No hubo jugadores sobresalientes en el triuno ante Newell’s, pero lo más destacado fue el parejo rendimiento de Agustín Orion. El arquero mantuvo nuevamente su arco en cero, pero a diferencia de las dos primeras fechas tuvo una participación destacada.
Agustín Orion (7): El ex Estudiantes mostró la seguridad que hacía rato Boca no tenía en el arco. Dos tapadas en el primer tiempo, sobre todo un mano a mano con Figueroa, lo transformaron en el mejor de Boca.
Facundo Roncaglia (6): El lateral por derecha mostró algunos inconvenientes a la hora de la marca, en especial con Sperdutti, pero mejoró con el correr de los minutos. En ataque se lo vio muy apurado.
Rolando Schiavi (6): El experimentado central mostró su mejor cara en lo que va del campeonato. En las llegadas de Newell’s tuvo poca responsabilidad. Impasable por arriba.
Juan Insaurralde (5): Su espalda fue la más atacada por la Lepra, pero muestra más solvencia que el torneo pasado. Mejoró en el segundo tiempo. Reventó mucho la pelota.
Clemente Rodríguez (5): Con menos protagonismo que ante Unión, el lateral por izquierda estuvo mucho más controlado por un rival que le dejó poco espacio. Sufrió con Díaz.
Cristian Chávez (4): Mal partido del Pochi, quien no entró en sintonía con sus compañeros y estuvo por demás impreciso a la hora de manejar la pelota.
Leandro Somoza (6): El equipo necesitó mucho de su capacidad de recuperación. Estuvo algo impreciso a la hora de entregar el balón, pero su sacrificio fue clave.
Walter Erviti (5): De los buenos chispazos que tuvo ante Unión, poco se vio en Rosario. Corrió más de lo que jugó y debió ser reemplazado, en su lugar ingresó Sánchez Miño.
Juan Román Riquelme (5): Impreciso pero siempre importante a la hora de los ataques de Boca. Al enganche xeneize se lo vio incómodo por la presión de los volantes locales. Arrancó la jugada del gol.
Darío Cvitanich (6): Fue el jugador más peligroso de Boca en el partido. Volvió loco a Fideleff toda la tarde y generó espacios para que Viatri aprovechara. Fue reemplazado inentendiblemente por Mouche, no por el ingreso de Pablo sino porque era el más claro en ataque.
Lucas Viatri (6): Si bien vive del gol, Viatri crece día a día en su fútbol. En Rosario no la pudo meter (le sacaron un cabezazo en la línea) pero con una asistencia perfecta, le permitió a Mouche definir ante Peratta.
Pablo Mouche (7): No participó mucho en el juego, pero el gol lo convirtió en uno de los jugadores más desequilibrantes del partido.
Sánchez Miño y Erbes no jugaron lo suficiente para ser calificados.
F:muyboca
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