
Desde que empezó este ciclo de Falcioni, el miércoles, Román Riquelme está trabajando a la par del grupo y entrenándose a fondo. Ayer, en el primer triple turno en Tandil, no fue la excepción. Hizo el primero, también el segundo y le dio duro en el tercero hasta que su cuerpo no aguantó más.
Las señales de que Riquelme está a full son claras en esta pretemporada. En ese último turno en el que tuvo que aflojar hizo todo para seguir y no pudo. Estaba junto con sus compañeros trabajando en la pista de atletismo cuando de repente se detuvo, estiró por unos minutos y arrancó de nuevo. Pero luego de continuar por un rato, tuvo que parar y pasar a moverse aparte. Sólo por precaución, claro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario