Mientras Boca negocia por Riquelme y Palermo, Zico quiere al 10 en el Flamengo y Ramón Díaz al Loco.

Juan Román Riquelme, estratega de la etapa más gloriosa de Boca, y Martín Palermo, responsable de haber roto todas las redes posibles en ese mismo segmento, no se cansan de repetir que sus deseos pasan por terminar sus carreras luciendo orgullosos la azul y oro sobre sus pechos. En Boca afirman que quieren que ambos renueven sus vínculos contractuales. Pero la tarea no es para nada sencilla, porque para que todo tenga un final feliz habrá que ponerse de acuerdo en números importantes. Muy importantes. Y mientras la situación se dilata pareciera que el panorama se oscurece, porque sus mega estrellas son buscadas.

La situación con el 10, quien ayer concurrió al consultorio del kinesiólogo Jorge Bombichino para dar el puntapié inicial en la rehabilitación de su rodilla izquierda, no varió demasiado. No hubo nuevas charlas. Pero en el entorno del jugador se comenta que el Flamengo de Brasil está dispuesto a tirar la casa por la ventana. Es más, el propio Zico viajaría a la Argentina para tratar de convencerlo para que decida sumarse al popular club carioca. Pero el presidente de Boca se tiene una confianza bárbara para llegar a un acuerdo y asegurarse la continuidad de Román, la manija del equipo pensado por Borghi.

En cuanto a Palermo, su representante, Gustavo Goñi, recibió una nueva oferta de parte de la dirigencia de Boca, en la cual se achican los objetivos que el club había ofrecido para llegar al número pretendido por el goleador histórico. Pero la cosa no cambió nada, porque, en la anterior conversación, quienes manejan los intereses del Loco ya habían dejado más que claro que no quieren hablar más de objetivos. Como si esto fuese poco apareció un sondeo de Jorge Berrio, manager de San Lorenzo.

El pueblo boquense está ansioso, quiere que sus ídolos sigan en el club. Claudio Borghi los quiere dirigir y los dirigentes con Jorge Amor Ameal a la cabeza lo saben. Por eso se reúnen permanentemente, establecen nuevas estrategias, pero aún no lograron el camino que los lleve a encontrar la solución para asegurarse a sus viejas estrellas.