Con la lesión habrá que ir día a día esperando la mejoría.

Con la lesión habrá que ir día a día esperando la mejoría. ¿Y después de diciembre? Hasta Angelici, que se opuso al contrato de cuatro años, anunció que el 10 seguirá.

Juan Román Riquelme no es un hombre de tomar riesgos innecesarios. Una de su virtudes más salientes dentro de la cancha es el cuidado de la pelota y suele adherir a la teoría del Barsa en cuanto a la tenencia compulsiva de la pelota: “Si la tengo yo, el rival no me puede hacer un gol”. Por eso, muy a pesar de sus ganas de estar, de su compromiso con este ciclo, de la promesa a Ameal de tratar de estar en todos los partidos de acá hasta el final, se bajó del compromiso en Santa Fe. El dolor -a pesar de que los médicos coinciden en que el umbral del 10 es alto- es un buen disuasor, y cuentan que no es precisamente lo que le falta por estos días. El talón y la planta del pie izquierdos siguen inflamados y Román entendió que saltar a la cancha ahora mismo conlleva el riesgo de perderse el resto.

¿Qué pasará? El futuro es una incógnita. Si la pregunta remite a la lesión, habrá que ir día a día y seguir su evolución. En la semana recibió una inyección con corticoides para desinflamar la zona y eso hasta le permitió estar algunas horas con menos dolor, pero apenas le alcanzó para caminar. Cuando sufrió la fascitis plantar en el otro pie, estuvo más de un mes recuperándose. Ahora, sus ganas de estar son tantas que no habría que descartarlo para ningún partido (salvo el de mañana). Claro que esa misma pregunta puede tener una segunda lectura, más mediata, y cuya respuesta Román también espera, y es acerca de su futuro en el club.

“Si Ameal gana las elecciones, no tendré ningún problema y terminaré mi contrato. Si gana otro presidente, veremos si tiene ganas de que yo siga en el club”, tiró. El comicio en Boca es el 4 de diciembre y la frase de Riquelme tiene un claro destinatario: Daniel Angelici, el ex tesorero apoyado por Macri que se negó a firmarle el contrato por cuatro años.

La respuesta del candidato no se hizo esperar: “Riquelme tiene contrato con el club y va a seguir. Los contratos están para cumplirse”. Se sabe, Angelici suele mantener cierta distancia con los protagonistas, aunque es cierto que hizo un par de movidas para acercarse al 10: dos amigos suyos, el Negro Ibarra -para Inferiores- y Horacio Paolini -dirigente-, están en el equipo de campaña de Angelici.

Con los demás, no hay mucho para dudar. Ameal fue el hombre que más hizo para renovar el contrato del 10, que se conviritó en su bandera. José Beraldi, actual vice 1°, participó activamente de la negociación cuando estaba estancada. Con Robrto Digón mantiene una relación cordial. Y no hay problemas con Orlando Salvestrini.

¿Qué pasará, entonces? Román sigue. Lo que no se sabe es desde cuándo...