El Titán hizo autocrítica y lanzó un fuerte mensaje para el plantel. "No tomamos el camino correcto",

No quería hablar. "Es preferible no hacerlo en caliente", intentó excusarse. Pero la presión periodística y su propia calentura lograron que Martín Palermo soltara un poco la lengua. Después de este fracaso, se esperaba una frase, un comentario, algo, de, quizás, el principal referente que tiene este plantel. Y mordiéndose los labios para no decir más cosas, soltó un "no estábamos a la altura" que sonó bien fuerte en los pasillos de la Bombonera. Para el 9, a juzgar por sus palabras, la eliminación de anoche fue la crónica de un final anunciado. "Y... El que tomamos no era el camino correcto. Si se llega a este momento es como consecuencia de cosas... Por algo se llegó a esto", trató de reflexionar.

Era evidente la bronca del delantero. Autocrítico, su frase fue un mensaje puertas adentro. Ya había lanzado una crítica futbolística dirigida al grupo cuando hace dos semanas se quejó públicamente de que era poco abastecido y de que a Boca le faltaba generar fútbol. De hecho, en el partido de anoche prácticamente no tuvo ninguna chance clara de gol. "Hay que analizar mucho, mejorar mucho, hacer una autocrítica general, hablar de las cosas en las que se fallaron para llegar a esto... Pero bueno, no hay que esconderse. Esta es la realidad de Boca hoy", dijo.

Embalado, varias veces hizo mención a algunas palabritas claves: "autocrítica", "análisis", "camino incorrecto"... Y no hizo falta que expresara estar "dolido, claro, como todos. Da bronca llegar a esta situación pero nos tenemos que hacer cargo. Seguro que ahora todos van a responsabilizar al técnico, pero la culpa la tenemos nosotros. Quedamos afuera de la Copa, el campeonato local ya lo perdimos. Cada uno tendrá que asumir sus propias culpas. Ahora no queda otra que jugar los cinco partidos que faltan del torneo y salir a la cancha a defender la camiseta de Boca con la mayor responsabilidad posible".

Pese a la bronca, sólo pudo esbozar una sonrisa cuando le preguntaron si en la interna del plantel se había roto un matrimonio (¿el de él con Riquelme?). La respuesta del Loco fue bien elocuente: "No sé, puede ser... De matrimonio a mí no me preguntes".