domingo, 12 de junio de 2011
Otra vez luchetti...y fiesta del Titán después del empate...
Mucha fiesta pero un sabor agridulce. Así se puede definir a la perfección la actuación de Boca ante Banfield en el último partido de Martín Palermo en la cancha de Boca. El equipo de Falcioni tuvo la victoria en las manos de Lucchetti. Pero el arquero volvió a mostrar sus falencias y un error suyo le dio el empate al Taladro. Colazo adelantó al equipo de Falcioni, que volvió a equivocarse en los cambios y se fue reprochado por la gente. Sin embargo, la gente de Boca esperó a la fiesta que le hicieron a Palermo luego del final del partido.
El primer tiempo mostró a un Boca protagonista pero sin tanta lucidez para llevarse por delante a un Banfield que fue a la Bombonera a intentar sacar un punto. Por eso no sorprendió que los del Sur le entregaran la pelota a los de Falcioni y buscaran lastimar de contragolpe. Pero el local no encontraba los caminos porque en los primeros minutos no aparecían ni Chávez ni Riquelme. Cuando el enganche empezó a hacerse cargo de la pelota el equipo comenzó a generar peligro.
Fue por el lado derecho, el lugar donde más peligro generó el Xeneize. Un par de remates de Riquelme, un zurdazo de Palermo y unos desbordes de Mouche. Pero la mala puntería le imposibilitó al equipo local irse al descanso con una ventaja que desde el juego mereció.
Pero fue una tromba Boca en el arranque del complemento y tuvo su recompensa rapidamente. Fue Colazo el que aprovechó un rebote de Bologna para poner el 1 a 0. La fiesta de la Bombonera era completa porque el Xeneize despedía a Palermo y seguía prendido en la lucha por jugar la Copa Sudamericana del año próximo.
Pero inentendiblemente, cuando mejor estaba andando Pablo Mouche el entrenador decidió que ingresara Diego Rivero para reforzar la mitad de la cancha. ¿El resultado? Un equipo que se tiró atrás y terminó recibiendo el empate cuando menos lo esperaba. Un blooper de Lucchetti (¿seguirá en Boca?) le permitió a Ferreyra poner el resultado final. Pero a la gente no le imprtaba eso ya que lo mejor llegaría después del pitazo final. Boca empató y se alejó de la Sudamericana, pero nadie se acordará de esta noche por el empate ante Banfield sino porque fue la noche en la que La Bombonera entera le hizo la despedida que su máximo goleador histórico se lo merece.
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