Agustín Orion (9): Determinante en momentos claves. Un partido consagratorio, de esos que quedan para siempre en la memoria. Intervino con solvencia y sobriedad cada vez que fue exigido y cerró una noche inolvidable con el penal atajado frente a Rafa Moura.
Facundo Roncaglia (7): Fundamental para controlar a los laterales/carrileros del Flu. Sólido, fue impasable y clausuró su sector. El comodín de la última línea Xeneize que cumple en todos los puestos. Su renovación es una obligación.
Rolando Schiavi (6): El penal en la agonía del partido le restó un punto. El Flaco recuperó su mejor nivel y lo demostró en sus últimas actuaciones. Junto a Insaurralde anularon a Fred y al movedizo Wellington Nem. Además, cuando el Flu era puro centro desesperado, rechazaron absolutamente todo.
Juan Manuel Insaurralde (7): Partidazo del Chaco. Creció infinitamente con Schiavi junto a su lado. Frente al Flu, juntos, levantaron un muro infranqueable que el conjunto brasilero no supo perforar. Ganó de arriba, de abajo. Redondeó una magnífica actuación.
Clemente Rodríguez (7): Si bien no aportó demasiado a la fase ofensiva, fue clave en un partido que se ganaba o se perdía en los laterales. Con la colaboración de Erviti, sellaron su lateral. Buen partido de Clemente, más allá de su escasa proyección.
Pablo Ledesma (8): Uno de los mejores jugadores de Boca en el semestre. Volvió de Italia siendo un jugador mucho más completo, con presencia en el área rival y una personalidad que lo llevan a ser uno de los líderes del equipo. Comprende a la perfección lo que representa la camiseta azul y oro y juega en consecuencia.
Cristian Erbes (3): El punto más flojo en la estructura de Boca. Un cinco de juego que, por la ausencia de Somoza, debió hacerse cargo de la recuperación. Falló demasiado e incluso estuvo impreciso en los pases. Erviti, Ledesma y Chávez debieron sacrificarse para cubrirlo.
Walter Erviti (6): Generó poco juego, pero su colaboración inestimable en la faceta defensiva le permitió a Boca cortar el circuito del Flu. Se cerró para ayudar a Erbes y retrocedió para clausurar el flanco izquierdo junto a Clemente.
Cristian Chávez (6): Pochi no pudo vestirse de Riquelme pero cumplió una tarea trascendental parado casi como doble cinco al lado de Erbes y, pese a que no es su especialidad, batalló y recuperó.
Darío Cvitanich (9): Figura de la noche de Río. La rompió. Marcó el primer gol, luchó, complicó al fondo del Flu durante toda la noche y generó numerosas situaciones. Los dirigentes deberían pagar, casi sin pensar, la cláusula para adquirir definitivamente al Cvitanich.
Santiago Silva (6): Luchó más de lo que definió. Participó en la elaboración de ambos goles y complicó durante toda la noche al fondo del Flu.
Juan Sánchez Miño (7): Entra y rinde. Es uno de los puntales del fundamental recambio del equipo de Falcioni. Ingresó por Erviti para oxigenar el mediocampo y, con sus proyecciones, inquietó al fondo del Flu. Pisó el área en varias oportunidades y marcó el segundo gol.
Pablo Mouche (6): Ingresó a falta de veinte minutos para complicar con su velocidad en los contragolpes a un Fluminense volcado en ataque en busca del empate. Tiró el centro del segundo gol.
Diego Rivero (-): Jugó poco como para evaluarlo.
Fuente: MuyBoca
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