martes, 30 de agosto de 2011

El mejor en duda para el domingo.


Riquelme ya avisó que está en duda para el clásico. Le hicieron estudios y por la mañana puede haber novedades, pero no hay optimismo. Falcioni contó que, en todo caso, ya tiene en mente tirar atrás a Viatri y poner arriba a Mouche-Cvitanich.

"Terminé más o menos, veremos en la semana cómo estoy para el partido que viene". Esas fueron las últimas palabras de Riquelme en la noche del domingo, desde ese momento encendiendo el alerta acerca de su presencia en el clásico contra Independiente. Por algo lo dijo, porque terminó dolorido. Había estado en duda en la previa de San Lorenzo y al final pudo aguantar los 90 minutos. Y ahora, otra vez es duda. Por un problemita en un isquiotibial, el 10 ya dejó en claro que no puede asegurar su cuarto partido al hilo, contra el Rojo de Mohamed. Le hicieron estudios y esta mañana puede haber novedades. ¿Puede ser un desgarro? Algunos no son muy optimistas, pero... ¿Qué tenés, Román? En la vuelta al trabajo del Boca de Falcioni, se verá si lo suyo es leve o lo puede apartar del partido que se viene.

En un lunes libre de Boca, Riquelme se fue a hacer estudios y en pocas horas se conocerán los resultados. Por las dudas Falcioni, quien lo viene elogiando por sus actuaciones ("el domingo Román fue uno de los puntos altos del equipo, está haciendo un gran esfuerzo"), adelantó en una charla con ESPN de Radio Rivadavia que "analizo la posibilidad de poner a Mouche con Cvitanich y Viatri. Pablo está muy motivado, siempre que entra genera peligro y estamos muy contentos con su rendimiento". Precisamente éste es el tridente que probó el DT en la previa del Ciclón, por si Riquelme no jugaba: Lucas, el 9, tirado más atrás y tratando de crear con su técnica.

Con un equipo se que mostró más firme. Que viene recuperando "la mística", como comentó Falcioni. Que se viene haciendo más fuerte, como explicó Riquelme. Así larga Boca la semana previa a un clásico con Independiente en el que se juegan muchas cosas, teniendo en cuenta que el equipo del Turco llega de capa caída, tras la derrota en la Recopa y el empate con Argentinos. Habrá que ver si el 10, tan importante para este Boca, llega bien a Avellaneda.

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