martes, 1 de noviembre de 2011

La Seguridad se reunió y propuso jugar sólo con 2.000 hinchas de Boca o sin público visitante.


Mientras Mauro Martín y Rafael Di Zeo buscan la forma de quedar como únicos dueños de un negocio de alta rentabilidad, los organismos de seguridad intentan encontrar medidas de prevención ante una guerra que ya está declarada y que en cualquier momento puede estallar. Y no de risa...

Luego de un domingo con desafíos que iban de una tribuna a otra (Mauro y su tropa se ubicaron en la segunda bandeja que históricamente cobijó a la barra, y Rafa y sus secuaces fueron a la segunda bandeja que da al Riachuelo), ayer hubo una reunión en el Consejo de Seguridad para conseguir, al menos, algunos parches que oficien de solución ante semejante problema. Entre la fiscalía a cargo del doctor Walter López, los miembros de la Unidad de Coordinación de Seguridad y Prevención de la Violencia en Espectáculos Futbolísticos (Ucpevef) que dirige Juan Carlos Blanco, el Gobierno de la Ciudad y la Policía se barajaron algunas posibilidades. La que picó más fuerte es que Boca disponga el domingo en Liniers de 2.000 entradas, consideradas a través del ranking de socios que realiza el club y que debería enviar al Ministerio de Seguridad y, así, quedar chequeado que no se haya filtrado en la lista ningún barra. De ese modo, los hinchas que vayan a la cancha deberán llevar su ticket y el DNI. Sería grotesco, claro, si Boca rubricara en la lista a Mauro Martín. La Comisión Directiva pisaría su propio palito y quedaría más desnudo que nunca el vínculo dirigentes-barras.

La otra chance en análisis es que finalmente el partido se juegue sin público visitante. En privado, varios dirigentes de Boca admitieron que esta posibilidad es la que más los seduce, ya que así se evitaría cualquier situación de violencia. Pero quienes tienen la potestad de decidir ya avisaron que harán todo lo posible para no llegar a esa instancia. Es más, quieren cortar de raíz con la interna en la barra y entienden que una reunión entre Jorge Ameal y Daniel Angelici (los principales candidatos a ocupar el sillón a partir de diciembre) podría servir como paso inicial.

Por si fuera poco, el fiscal Walter López avanza en la investigación para conocer en detalle cómo se produjo el ingreso de la gente de Rafa a la Bombonera. Las líneas de investigación apuntan a la ruptura de molinetes y las cámaras de seguridad ubicadas en la puerta seis (esto último ya está probado). Y aun sabiendo que seguramente obtendrá un resultado negativo, el fiscal evalúa pedir la clausura de la Bombonera amparándose en que hubo omisión de recaudos de seguridad por parte del club. Pero los antecedentes no lo avalan: el fiscal Martín Lapadú, entonces con jurisdicción en La Boca, se cansó de proponer clausuras que la Justicia después no le convalidaba. Por eso, la idea para el compromiso frente a Racing es que no haya venta de entradas y que sólo puedan ingresar socios con carnet al día. Así, Di Zeo se quedaría afuera, salvo que el club lo ponga en regla. Y, se sabe, todo puede pasar...

La puerta 6, clausurada

La puerta por la que ingresaron Di Zeo y los suyos a la Bombonera fue clausurada a pedido del fiscal Walter López, quien lleva adelante la causa. Los violentos rompieron molinetes para poder. entrar.

Una lista muy cortita

El derecho de admisión xeneize da risa. Son sólo ocho nombres: el Uruguayo Richard, el Ninja Enrique, Hugo Gauna, Hugo Pérez, Leonardo Socco, Daniel López, Nahuel Maidana y Fernando Gatica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario