Por un lado, el delantero empezó con el pie derecho su estadía en Boca, ya que convirtió de cabeza para marcar la ventaja parcial en Barcelona. Por el otro, “El Flaco” tuvo una mala noche, hizo dos penales (uno inexistente), fue amonestado y mereció irse expulsado pero el árbitro lo salvó. Además, hicieron su presentación Agustín Orión y Franco Sosa. MIRÁ EL UNO POR UNO
El UNO POR UNO de los refuerzos de Falcioni:
Darío Cvitanich. Se lo vio muy movedizo e intentando generarse espacios con diagonales cuando Riquelme tenía la pelota. Además, dos minutos antes de convertir, recibió de Viatri, que se la había bajado de cabeza, en lo que fue la jugada más clara de Boca en ataque, mejor elaborada y que terminó desperdiciando. A pesar de medir 1,75, demostró que uno de sus fuertes es el cabezazo: se elevó y descolocó a Álvarez, que nada pudo hacer. Prometedor arranque.
Rolando Schiavi. Al “Flaco” se lo notó falto de ritmo, tal como venía ocurriendo en su etapa final en Newell´s. Sigue teniendo mucho oficio en la marca pero perdió la posición de sus marcadores en un par de ocasiones que derivaron en los tantos del rival. En el primero, dejó pasar a Osvaldo, que simuló una falta que el árbitro compró. Luego, corrió de atrás a Sergio García y logró punteársela para que no rematara, pero se la terminó dando a Osvaldo para que pusiera el segundo. Finalmente, tras una grosera falta sobre Thievy, facilitó otra ejecución desde los 12 pasos para Espanyol que culminó con el 3-1. El árbitro le perdonó la segunda amarilla por ser un amistoso. Mal debut.
Agustín Orión. No fue un partido para evaluar su actuación pero hay que decir que no tuvo nada que ver en ninguno de los tres goles. Dos fueron de penal y en el otro, no pudo evitar que Osvaldo la empujara a la red tras la “habilitación” de Schiavi. Se mostró sereno y confiado bajo los tres palos. No pareció haberle pesado el debut con la camiseta “xeneize”.
Franco Sosa. Tuvo pocos minutos en cancha e ingresó como lateral derecho en lugar de Facundo Roncaglia. Así y todo, tuvo tiempo para escalar por su sector en una ocasión y generar peligro en el área rival. Envió un centro a rastrón en la puerta del área grande, al cual Araujo no pudo llegar, en una de las jugadas mejor coordinadas en el ataque de Boca.
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