En el 2005 fue operado por un desprendimiento de retina y mañana le harán más estudios para definir si se suma o no. No hay novedades por Riquelme.
Estaba todo listo para oficializar y firmar el acuerdo de Gonzalo Fierro con Boca. Hoy fue el turno de la revisión médica y el físico está óptimo. Salvo una parte: la vista. El chileno evidenció un problema de sus ojos, por lo que le harán más estudios para determinar qué es lo que realmente tiene y después definir si se suma al plantel o se vuelve.
Los médicos de Boca esperarán hasta tener los estudios en la mano para dar el visto bueno. En julio del 2005, Fierro fue operado por un desprendimiento de retina, producto de cabezazos y caídas. “Lloré cuando me dijeron que por mi ojo no podría jugar más”, dijo el chileno en ese momento. Pero volvió a jugar tres meses después y no dio indicios de secuelas. Lo cierto es que en Boca encontraron irregularidades en su vista, por lo que no pasó por ahora la prueba física y por ende no entrenó con el plantel.
En la práctica, Claudio Borghi pudo contar con casi todo el plantel, salvo Fierro y Juan Rompan Riquelme. Palermo, Medel, Battaglia, todos juntos otra vez. Sólo Escudero y el Pochi Chávez entrenaron diferenciado. El Bichi ordenó trabajos ejercicios de precisión y velocidad, todo en espacios cortos y con arcos chicos. Luego el plantel se fue a almorzar al Hotel Intercontinental, luego descanso y el segundo turno por la tarde. Además habrá conferencia de prensa del DT.
Algo más para contar tiene que ver con lo que pasó con Ezequiel Muñoz. El central fue al aeropuerto para viajar a Italia y sumarse al Palermo, pero no lo hizo de una. Primero recibió un llamado de Boca para que espere a que el Real Madrid conteste (tenía prioridad para igualar la oferta del club italiano) y como no hubo contacto, Muñoz pudo poner proa con destino Europa. Ya es ex jugador de Boca.
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