morresi). El árbitro fue Abel Gnecco y los DT’s fueron Antonio Rattín (Boc) y Eduardo Janín (Hur).

Máximas goleadas
Boca Juniors - Apertura 1996: Boca Juniors 6 vs. Huracán 0.
Huracán - Metropolitano 1972: Huracán 5 vs. Boca Juniors 1.

Detalle de los últimos 5 enfrentamientos:
Apertura 2002: Boca Juniors 3 vs. Huracán 1 (Marcelo Delgado, Rolando Schiavi y Guillermo Barros Schelotto // Marcelo Kobistyj).
Clausura 2003: Huracán 0 vs. Boca Juniors 4 (Gustavo Pinto y Héctor Bracamonte -3-).
Apertura 2007: Boca Juniors 1 vs. Huracán 0 (Pablo Ledesma).
Clausura 2008: Huracán 0 vs. Boca Juniors 0.
Apertura 2008: Huracán 0 vs. Boca Juniors 3 (Lucas Ezequiel Viatri y Osvaldo Fabián Nicolás Gaitán -2-).

Con las 2 camisetas:
Ramón Toribio Adorno, Abel Aníbal Alves, Gabriel Omar Amato, Julio Héctor Apariente (h), Marcelo Bachino, Antonio Daniel Barijho, Sergio Ángel Berti, Mario Emilio Boyé, Miguel Ángel Brindisi, Claudio Martín Cabrera, Fabián Gustavo Carrizo, Ariel Colzera, Leandro Javier Díaz, Pablo Carlos Erbín, Nahuel Darío Fioretto, Andrés Franzoia, Rubén Horacio Galletti, Alejandro Víctor Giuntini, Hugo Romeo Guerra, Pablo Eduardo Islas, Omar Larrosa, Miguel Ángel Loayza, Raúl Horacio Madero, Claudio Oscar Marangoni, Norberto Menéndez, Pablo Alejandro Migliore, Antonio Ricardo Mohamed, Elio Montaño, Cesáreo Onzari, Roberto Aníbal Passucci, Héctor Mauricio Pineda, Esteban Ernesto Pogany, Roberto Fabián Pompei, Roberto Rigante, Juan José “Yaya” Rodríguez, Emiliano Manuel Romay, José Luis Saldaño, Juan Amador Sánchez, Osvaldo Norberto Santos, Sergio Saturno, José María “Colorado” Suarez, Rubén Francisco Suñé, Claudio Vacca, Jorge Alberto Vázquez, Enrique Bernardo Vidallé, Hernán Vigna, Oscar Alberto Vijande, Mario Nicasio Zanabria, entre otros.

Datos adicionales:
Boca Juniors perdió en 3 de sus últimas 4 presentaciones. Esos juegos fueron ante Tigre en el triangular final del Apertura 2008, ante Newell’s y Lanús en el Clausura 2009.

En lo que va de la temporada, en la Bombonera, Boca Juniors perdió en 4 (Tigre, Estudiantes, Vélez y Newell’s Old Boys) de los 10 partidos jugados allí.

Huracán cayó en la fecha pasada tras 3 victorias consecutivas. Esas son las únicas 3 victorias en la era Cappa (9 partidos).

Ángel Cappa como DT vs. Boca Juniors: se enfrentaron 3 veces con 2 victorias de Boca Juniors y 1 empate. Cappa nunca pudo vencer al Xeneize en sus 3 encuentros al frente del plantel de Racing Club. Todos esos juegos se disputaron en el estadio Presidente Perón.

Beraldi les pegó duro y Falcioni pidió refuerzos. Hoy es el día de demostrar. ¿Aparecerá el fuego sagrado?

Los jugadores de Boca llegan al partido de hoy frente a Huracán con los globos inflados. ¿Se harán dueños del Palacio o serán serviles a los intereses de Pompei y su séquito? Habló el vicepresidente José Beraldi en la semana y dijo que “el que no entienda la mística de Boca y no se adapte deberá irse” y focalizó sus cuestionamientos en los hombres más nuevos. Habló el entrenador Julio Falcioni en la semana y sentenció que “necesitamos varios refuerzos”. Ellos, lo supo Olé , se sintieron tocados, señalados, apuntados. Hoy es el día de demostrar.

El cuerpo técnico, sin autocrítica propia (al menos en público) espera una reacción inmediata de los futbolistas. Aduce que ya probaron variantes nominales y posicionales por doquier, se ampara en la escasez de recambio y siente que llegó el momento de que sus muchachos entreguen una prueba de enjundia y coraje en una coyuntura que lo requiere. El DT quiere jugadores revulsivos. Luego del empate frente a Tigre, en la intimidad valoró la actitud para levantar el 0-2 inicial, pero cree que todavía no alcanza. Entiende que se necesita rebeldía ante la adversidad y aún confía en que este grupo, herido en su orgullo, exhiba la templanza suficiente para afrontar el mini-torneo que desembocará en el compromiso más importante del semestre: el superclásico frente a River de la 14ª, en la Bombonera.

En su rol componedor, en las apariciones públicas de los últimos días, JC defendió a sus dirigidos y no hizo leña del arbol caído. Pero tomó una medida que incluye enojo, castigo y mensaje: por primera vez en su ciclo los hizo concentrar dos días antes del partido. Es más, obligó a realizar toda una movida de logística para cumplir con su pedido y así Boca durmió el viernes en el hotel Sheraton Libertador y ayer en el Madero, el búnker habitual del equipo, que no tenía disponibilidad el viernes a la noche.

Otra vez de regreso a su fetiche 4-4-2 y por primera vez sin Riquelme en los últimos cinco partidos, Falcioni se la juega ante un rival comprometido y urgido. Sin embargo, la lupa, como nunca, estará puesta de la línea de cal para adentro. A ver, a ver los jugadores...

Un 24 de Abril de 1966 debuta en Boca, Ramón Héctor "Mané" Ponce

A Ramón Héctor Ponce, nacido en Corrientes, no se lo puede identificar con el rótulo "Loco" como se lo hizo con otros punteros. No tenía las excentricidades y acrobacias de los que ganaron ese mote. Ello no quiere decir que no contara con la habilidad necesaria para provocar el desborde o la velocidad para buscar el fondo de la cancha o la diagonal que sorprende. Sus compañeros en la intimidad del grupo lo apodaron "Mané", como para identificarlo con otro grande del fútbol mundial, Garrincha. Ponce, siempre hacía lo correcto. Era poco menos que imposible que se excediera en una maniobra que estaba condenada al fracaso. Con simpleza, buscaba la jugada que beneficiaría a su equipo y que le diera posibilidad a su ataque de llegar a la red. Era su mayor virtud.

Su aparición en primera división se produjo en 1966, aunque ésa fue apenas fugaz. Con escasa frecuencia fue alternando en la punta derecha del ataque y en una oportunidad jugó como wing en el sector izquierdo, la que volvería a ocupar en la selección argentina en el '73, por las eliminatorias para el Mundial de 1974 en Alemania, en lugar de "Chupete" Guerini. Pero retomando el comienzo, la punta derecha del ataque tenía nombres por lo que el joven y promisorio valor debía hacer banco. Antonio Cabrera, que con su sacrificada forma de juego se ganó la confianza de muchos técnicos y a comienzos del '69 con la llegada de Coch quedó relegado aún más. Como si fuera poco, el "Pocho" Pianetti estaba en condiciones de ocupar esa plaza. Parecía poco menos que imposible su confirmación en la titularidad. Siguió trabajando en silencio con todas sus fuerzas, esperando la oportunidad que tarde o temprano habría de llegar. Y llegó.