"Mi expectativa es ganar títulos, sé que es muy difícil pero mi meta es esa. La Copa Libertadores es mi anhelo, y a Boca vengo dulce", contó "El Burrito", uno de los protagonistas del mercado de pases del verano.
El jugador, que en diciembre pasado ganó el Mundial de Clubes con el Corinthians, fue pretendido por Boca, San Lorenzo y hasta llegó a sonar en River, Racing e Independiente. Finalmente llegó al "xeneize" por expreso pedido de Carlos Bianchi, pieza clave para lograr su arribo.
"La posibilidad de estar bajo el mando de Bianchi influyó mucho, es algo muy importante, más sabiendo que es él quien me pidió. Esa fue una de las principales cosas que pesaron, que me hicieron tomar la decisión de venir a Boca", reconoció.
Y agregó que en el club de La Ribera encuentra una combinación de factores estimulantes para pensar en grandes cosas: "Es un momento muy lindo para jugar en Boca desde todo punto de vista: se juega la Copa Libertadores, es la vuelta de Bianchi después de tantos años y tantos intentos de que regresara. Es una linda experiencia. Hoy me toca que me dirija el técnico más ganador de la Argentina", estableció.
Una vez consumada su llegada a Boca, el ex jugador de Vélez contó que mucho de lo que se habló de él no es verdad: "Eso de que todos me querían no es tan así. Cuando tuvieron que sentarse a hablar en serio sólo algunos aparecieron. Boca fue el que se sentó y viajó a Brasil por mí. San Lorenzo también estuvo muy interesado y le agradezco a Tinelli y a Pizzi, fue un orgullo que me hayan querido. Pero Boca hizo mucho esfuerzo y acá estamos".
Dice "El Burrito" que le hubiese encantado jugar con Riquelme ("Nunca tuve la oportunidad de hacerlo, sólo me tocó sufrirlo", recordó entre risas), pero destaca el nivel del actual plantel: "En Boca hay jugadores muy importantes…"
Entre ellos cuenta a Santiago Silva, a quien define como el centrodelantero con el que mejor se entendió en su carrera: "Con Santiago nos fue bárbaro. Él fue el goleador del Apertura 2010 y yo el segundo. En Vélez ese campeonato metimos 21 goles entre los dos. Fue tremendo", afirmó.
En declaraciones formuladas al diario Olé, el delantero asegura que no le pesará la camiseta: "Vengo del equipo más grande de Brasil con casi 40 millones de hinchas. Sé que alguno me dirá que esto es Boca y lo entiendo. Incluso allá en Brasil le tienen miedo a Boca. Si pueden, lo quieren evitar. Pero yo estoy preparado para este equipo".
Fuente: Playfutbol
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