Habíamos sugerido que esta versión boquense no era de las mejores del siglo, pero tampoco esperábamos una eliminación temprana en casa, con dos resultados a favor y la dotación casi completa, ni preveíamos actuaciones tan bajas (Morel, Vargas, Riquelme, Palermo.) en una parada decisiva.
Por si interesa, el equipo tuvo unas cuantas oportunidades para convertir. El buen arquero uruguayo (si alguien piensa reforzar ese puesto, parece haber aquí un candidato) tuvo sólidas intervenciones. Probablemente no importe hablar de merecimientos: lejos de atenuar la bronca, tal vez la aumente.
Superado el primer reflejo de tirar todo al Riachuelo, será momento de analizar casos, pesos, edades, proyecciones. Está prohibido caerles a los pibes, claves en el último título. Para repetir en el plano internacional sus producciones locales, Forlin, Chávez, Gaitán, Mouche, Roncaglia y Viatri necesitan paciencia. ¿Carlitos Ischia? Más errores que aciertos en esta parte del año.
El golpazo nos hará recordar que nunca es fácil la Copa. Antes que eso, suele ser difícil superar la fase de grupos y hasta clasificarse para disputarla. De hecho, el Boca 09 no junta hoy los puntos que lo habilitarían para la Libertadores 10. Sumar la mayor cantidad posible en estas cinco fechas del Clausura pasó a ser la meta del semestre: poco para semejante inversión de tiempo, esfuerzo, dinero e ilusiones.
Esta es la realidad y hay que asumirla con garra xeneize. La revancha viene pronto
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